Dr. Aldo Saavedra:

Académico de Ingeniería Química interviene en foro internacional sobre importancia del agua en la salud pública

El Dr. Aldo Saavedra formó parte de este diálogo donde compartió panel con destacados investigadores del continente que reflexionaron sobre la importancia del agua en la salud pública, y cómo la pandemia ha visibilizado la desigualdad que generan los organismos operadores en muchos países de América Latina y que no han podido garantizar la correcta distribución del elemento en la población.
“Hay una re­la­ción cla­ra en­tre la pan­de­mia, la pro­vi­sión y el sa­nea­mien­to del agua. Una co­rrec­ta ges­tión de este re­cur­so hí­dri­co po­si­bi­li­ta me­di­das ade­cua­das de hi­gie­ne y, por ello, im­pul­sa a tomar me­di­das para des­con­ta­mi­nar, po­ta­bi­li­zar y trans­for­mar el sec­tor del agua” se­ña­ló el Dr. Saa­ve­dra, quien es experto en la desa­li­ni­za­ción y tra­ta­mien­to de aguas para su em­pleo en rie­go agrí­co­la, agua po­ta­ble y pro­ce­sos pro­duc­ti­vos.
Hoy, una de cada tres per­so­nas en Amé­ri­ca La­ti­na no tiene ga­ran­ti­za­do el ac­ce­so al agua lo que en situación de pandemia es un problema que ha hecho crisis. Es­tas fue­ron las con­clu­sio­nes del pri­mer ejer­ci­cio de “Diá­lo­gos NCC”, una ini­cia­ti­va del No­ti­cie­ro Cien­tí­fi­co y Cul­tu­ral Ibe­roa­me­ri­cano que se pro­du­ce gra­cias al apo­yo de  te­le­vi­so­ras pú­bli­cas de América. 
 
Al evento fue invitado el Dr. Aldo Saavedra, académico del departamento de Ingeniería Química, para responder la pregunta “¿Qué dice la ciencia?” sobre esta crisis hídrica en el continente. La pan­de­mia de CO­VID-19 ha acen­tua­do las ca­ren­cias y las zo­nas en las que, par­ti­cu­lar­men­te, la de­ser­ti­fi­ca­ción de la tie­rra es sig­ni­fi­ca­ti­va. El 65% de las 5.200 mi­llo­nes de hec­tá­reas de tie­rras ap­tas para agri­cul­tu­ra es­tán de­gra­da­das y en vías de de­ser­ti­fi­ca­ción. 
 
De acuer­do con los da­tos re­por­ta­dos por Pao­la Gor­don, bió­lo­ga y es­pe­cia­lis­ta en ges­tión de re­cur­sos na­tu­ra­les, el 97% del agua es sa­la­da y sólo el res­tan­te es agua dul­ce. Sin em­bar­go, el 75% se en­cuen­tra en los po­los o en lu­ga­res inac­ce­si­bles para los hu­ma­nos. “El res­to se dis­tri­bu­ye en el am­bien­te y los lu­ga­res de don­de la ex­trae­mos; pero el agua no siem­pre está don­de la ne­ce­si­ta­mos”, ex­pli­có Gor­don.
 
“Hay una re­la­ción cla­ra en­tre la pan­de­mia, la pro­vi­sión y el sa­nea­mien­to del agua. Una co­rrec­ta ges­tión de este re­cur­so hí­dri­co po­si­bi­li­ta me­di­das ade­cua­das de hi­gie­ne y, por ello, im­pul­sa a to­mar me­di­das para des­con­ta­mi­nar, po­ta­bi­li­zar y trans­for­mar el sec­tor del agua” se­ña­ló el Dr. Saa­ve­dra, quien es experto en la desa­li­ni­za­ción y tra­ta­mien­to de aguas para su em­pleo en rie­go agrí­co­la, agua po­ta­ble y pro­ce­sos pro­duc­ti­vos.
 
“Si no cam­bia­mos el modo de pen­sar, per­se­gui­re­mos los mis­mos pro­ble­mas. Va más allá del uso de tec­no­lo­gías” agre­gó, Wal­ter Pen­gue, miem­bro del Gru­po Eje­cu­ti­vo del TEEB Agri­cul­tu­re and Food de las Na­cio­nes Uni­das, quien añadió que una dis­ci­pli­na como la agroe­co­lo­gía nos per­mi­ti­rá ima­gi­nar nue­vas for­mas de tra­tar el agua. “El sec­tor ali­men­ta­rio es un fac­tor im­por­tan­te en la for­ma de ges­tio­nar”, destacó. 
 
Nuevos en­fo­ques para la ges­tión del agua
 
Hay dis­tin­tos in­di­ca­do­res que ayudan a iden­ti­fi­car la dis­po­ni­bi­li­dad del agua y la pre­sión que el ser hu­mano de­man­da ha­cia el re­cur­so hí­dri­co. Con los ob­je­ti­vos del desa­rro­llo que se es­ta­ble­cie­ron en­tre 2000 y 2015, se re­to­ma el con­cep­to de co­ber­tu­ra del agua y tam­bién de la ges­tión y se­gu­ri­dad de ac­ce­so.  
 
Ante esto, es per­ti­nen­te se­ña­lar que no hay un solo en­fo­que para ges­tio­nar co­rrec­ta­men­te el agua. Todo tie­ne que ser más ho­lís­ti­co e in­te­gral. Hay pro­ble­mas glo­ba­les que ne­ce­si­tan re­so­lu­ción pero tam­bién hay si­tua­cio­nes lo­ca­les que ne­ce­si­tan re­sol­ver­se con un plan para la re­gión. 
 
So­bre la base de cen­trar el agua para con­su­mo hu­mano y pro­ce­sos pro­duc­ti­vos, las uni­ver­si­da­des son cla­ves en so­lu­cio­nar los ex­ce­sos y de­sigual­da­des en el uso de este lí­qui­do. “Los re­cur­sos son fi­ni­tos, en­ton­ces im­pli­ca pro­ce­sos fi­ni­tos; esto de­be­ría ser con­tem­pla­do po­lí­ti­ca y eco­nó­mi­ca­men­te” indicó el académico de la Usach. 
 
Al­gu­nos paí­ses co­mien­zan a vi­vir mi­gra­cio­nes hu­ma­nas de­ri­va­do de la cri­sis hí­dri­ca que en­fren­tan sus co­mu­ni­da­des. Nue­va Ze­lan­da y Aus­tra­lia son dos de los ejem­plos y ante esto, ur­ge que los paí­ses to­men más en se­rio las po­lí­ti­cas pú­bli­cas para la me­jor ges­tión del lí­qui­do. 
 
El con­ver­sa­to­rio fue mo­de­ra­do por Alei­da Rue­da, pre­si­den­ta de la Red Me­xi­ca­na de Pe­rio­dis­tas de Cien­cia, con motivo del Día Mun­dial del Agua.

 

Autor: 
Macarena Polanco Gálvez
Fotografía: 
Screenshot