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Investigadores de U. de Santiago se reúnen en jornada interdisciplinaria

Investigadores de U. de Santiago se reúnen en jornada interdisciplinaria

  • Una serie de iniciativas donde la instauración del Día de la Investigación Interdisciplinaria marca un hito en la Universidad, formarán parte de la II Jornada de Investigadores del Plantel, que tendrá lugar el próximo 21 de noviembre. Estudios sobre energía, política, economía, cultura, educación, salud y tecnología, serán abordados desde una óptica multidisciplinaria. 

 





Este lunes los investigadores del Plantel se reunirán en la II Jornada de Investigadores: por el desarrollo de la Investigación Interdisciplinaria, instancia que busca ser un espacio de convergencia para las diferentes disciplinas del conocimiento presentes en la Institución. La iniciativa, organizada por el Grupo para Investigadores para el Desarrollo y la Interdisciplinariedad (INDI USACH), contará con la participación de importantes académicos que lideran estudios en ámbitos de energía, política y economía, cultura, educación, salud y tecnología.

Entre los invitados se encuentra la Dra. Karina Arias Yurisch, Vicerrectora de Vinculación con el Medio, quien estará presente en el panel destinado a temas de cultura. La autoridad plantea que la Universidad de Santiago de Chile se define como una institución completa y compleja que busca contribuir al desarrollo del país a través de la formación de profesionales como también mediante la construcción de conocimiento que pueda estar al servicio de nuestra sociedad.

“Entendiendo que los actuales problemas que aquejan a nuestro país y el mundo son complejos, dinámicos y multicausales, las alternativas de solución que construyan las comunidades científicas y académicas  de nuestra Universidad deben ser igualmente complejas y multidimensionales. Para responder a este desafío se requiere entonces del esfuerzo mancomunado de diferentes saberes, disciplinas y perspectivas. Es en este contexto que la investigación interdisciplinaria se transforma en una herramienta fundamental para abordar las complejidades del desarrollo de Chile”, sentencia la Dra. Arias.   

En la jornada también estará presente el Dr. Héctor Chávez, académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica, quien abordará la Integración de energías renovables a los sistemas presentes en el país.

Según indica el investigador, las energías renovables han sido parte de la agenda política de gobierno de varios países, incluido Chile. Dentro de estas políticas, es posible encontrar metas de integración, las cuales no necesariamente están acompañadas de análisis sistemáticos que permitan asegurar la factibilidad técnico-económica y regulatoria. Sin embargo, en este escenario se presentan una serie de problemáticas que deben ser abordadas desde un punto de vista sistemático y multidisciplinario.

“Las políticas públicas tendientes a la integración de energías renovables son de interés directo de nuestra Casa de Estudios, debido a la necesidad de la sociedad por un ambiente más limpio que se refleja en diversas iniciativas y declaraciones (agenda energía, energía 2050, Ley 20.571, etc). El estudio de tales políticas y su factibilidad técnico- económica y regulatoria debiera ser parte de los esfuerzos de investigación de nuestra Universidad”, plantea el ingeniero.

Llamado a la participación

Los profesores esperan tener una alta convocatoria no solo de sus pares sino también de los estudiantes de postgrado que están cursando programas académicos, quienes también están invitados a sumarse a esta actividad.

La Dra. Arias señala que la investigación interdisciplinaria es un modelo de investigación colaborativo que integra metodologías, técnicas, perspectivas, conceptos y teorías de diferentes disciplinas  que permiten avanzar en el entendimiento de los problemas cuyas soluciones transcienden el ámbito de una sola disciplina, añadiendo que, “en este sentido, la investigación interdisciplinaria implica el diálogo de investigadores de variadas áreas en torno a problemas comunes y, por lo tanto, requiere de transformaciones en las maneras tradicionales de operar y trabajar”.

Además, la Vicerrectora de Vinculación con el Medio indica que para la instalación y consolidación de este tipo de investigación, se debe transitar desde un debate fragmentado y aislado por disciplinas a un diálogo cada vez más frecuente e intenso entre áreas de investigación. “Las jornadas de investigación INDI son una instancia que nos ayudan en este camino. Por lo cual el llamado a la comunidad es a participar en estas jornadas para encontrar partners investigadores que ofrezcan oportunidades de mirar nuestros problemas de investigación a través de otras disciplinas y así ir abriendo los espacios a la colaboración interdisciplinaria que nos permitan construir un conocimiento más integral y complejo”, plantea.  

Por su parte, el Dr. Chávez comenta que la cooperación es fundamental, pues incentiva la  formación de líneas complejas donde se generen claustros fuertes y numerosos dentro de los programas de postgrado. Asimismo, los trabajos multidisciplinarios pueden generar impacto y productos de investigación en dos o más disciplinas al mismo tiempo, maximizando el esfuerzo realizado por la institución.

