La investigación en la Usach no se detiene durante el receso de verano
Durante la mayor parte de febrero, la Universidad de Santiago de Chile realiza una pausa en sus habituales labores lectivas, manteniéndose en un período de receso que permite a la comunidad retomar energías para el resto del año. Sin embargo, el trabajo en laboratorios, oficinas de administración y en obras de construcción sigue siendo intenso en el campus.
Una muestra de lo anterior es el Laboratorio de Neurociencia donde los investigadores continúan desarrollando tareas de gran relevancia científica, vinculadas, principalmente, a los procesos de memoria y aprendizaje.
“Ninguna Universidad que se ajuste a ese concepto, debería detener la investigación”, señaló, al respecto, el director del laboratorio de neurociencia de la Facultad de Química y Biología, Dr. Bernardo Morales Muñoz.
El investigador y académico, quien también es vicerrector de Apoyo al Estudiante, explicó que, el trabajo que desarrollan en este centro científico, consiste en investigar “cómo el cerebro es capaz de almacenar la información a través de modelos de plasticidad sináptica”.
“Lo que hacemos, específicamente, es generar, en ratones, un modelo de síndrome de déficit atencional e hiperactividad, a través del consumo de nicotina. Y una de las características que nos hemos encontrado es que el proceso de maduración de las espinas dendríticas, que es donde se forman las sinapsis, resulta inconcluso. Por lo tanto, lo que estamos estudiando en este instante es cómo revertir ese daño”, señaló Morales.
El director del Laboratorio de Neurociencia agregó que, actualmente, están realizando pruebas con Atomoxetina, un fármaco que no es estimulante del sistema nervioso central, a diferencia del conocido Ritalin.
En palabras de Morales, la Atomoxetina “tiene un efecto bastante importante en revertir este síndrome de hiperactividad y eso es lo que estamos probando nosotros”, dijo.
“En enero se publicó el paper en la revista Neuroscience, donde nosotros demostramos que la Atomoxetina es capaz de revertir los procesos de plasticidad sináptica como potenciación de larga duración, y ahora fuimos más allá y observamos lo que pasa a nivel morfológico”, agregó.
Esta investigación forma parte de un proyecto Fondecyt que cuenta con colaboraciones internacionales y representa solo una de las tantas iniciativas en las que trabaja este centro. Se trata de investigaciones de gran relevancia, que han posicionado al Laboratorio de Neurociencia de la Facultad de Química y Biología de la Universidad de Santiago, como un referente a nivel nacional e internacional en la materia.
Y así como el Laboratorio de Neurociencia, son diversas las investigaciones que, durante febrero, continúan su desarrollo en nuestro Plantel, sosteniendo la permanente contribución de nuestra Casa de Estudios, a las ciencias y el conocimiento.