- El académico de la FAE, Guillermo Pattillo, afirma que la caída en 0,4% del indicador, la peor cifra en siete años, motivará a la autoridad a tomar esta decisión “en un lapso no muy prolongado”, debido a la situación inflacionaria del país. El especialista proyecta un crecimiento de 1,5% en 2016, “aunque la cifra puede ser levemente menor”.
El Banco Central informó que el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) correspondiente al mes de octubre cayó un 0,4% en comparación con igual mes del año anterior, representando la primera cifra negativa desde julio de 2009 (-2,7%).
Para el economista de la Universidad de Santiago de Chile, Guillermo Pattillo, la cifra de octubre provocará que el crecimiento de la actividad económica en el cuarto trimestre sea del orden de 0,5%. “Esa cifra probablemente motivará a la autoridad a inducir una baja en la Tasa de Política Monetaria en un lapso no muy prolongado hacia adelante”, sostiene.
“Todo sugiere que hay espacio para la baja dada la situación inflacionaria”, agrega.
Según el académico de la Facultad de Administración y Economía del plantel estatal, “la economía no está en ninguna fase de recuperación de su ritmo de actividad. Las cifras de periodos largos lo muestra con evidencia”.
Para el académico de la FAE, aunque el indicador “es un dato puntual y no hay que sobredimensionarlo”, sostiene que las causas que llevaron a este magro nivel son “más de fondo”, ya que si bien hay elementos externos que inciden, como la actividad minera, “la parte no minera viene también en un proceso de desaceleración”.
“De crecimientos que estaban por arriba de 2% a comienzos de este año”, explica Pattillo, “hemos estado por debajo de esa cifra durante este segundo semestre. Las cifras desestacionalizadas validan lo mismo: que el crecimiento anualizado de la actividad no minera es muy bajo”.
Por eso, señala que “con esta cifra de octubre, lo más probable es que el crecimiento de 2016 llegue como máximo a 1,5%, aunque puede ser levemente menor, y está por debajo de lo que el Banco Central había puesto como rango”.
“La tendencia, en el mejor de los casos, indica estancamiento en la tasa de crecimiento, ya que no está subiendo, tiene una leve tendencia a la baja y, por lo tanto, 2016 será incluso peor de lo que la autoridad pensó hace un mes y medio atrás. Esa tendencia se transfiere, sin lugar a dudas, a 2017”, indica.
En ese sentido, sostiene que “nuestra proyección es que el próximo año habrá un crecimiento del orden del 2%, pero con un primer semestre muy bajo. De hecho, nosotros proyectamos que el primer trimestre del año tendremos un crecimiento de 0%”.
“Independiente del efecto puntual en algunas actividades en el mes de octubre, lo que se percibe de estas cifras y de meses anteriores es que la economía sigue pegada en un valle de crecimiento bajo, que está en el entorno del 1,5%”, concluye.