- En el marco del debate sobre el aborto, la matrona de la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la Institución, Yennifer Márquez, señala que también es importante generar leyes que permitan condiciones para un parto respetado -en que las madres puedan decidir, de manera informada, el modo en que quieren dar luz- y se penalice la violencia obstétrica.
La Escuela de Obstetricia y Puericultura del Plantel no ha estado ajena al debate en torno al aborto, ni tampoco en lo que se refiere al modo en que nacemos, y por lo mismo, durante estas últimas semanas ha organizado una serie de actividades para promover el concepto de parto respetado.
La matrona y académica de la Escuela,Yennifer Márquez, indica que el objetivo final de estas acciones, es que las mujeres conozcan el significado del parto respetado y lo internalicen. “Creemos que es importante que más allá de la celebración que se realiza cada año, las mujeres conozcan de qué se trata el parto respetado y cómo se puede hacer efectivo”.
Este concepto surge con fuerza a principios del año 2000 y se define como un parto en el que se respetan los tiempos normales de la mujer y el niño/a que va a nacer. Un parto en el que no se realizan intervenciones innecesarias, no se aplican protocolos rutinarios por sistema y donde el nacimiento se desarrolla de la manera más natural posible, respetando a la familia en sus particularidades.
Tal como asegura Yennifer Márquez, el concepto lleva implícito una mujer debidamente informada, que podrá decidir cómo quiere tener a su hijo, una mujer con libertad de movimientos, decidiendo con quién quiere estar acompañada. “El parto respetado no es sinónimo de sin anestesia, sin medicamentos, sin tecnología, sino que se trata de respetar a la mujer y a su pareja, evitando las intervenciones innecesarias y procedimientos estandarizados”.
Si bien el parto respetado ha tomado fuerza estos últimos años,la profesoraasegura que existen varios mitos al respecto. “El principal temor de las mujeres para tener un parto natural es el dolor. Culturalmente hemos aprendido que el dolor es malo y se asocia a sufrimiento. Desconocemos que el dolor del parto tiene un sentido y significado, que si se vive de manera consciente y acompañada, la mayoría de las mujeres es capaz de tolerarlo de muy buena manera y con muy buenos recuerdos”.
Probablemente muchas mujeres se preguntan qué condiciones deberían darse para tener un parto respetado. A juicio de Yénnifer Márquez, “lo primero es que estén informadas, de tal modo de decidir cómo quieren que nazcan sus hijos, convirtiéndoseen protagonistas de este momento y no sólo en espectadoras, como sucede hoy, en donde es el equipo médico el quetoma las decisiones”.
Finalmente, la matrona indica que en los últimos años las mujeres han ido adquiriendo protagonismo en torno a este tema, “principalmente gracias a la fuerza de las redes sociales, donde se han organizado para participar en talleres y actividades relacionadas”. Sin embargo, dice, queda mucho por hacer. “Tal como hoy se discute la necesidad de legislar sobre el aborto, es fundamental que existe una leyque establezca el respetoa los derechos de las mujeres en cuanto al modo en que desean tener a sus hijos, como sucede en Argentina y Venezuela, países donde se penaliza la violencia obstétrica y se vela para que se cumplan las condiciones de un parto respetado”, concluye.