- En el Ciclo de Coloquios de Física, organizado por nuestro Plantel, el magíster Mauricio Echiburú presentó una investigación que aporta a la enseñanza de la Física. Se trata del famoso tiro en el palo de Mauricio Pinilla, ocurrido en el minuto 120 del partido en que la “Roja” enfrentó a Brasil, en el Mundial de Fútbol 2014. “Se me ocurrió ocupar el ‘palo de pinilla’ como material pedagógico para que los estudiantes saquen información relevante del video y deducir fenómenos como la velocidad con la que iba la pelota, la velocidad con la cual rebotó, cuánto tiempo se demoró, si se deformó o no, entre otras”, comentó el responsable del estudio, quien imparte docencia en la U. de Viña del Mar.
El paso de la selección chilena por el Mundial de Fútbol de Brasil 2014, dejó una imagen grabada en la retina de los hinchas: el minuto 120 del partido en que la “Roja” enfrentó a Brasil por el paso a cuartos de final.
Cuando estaban empatados 1 a 1 en el marcador, el delantero Mauricio Pinilla lanzó un tiro que golpeó en el travesaño, obligando a que el partido se definiera en lanzamientos penales.
Este suceso tan llamativo de la historia del fútbol chileno fue objeto de un análisis físico por parte del magíster Mauricio Echiburú, académico de la U. de Viña del Mar, quien participó en la cuarta jornada del Ciclo de Coloquios de Física de nuestra Casa de Estudios.
En la actividad, el investigador presentó un “Análisis físico del minuto 120 del partido Chile-Brasil en el Mundial de Futbol 2014”, donde revisó las distintas características físicas del disparo del seleccionado nacional, llegando a resultados bastante interesantes.
Al ver las repeticiones de la jugada en internet, el académico pudo observar varias características físicas particulares e interesantes de estudiar. Lo recto del disparo y la ausencia de rotación en el balón, fueron algunos de los aspectos que llamaron su atención.
De la cancha al aula
“Se me ocurrió entonces, ocupar el ‘palo de Pinilla’ como material pedagógico para que los alumnos pudiesen sacar información relevante del video y deducir fenómenos como la velocidad con la que iba la pelota, la velocidad con la cual rebotó, cuánto tiempo se demoró, si se deformó o no, entre otras”, comentó.
Los resultados de su investigación serán publicados próximamente en el “Latin American Journal of Physics Education”.
Por ahora, los antecedentes que obtuvo los ha ido dando a conocer entre profesores y estudiantes de enseñanza media, dictando también charlas en el Programa Explora de Conicyt. Además, el profesional se mostró esperanzado en la aplicación de este método en la enseñanza superior, argumentando que “a pesar de las diferencias entre el nivel medio y el nivel universitario, la aplicación de esta metodología es totalmente factible”.
A su vez, el investigador se mostró a favor de las metodologías activas de enseñanza, donde el estudiante se hace partícipe del proceso educativo, no obstante, reconoce la necesidad de incorporar herramientas didácticas para motivar a los alumnos.
“La utilización de estos recursos didácticos es crucial, porque ayudan a motivar y entretener a los estudiantes, les plantea un desafío, generando un aprendizaje duradero y sostenido. Esta es la dirección que debiese tener la enseñanza de las ciencias”, comentó Echiburú.
En cuanto a los resultados del análisis, el balón recorrió 16 metros entre el jugador y el travesaño, alcanzando los 108 kilómetros por hora, el balón no rotó pues el aire alrededor se encontraba en régimen turbulento y al golpear el balón en el travesaño se deformó alrededor de siete centímetros.
El académico, además, señaló que si la pelota hubiese ido a menor velocidad y rotando, “probablemente hubiese sido gol”.