• Centro de Integración, Ingeniería y Sociedad (CIIS) de esta Unidad Mayor, se adjudicó financiamiento del Gobierno Regional Metropolitano, para desarrollar un programa modelo, orientado a la transferencia de innovación e instalación de competencias en diez empresas manufactureras de la Región.

Transferir procesos de innovación e instalar competencias emprendedoras en pequeñas y medianas empresas manufactureras de la Región Metropolitana, es el principal objetivo del proyecto que recientemente adjudicó el Gobierno Regional Metropolitano a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Santiago, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad.

La iniciativa se denomina “Innovación de producto: agregación de valor, ampliación y profundización de la oferta de productos de PYMEs manufactureras de la Región Metropolitana”, y es uno de los cuatro proyectos, de entre los 28 presentados por diversas casas de estudios e instituciones, que obtuvo el financiamiento para ser ejecutado, por tratarse de “una iniciativa capaz de constituirse como un programa modelo a replicar, ajustándose totalmente a la estrategia regional de innovación vigente de la RM”, señala el informe final.

El proyecto, que lidera el Centro de Integración, Ingeniería y Sociedad (CIIS) de la Facultad de Ingeniería, apunta a la transferencia de innovación “design driven” y la instalación de competencias emprendedoras innovativas en diez empresas manufactureras de la Región Metropolitana.
Este proceso se realiza en base al enfoque de Sistema de Red de Valor, denominado MESO, desarrollado por el equipo multidisciplinario que presenta la propuesta y que está conformado por ingenieros, diseñadores, antropólogos y periodistas, quienes abordan la innovación desde su especialización, develando la complejidad y la cultura de la misma.

La directora del Centro CIIS y del proyecto, Dra. María Teresa Santander, explica que “la relación entre el empleo y el nivel de ventas del segmento de empresas manufactureras evidencia un débil encadenamiento entre la cantidad de personas ocupadas y el nivel de valor que representa su producción en el conjunto. Esta situación hace pensar en lo atractivo de diseñar e implementar estrategias de agregación de valor que reduzca gradualmente esta incongruencia.

Por ello, el propósito de la transferencia es agregar valor a productos manufacturados (innovación incremental o radical) junto con  generar capacidades de replicabilidad a través de la difusión de buenas prácticas en innovación de productos, acordes a los códigos culturales de los mercados locales y globales”.
El trabajo se desarrollará en cinco fases: selección de empresas y diagnóstico, inmersión en el proceso de innovación Design driven, generación de propuestas de valor, desarrollo de prototipos innovativos e integración de un nuevo modelo de negocio.

Para el decano de la Facultad de Ingeniería, Ramón Blasco, la adjudicación de este Fondo de Innovación para la Competitividad significa una gran noticia para la Facultad, pues refuerza la labor y la vocación de vinculación de esta Unidad Mayor con el sector productivo y el fomento de la innovación y el emprendimiento”.

“Estamos muy esperanzados en obtener interesantes resultados con las pequeñas y medianas empresas que serán intervenidas, tanto en el desarrollo de productos innovativos y la instalación de competencias innovativas en el capital humano de la empresa, como en la transformación en sus modelos de negocio”, finaliza.