Socializar experiencias de éxito, concretar redes de contacto y avanzar en la construcción de nuevos negocios, fueron los principales objetivos de la charla “Emprendedores exitosos: la oportunidad en el fracaso”, realizada el miércoles pasado (12) en el Salón Armando Quezada de la U. de Santiago de Chile.
La actividad fue organizada por la Fundación de Egresados y Amigos del plantel (Fudea), el Consejo de Desarrollo Social Empresarial (Cedes) y la iniciativa “Efecto Vikingo”, y contó con la presencia de los emprendedores Moisés Galarce, de la empresa Macrocom; Ana Villacura, empresaria del rubro gastronómico y dueña del restaurant “Villa Moreira”, y del ex alumno de nuestra Corporación, José Manuel Adasme, ingeniero informático del plantel y desarrollador de soluciones en el área de la robótica e informática.
Esfuerzo, constancia y responsabilidad
Moisés Galarce fue el primer emprendedor en dar a conocer su testimonio.
A su juicio, “el esfuerzo, la constancia y la responsabilidad permiten triunfar en un mundo complejo. Yo partí solo con un maletín, golpeando una puerta”, rememora.
El empresario detalló parte de su trayectoria, que comenzó, recuerda entre risas, reparando una calculadora, hasta consolidar una empresa de servicios de transportes con más de 25 trabajadores.
La clave, desde su mirada, radica en tener un sueño y persistir en ello, dejando de lado el temor al fracaso, considerándolo parte consubstancial del proceso de consolidación de un proyecto, donde, malas inversiones, falta de financiamiento y diversos problemas asociados, son parte de este trayecto hacia la meta personal. “Lo que diferencia al emprendedor de otros soñadores, es que él busca hacerlo realidad”, afirma.
Concreción de un sueño
Posteriormente, fue el turno de Ana Villacura, empresaria del rubro gastronómico y dueña del restaurant “Villa Moreira”, quien relató parte de su historia.
“Siempre mi sueño fue la gastronomía. Siempre me ha gustado cocinar y sentí que había una necesidad del público hacia la comida casera”, expresa.
Focalizándose en ese nicho, comenzó a elaborar un proyecto que incluyera elementos asociados a ese tipo de necesidad, rescatando tradicionales recetas, brindando un servicio de excelencia y generando un recinto acorde a este escenario en la comuna de Huechuraba.
“Tengo 51 años y hace poquito logré mi sueño”, señala.
Como consejo al público, llamó a ser perseverantes y, sobre todo, nunca perder la esperanza, ya que ésta “es la motivación de que todo se puede”, recalca.
Apropiarse de recursos gratuitos
El último expositor fue José Manuel Adasme, Ingeniero Eléctrico de la U. de Santiago, desarrollador de soluciones electrónicas e informáticas.
El profesional, que ha tenido una larga trayectoria proporcionando servicios a heterogéneas empresas del rubro telefónico, postal e incluso del área del retail, explicó su paso desde el mundo privado hacia el desarrollo de soluciones impulsadas por su persona.
Algunos de ellas, expuestas en la charla, fueron un kit de aprendizaje para electrónica y robótica, que posibilita interiorizarse en la materia de forma didáctica, con fines netamente pedagógicos.
También, un brazo robótico para la educación (RoboMat), diseñado para instruir sobre robótica, por medio de un elemento que posee características que requieren algoritmos complejos y evolutivos.
Adasme exhortó a los asistentes a apropiarse de las heterogéneas posibilidades de desarrollo gratuitas que se encuentran disponibles, que permiten, sin mayores costos, generar productos de primer nivel.
“Hay modelos completamente gratis. Lo clave, es creer y estar convencidos de que las cosas se pueden desarrollar”, enfatiza.
Interés por el emprendimiento
Daniel Zuloaga, estudiante de ingeniería eléctrica de nuestro Plantel, y uno de los impulsores de la iniciativa, se mostró muy satisfecho por la alta convocatoria de la charla.
“Superó todas mis expectativas, lo que quiere decir que hay un interés por el emprendimiento, lo que nos motiva a seguir realizando este ciclo con mayor fuerza”, enfatizó.
Por su parte, Paulina Hidalgo, directora ejecutiva de Fudea, valoró la masiva asistencia de egresados a la actividad.
“Me parece súper positivo, porque este tipo de instancias permite traerlos de vuelta a su casa, a través de temáticas y discusiones acordes a sus necesidades e intereses”, expresó.