Adens González Chia, doctora en Ciencia y Tecnología de los Alimentos: “Los avances en paridad de género eran necesarios”
La Dra. Adens González se desempeña en el área de investigación y desarrollo del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de Alimentos (Cecta), pero desde la niñez su interés estuvo en los animales, lo que la llevó a estudiar medicina veterinaria en la Universidad de Chile.
Su tesis de pregrado se orientó al uso de un biomaterial, la membrana de la cáscara de huevo, para inhibir la regeneración ósea. Para ello experimentó con conejos y ratas. ”En los perros, hay una patología que se llama radius curvus, que se produce como consecuencia de la osificación temprana del cúbito dejando de crecer y restringiendo el crecimiento del radio, el cual se curva. Al ser el antebrazo un sistema óseo par, la detención del crecimiento de uno interfiere en el crecimiento del otro, casi siempre provocado por un traumatismo”, explica.
Adens fue primera generación de su familia paterna en egresar de la educación superior y tras el pregrado estuvo entre sus planes futuros continuar un doctorado, sin embargo, las condiciones económicas no se lo permitían y la beca de Conicyt le fue esquiva en ese momento. Por ello, comenzó a trabajar en el extremo sur del país, en la región de Magallanes, donde dedicó sus esfuerzos a la inseminación y transferencia de embriones de ganado ovino.
Tiempo después el destino la llevaría al norte de Chile, a su natal Iquique. Tras participar en un concurso público de la Seremi de Salud de Tarapacá, y con apenas 24 años, lo ganó y mantuvo una jefatura en el Departamento de Acción Sanitaria durante dos años, que recuerda no fue fácil debido a que funcionarios que tenía a cargo cuestionaban su juventud para el cargo. Entre sus funciones estaba el fiscalizar la producción y manipulación de alimentos durante festividades religiosas como La Tirana o San Lorenzo. “En ciertas celebraciones se faenan llamas y alpacas, y hay decomiso de alimentos en mal estado o falsificados”, sostiene.
La Universidad de Santiago de Chile se transformaría años más tarde en su nueva Casa de Estudios y se integraría al equipo de investigación del Cecta.
-¿Qué hizo que prefiriera a nuestro Plantel para su doctorado?
-Si bien el doctorado de la Usach no era de los más conocidos, su perfil era más tecnológico, lo encontré novedoso, era relativamente nuevo. Mi tesis tuvo un componente fuerte en investigación tanto en alimentos como en animales, llegamos a un producto, participé de congresos nacionales como internacionales, y publicaciones. Mi profesor guía fue Claudio Martínez, que en ese entonces colaboraba en un proyecto Fondef de la Universidad de Los Lagos, en Osorno, relacionado con alimentación de larvas de peces para la diversificación de la acuicultura chilena. Durante la parte experimental trabajé también en la Universidad Católica del Norte en Coquimbo. Acá el desafío fue la organización, tenía que viajar mucho.
Adens se titula como doctora en Ciencia y Tecnología de los Alimentos en 2016 y participa en un concurso para ingresar al Cecta. “Mi condición fue muy particular porque estaba embarazada y pensé en excluirme, pero fue todo lo contrario. Le comenté mi condición al director de Cecta, en ese entonces José Luis Palacios, y me aconsejó que si me sentía apta no declinara. Quedé seleccionada en el cargo y trabajo aquí desde 2017. Mi labor es apoyar el levantamiento de proyectos con otras investigadoras e investigadores, el desarrollo de los propios en el área de inocuidad y calidad de alimentos, como también promover iniciativas en colaboración con el sector público y privado del rubro alimentario”, comenta.
-Actualmente usted está dedicada además a postular a un Fondef Idea I+D, que se relaciona con antioxidantes presentes en material de descarte de productos agrícolas. Cuéntenos más de esta iniciativa.
-En sintonía con las tendencias mundiales en seguridad alimentaria y sustentabilidad de insumos para dietas acuícolas con una economía circular como modelo sostenible, la idea es desarrollar un ingrediente biactivo natural a partir del descarte de la agroindustria del berry para alimentos de uso en acuicultura. Ya tuvimos un avance con un proyecto Corfo con buenos resultados previos y ahora queremos llevarlo a un prototipo de ingrediente más elaborado a nivel de laboratorio y validado en un entorno relevante. Las empresas asociadas son productoras de berries que generan residuos agrícolas que actualmente desechan y una piscicultura interesada en la utilización del alimento.
-Dra. González, ¿cómo valora usted los avances en materia de género?
-Estoy muy de acuerdo con la paridad, idealmente natural, no forzada por cupos, aunque entiendo que se requiere este proceso para que luego, cuando ya esté establecido, se dé naturalmente la representación de los géneros. Siento que debe ser por capacidades. Hoy como madre veo la diferencia. En España está bien regulado y por ejemplo en el postnatal obligan a que sea equitativo entre madre y padre. El padre debe hacer un alto y buscar la forma de estar con su hija o hijo. Las científicas en particular deben retardar o descartar la maternidad para ser competitivas al nivel del hombre. Siento que lo que se ha avanzado y se está haciendo era un paso necesario.
Para la Dra. Adens González, el Cecta es su casa y el perfil del egresado del programa de Doctorado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Usach cada vez supera al anterior. “Salen mejor preparados, con más herramientas y publicaciones. La Universidad de Santiago es como una gran ciudad, representativa no tan solo de la capital, sino a nivel país de una mirada importante de la sociedad”, concluye.