La encuesta Cerc, dejó de manifiesto que la ciudadanía confía mayoritariamente en las Universidades Estatales, superando a tradicionales actores como la Armada, el Ejército o el Hogar de Cristo.
Definitivamente la educación se tomó la agenda informativa de Chile. Así lo demuestra la encuesta del Centro de Estudios de la Realidad Contemporánea (CERC), dada a conocer este martes (27), que destaca por la histórica baja en la aprobación de la gestión del Presidente Sebastián Piñera, a un 22 por ciento.
Sin embargo, no es la única novedad que el estudio arrojó, ya que se entregaron resultados que tienen que ver con el conflicto estudiantil. Así, Un 89 por ciento de los encuestados apoya las demandas estudiantiles, mientras un 71 por ciento está a favor de un plebiscito para encontrar alguna solución al problema.
La encuesta, además, entregó un dato relevante: las Universidades Estatales, son las instituciones más confiables para la ciudadanía, alcanzando un 56 por ciento, por sobre el 51 por ciento de las pequeñas empresas y el 50 por ciento de la Fuerza Aérea.
Siguen en el listado, la Marina, el Ejército y la Iglesia Católica. Cierran el registro, con un 17 por ciento el Senado y la Cámara Baja, mientras que los partidos políticos, sólo alcanzan un 9 por ciento.
Para el rector de la Universidad de Santiago y presidente del Consorcio de Universidades del Estado, Juan Manuel Zolezzi, si bien en las anteriores mediciones no se consultaba sobre la confianza de la ciudadanía en las Universidades, “resulta un acierto la decisión de incluirlas, porque hemos sido actores relevantes de la demanda ciudadana desplegada en los últimos meses”, aseguró.
La autoridad universitaria agregó que “no nos queda más que valorar que el mensaje en el que hemos insistido por años, esto es, el rol que juegan las universidades públicas en el desarrollo del país y su democracia, es fundamental. Entendemos que si los ciudadanos confían más en sus universidades -las universidades de todos los chilenos- por sobre instituciones tan relevantes como la Iglesia, Fuerzas Armadas y los poderes principales del Estado, como rectores tenemos una gran responsabilidad: seguir luchando para que la educación pública de calidad siga abriendo espacios a la movilidad social y a jóvenes talentosos de sectores vulnerables”.
Zolezzi plantea que este apoyo ciudadano los obliga a redoblar esfuerzos en la defensa de la educación pública, aunque también cree que es “un mensaje para el Gobierno y el Parlamento, en cuanto a que se debe cambiar el actual trato con las Universidades del Estado, cuestión en que hemos venido insistiendo por largo tiempo en lo relativo al financiamiento, en particular, tanto para desarrollar investigación con impacto país, como para llevar a cabo los planes de desarrollo institucionales”.
“No puede sorprendernos”
Para Clarisa Hardy, psicóloga, antropóloga y miembro de la Junta Directiva de la Universidad de Santiago, esta noticia “no debe sorprendernos”, ya que “si uno mira el desenlace laboral y ocupacional de los estudiantes que se titulan en las universidades estatales -también las del Cruch- se revela la confianza que tienen en general, tanto en el ámbito público como privado, la calidad de los profesionales, hecho que se refleja en la opinión pública”.
Hardy, quien además fue ministra en la administración Bachelet, aseguró que probablemente hay una mayor visibilidad y legitimidad, puesto que encabezan el movimiento por la demanda de reformas educacionales.