El Senado aprobó en general el proyecto que busca regular el tiempo que destinan en tareas para la casa los estudiantes de colegios que reciban una subvención del Estado y tengan Jornada Escolar Completa. Tras conocer este hecho, la ministra de Educación, Adriana Delpiano, sostuvo a mediados de semana que “ojalá no tengamos la teoría del péndulo, que de mucha tarea pasemos a prohibirlas. Además, son leyes difíciles de vigilar, de hacer cumplir. Creo que la tarea eliminada absolutamente es tan arbitrario como tener a los niños recargados de tareas en la casa”.
Sobre la supervisión del proyecto, el académico del Departamento de Educación, Dr. Jaime Retamal, sostuvo que este “no es difícil de fiscalizar porque los padres, después de muchas reformas en los últimos años en el sistema, tienen muchas más facilidades para advertir al Ministerio de Educación si algo no está funcionando bien en las escuelas”.
El doctor en educación ejemplifica esta situación, señalando que “los padres llaman si los niños sufren bullying o si los profesores hacen mal su trabajo, y el Mineduc va con la Superintendencia de Educación a fiscalizar los colegios y pedir antecedentes”.
Por eso, insiste en que el proyecto, una vez implementado, “será sumamente sencillo de fiscalizar. Serán los padres quienes llamen a los teléfonos correspondientes del Mineduc para decir si algo no funciona o no está de acuerdo a la ley. La ministra está equivocada en este sentido”.
Por otra parte, el especialista llama a la ministra a pensar “positivamente” sobre la disposición de los profesores para cumplir las normativas que impone el sistema educativo. “Si la ley dice que no hay que hacer algo en las escuelas, los profesores cumplirán con esa ley. La ministra desconoce la buena fe de los profesores y directores”, sostiene.
“La ministra debiera pensar más positivamente en los profesores y directores. Hay que pensar menos en la policía que va a fiscalizar si se cumple o no la ley, y más en la autonomía, independencia y buena fe de los profesores y directores de escuelas”, agrega.
Finalmente, hace la salvedad de que “el sistema escolar chileno ya está lleno de reglamentaciones legales, y cualquiera que trabaja en el sistema sabe que está lleno de decretos y leyes, una norma más no es el problema”.
Las tareas no se eliminan, solo se regulan
El doctor Retamal es enfático al señalar que el proyecto no elimina las tareas. “La ministra está desenfocada porque nunca se ha dicho que se va a eliminar por completo las tareas, sino que se va a regular su tiempo, algo que ya ha hecho Francia, Bélgica, algunos estados en EE.UU., en Inglaterra, etcétera”, ejemplifica.
“Aquí no iremos de un péndulo a otro, sino que se trata de racionalizar el tiempo escolar y otorgar mayor libertad a las familias con el tiempo de ocio juego y diversión de los niños en sus casas. Vamos a llegar un punto en que lo normal sea que los niños hagan 15 o 30 minutos de tarea en sus casas, no más”, agrega.
Repensar la JEC
Finalmente, el experto concluye que “debiéramos repensar el tiempo escolar en Chile, es una tarea pendiente, sin duda. En Francia, se prohibieron las tareas para la casa en el contexto de repensar todo el tiempo escolar. Hacer una evaluación de la Jornada Escolar Completa en Chile es sumamente necesario, para saber si ayuda o no a los estudiantes en sus aprendizajes y a mejorar no solo en los indicadores, sino también en su calidad de vida. Está pendiente en este país una discusión en torno a la JEC”.