El cumplimiento de los estándares de calidad y de excelencia en formación de postgrado del Magíster en Ciencias de la Comunicación, de la Escuela de Periodismo, fue motivo para que la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) certificara al programa de estudios por un periodo de dos años.
De carácter académico, el Magíster tiene como propósito que sus egresadas/os adquieran las herramientas para analizar y evaluar las diversas controversias sociales presentes en los escenarios comunicacionales desde una perspectiva crítica, considerando los principales debates teóricos y conceptuales en el ámbito de la comunicación pública.
El Dr. Juan Pablo Arancibia, director del programa, señaló que en la práctica la acreditación significa entrar a “un círculo virtuoso”, puesto que se incrementan las condiciones y los apoyos institucionales para el mejoramiento, como para consolidación sostenida del programa.
Igualmente, dado que el proceso de acreditación implica y compromete un plan de mejora, exige planificar, organizar y realizar un conjunto de acciones destinadas a incrementar u optimizar cada uno de los aspectos que son evaluados en un proceso de estas características; al mismo tiempo que permite a las/os estudiantes acceder a las postulaciones y concursos de diversos sistemas de becas que existen para realizar postgrados. Por ejemplo, las becas de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo de Chile (ANID).
El Dr. Arancibia explicó que la acreditación “reafirma y fortalece el proceso de maduración y cualificación que se venía impulsando como Escuela de Periodismo y como programa de estudios. Significa dar un salto cualitativo en la proyección y consolidación del Magíster, afianzando y fortaleciendo su vocación por la excelencia académica, la investigación y generación de conocimientos, que contribuya al análisis y comprensión de la comunicación pública en el marco de las crecientes y complejas transformaciones de la sociedad contemporánea”.
Sin embargo, “quizás lo más importante, es que garantiza el proceso de formación, aprendizaje y desarrollo académico de quienes cursan y egresan del Magíster. Esto tiene un impacto significativo y virtuoso sobre el estudiantado, pero también sobre el cuerpo académico que compromete su trabajo y dedicación tanto en el proceso formativo como en la producción de saber que fundamenta al programa”, agregó.
Con respecto al desarrollo del proceso, el Dr. en Filosofía Política valoró que existiese “un equipo amplio de colegas y funcionarios/as con diversas tareas que colaboraron en las distintas etapas y dimensiones del proceso de acreditación, por ello, podemos señalar a las/os estudiantes ―a los/as actuales y a quienes se incorporarán―, que el compromiso fundamental de todo este grupo de personas (del Magíster, de la Facultad de Humanidades y de toda la Universidad) es la vocación por la calidad y la excelencia académica, que estamos empeñados en la mejora progresiva y creciente del programa, en virtud de asegurar un significativo y valioso proceso de aprendizaje y conocimiento inspirado en la vocación por lo público, además, de aportar al desarrollo de nuestra sociedad”, remarcó.
La acreditación comenzó el seis de octubre de este año y se extenderá hasta el mismo día y mes de 2023.
Desafíos
Esta es la primera vez, desde su creación en 2010, que el equipo y la comunidad del Magíster se enfrentan al proceso de acreditación. En esa dirección, el Dr. Arancibia comentó que, al momento de comenzar con la tramitación de la certificación, el equipo que lidera tenía dos convicciones.
“La primera, es que habíamos logrado generar ciertas condiciones y acervos significativos que posibilitaban nuestro propósito principal de acreditar. La segunda, es que esto era solamente el comienzo, pues todavía nos resta mucho por hacer, tenemos bastante trabajo por delante y debemos mejorar una serie de aspectos, pero también optimizar otros”, advirtió.
En ese sentido son diversos los desafíos, que conciernen a distintas dimensiones, los que se avizoran y detalló algunos. “Por un lado, fortalecer el cuerpo académico del programa, proveer o generar mejores condiciones para el desarrollo de la investigación y la circulación de saberes en torno al campo y los problemas de la comunicación pública. Por otro, incrementar y mejorar condiciones para ampliar nuestra capacidad de recibir a nuevas y nuevos estudiantes que ven en este programa académico la posibilidad real de una experiencia de aprendizaje y conocimiento que les proyecta en su futuro desempeño académico, y desde la comunicación pública constituir un aporte a la mejora de nuestra sociedad”.
Finalmente, Arancibia explicó que la acreditación se ha entendido “como un proceso de mejora continua, de examen y autoevaluación del programa, donde en conjunto podamos ir construyendo y consolidando el proyecto académico del magíster, que se entronca con la misión, los principios y valores fundamentales que desarrolla la Escuela de Periodismo y nuestra Universidad”.
Para las personas interesadas, las postulaciones para el Magíster en Ciencias de la Comunicación comienzan en noviembre. Para conocer requisitos y condiciones de ingreso puedes revisar su página web. Cabe destacar que el programa cuenta con un sistema de becas de rebaja de arancel de hasta un 50%, al que pueden postular las/os estudiantes cuando estén matriculadas/os.