Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra cada 14 de junio, la enfermera Lylian Macías, se refirió a los mitos que existen en torno a la donación y a la necesidad de realizar campañas más efectivas para aumentar el número de donantes, que en Chile está en un porcentaje muy bajo.
Macías menciona que sólo el 34% de las donaciones son altruistas, es decir, “los donantes no esperan nada a cambio; mientras que el otro 66% corresponden a donantes que tienen a algún pariente o conocido que necesita sangre por algún motivo de salud”.
La enfermera señala que son muchos los mitos que existen en relación a la donación de sangre y por lo mismo es que es necesario que la población antes de hacerlo busque la información adecuada. En relación a los mitos, uno de los más recurrentes es si una persona tiene tatuajes o piercings no puede donar sangre. “En este caso, la persona sí puede donar sangre, una vez pasado 8 meses de haberse tatuado”.
Lo mismo sucede con quienes padecen alguna enfermedad crónica como hipertensión y diabetes. “Estas personas también pueden donar si al momento de hacerlo tienen sus niveles controlados”, continúa.
La académica agrega que en el caso de la marihuana “se puede donar sangre después de 12 horas de haberla consumido. La hepatitis, en cambio, es motivo de inhabilidad para donar en todos sus tipos A, B o C, excepto si la persona padeció la enfermedad antes de los 12 años en el caso de hepatitis A”.
En relación al procedimiento, la enfermera explica que el procedimiento para donar sangre incluye una evaluación previa de los signos vitales del donante y una entrevista para detectar conductas de riesgo, que se hace de manera personal y privada. “Sin embargo, independiente a este procedimiento, lo cierto es que toda la sangre se testea y se revisa antes de que ingrese al banco de sangre. Por lo tanto, si hay una persona que tiene el VIH y no lo sabe, en ese caso, la sangre se desecha y se le avisa al afectado”.
Macías haco un llamado para que las campañas de donación de sangre apelen a la emotividad. “En nuestro país, prácticamente no existen campañas que concienticen sobre la importancia de salvar vidas. Por eso, es necesario que las campañas cuenten historias reales, de gente que ha sido benefeciada con la donación de sangre.