En la Usach ya se construye auto solar “Apolo”

Liderados por el profesor Iván Jiménez, estudiantes de Ingeniería y de Arquitectura trabajan intensamente en el desarrollo del vehículo que representará a la Usach en la competencia internacional "Atacama Solar Challenge".

 

El Taller de Arquitectura Industrializable, en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Santiago de Chile, es la sede en que se construye el primer auto solar entre cuyos elementos de fabricación destaca la tela. Estudiantes de Ingeniería y Arquitectura se reúnen periódicamente bajo la dirección del profesor Iván Jiménez, de Arquitectura, para afinar cada detalle del proyecto que suma a estudiantes de otras carreras y que espera llevar al triunfo a la Usach en la primera carrera de vehículos solares a nivel latinoamericano: "Atacama Solar Challenge".

"Este proyecto ha sido una experiencia muy positiva, sobre todo por la transferencia tecnológica que están aplicando los estudiantes, y que se genera en esta relación de colaboración, a partir de una participación multidisciplinaria", explica el profesor Jiménez.

Casi a diario, y a poco más de 100 días de la prueba que contempla un recorrido de 933 kilómetros, entre Iquique y Chañaral, los grupos de estudiantes se reúnen con el docente, quien detalla que están en la etapa "de diseño del fuselaje o carenado del vehículo, que es la aerodinámica del mismo, y el manejo que se hará de la tela para la aplicación de las células fotovoltaicas. Con todo lo que tiene que ver con la construcción del auto solar, propiamente tal", especifica el arquitecto egresado de la Usach.

Hoy se encuentran en la etapa de reingeniería, es decir, trabajan con el propósito de que cada grupo observe las correcciones que debe aplicar para el resultado final. "Junio es la etapa de la reingeniería y julio la de construcción, cuando entremos a tierra derecha".

Por ahora, ingenieros y arquitectos discuten si se construirá un prototipo previo o si se avanzará en el modelo real. "Es una decisión importante porque ya no tenemos vuelta atrás y allí veremos la ubicación de las partes mecánicas y eléctricas, la cabina del piloto, el montaje sobre un chasis de dura-aluminio y la fijación de la tela para soportar las células fotovoltaicas".

El profesor que dirige a los jóvenes, afirma que se están usando materiales de vanguardia: "Ésa es la principal innovación que estamos aplicando a un concepto tradicional de auto solar. El chasis de dura-aluminio nos permite rebajar el peso de 20, a sólo dos kilos; la tela de poliéster de tres capas se fijará a la carcasa con cierres en vez de cordones. Esta eficiencia nos dará ventajas comparativas frente a nuestros contendores".

"Un proyecto como éste -destaca Iván Jiménez- nos aventura a nuevos desafíos, y el bajo perfil de nuestros estudiantes nos lleva directo a la innovación. Una innovación que estamos aplicando en el hacer, en el operar, más que en el pensar".