El programa y los temas los pueden revisar en el sitio oficial www.indi.usach.cl
 

Desde Filosofía hasta Física Teórica y Experimental: Universidad se adjudica 14 proyectos Fondecyt de iniciación

Desde Filosofía hasta Física Teórica y Experimental: Universidad se adjudica 14 proyectos Fondecyt de iniciación

  • Un total de 14 iniciativas de la U. de Santiago serán beneficiadas con el Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt), luego que sus investigadores se adjudicaran un valioso aporte de $1.098.783.000, gracias al Concurso Iniciación en Investigación 2016.


 




Determinar hasta qué grado el humor político agresivo tiene impacto sobre las personas y su conducta de participación política, en aspectos tales como la confianza en las instituciones o, eficacia percibida, entre otros, es el objetivo del Fondecyt de Iniciación del Dr. Andrés Mendiburo Seguel, psicólogo social y profesor de la Facultad de Administración y Economía, quien lidera uno de los 14 proyectos que fortalecerán el desarrollo de la investigación científica y tecnológica de excelencia.

Este instrumento de financiamiento dependiente de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt) se creó el año 2006, con el propósito de contribuir a la incorporación de investigadores jóvenes a la actividad científico-tecnológica nacional, a través de propuestas que conduzcan a nuevos conocimientos o aplicaciones previstas a través de hipótesis de trabajo explicitadas en el proyecto.

Debido a la calidad de las propuestas, viabilidad y el mérito académico de los postulantes, la Universidad de Santiago se adjudicó un total de $1.098.783.000 pesos, los que fueron entregados a 14 investigadores para que desarrollen sus aristas de investigación en diferentes disciplinas a partir de noviembre.

Para el Dr. Claudio Martínez Fernández, Vicerrector de Investigación, Desarrollo e Innovación, el resultado cobra vital relevancia para nuestra Casa de Estudios por permitir a académicos que están en una etapa inicial de su carrera obtener un apoyo económico importante, permitiendo fortalecer el objetivo institucional de generar nuevos conocimientos.

“Creemos que estas nuevas adjudicaciones serán un valioso aporte a nuestro quehacer académico y esperamos además que los resultados de estos estudios tengan un impacto positivo para la sociedad y para el sector productivo, repercutiendo así también en otros indicadores institucionales”, indica.

Los nuevos proyectos 

Este resultado permitirá que nuevos investigadores se sumen a la Institución, fomentando y creando nuevas aristas de investigación en diferentes disciplinas del conocimiento.

Los fondos asignados representan mantener los porcentajes de adjudicación del año anterior aun cuando en esta oportunidad se incrementó en dos los proyectos adjudicados a través de este programa de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt).

“Este aporte para investigar es maravilloso, te da la opción de poder hacer participar a los estudiantes para que se vayan interesando en la investigación, y permite potenciar ciertas investigaciones que por lo general no son muy estudiadas”, sostiene uno de los beneficiados, el profesor Andrés Mendiburo Seguel, Doctor en Psicología Social.

Otra iniciativa innovadora que se realizará durante los tres próximos años es la del Dr. en Economía Damian Clarke Chamberlin, profesor asociado del plantel especializado en  salud materna e infantil y educación, quien estudiará cómo la exposición de mujeres embarazadas a determinados eventos afecta a la salud del recién nacido, y cómo son recibidos los programas de apoyo tales como el plan Chile Crece Contigo.

Para el Dr. Clarke, el Fondecyt de Iniciación es muy importante porque “permite financiar tesis de estudiantes con un apoyo que va a ser muy relevante y es un respaldo muy importante para investigación que no podría realizarse de otra manera”, explica.

Otra problemática de índole social y económica será analizada por la Dra. en Economía,  Eugenia Andreasen, quien busca estudiar el efecto de los controles de capitales impuestos en Chile en los '90 ("Encaje") sobre las decisiones de producción, inversión y exportación de las firmas privadas, que se analizará desde nivel micro. Como hipótesis la profesora plantea que se observa un impacto negativo sobre el financiamiento.

“Es primera vez que postulo al Fondecyt y tendremos un apoyo financiero totalmente distinto para las presentaciones, que a nivel de la academia es clave, porque cuando se tiene una primera versión del paper, la forma de mejorarlo es presentarlo en distintos lugares y obtener retroalimentación, además de recibir asistentes de investigación y mejorar el equipamiento”, explica la Dra. Eugenia Andreasen.

Resultados nacionales 

Este año los Consejos Superiores del Programa Fondecyt seleccionaron un total de 288 proyectos, equivalentes al 27,2% de las 1.058 iniciativas presentadas. Respecto a la distribución por disciplina un 33,2% se orienta al desarrollo de investigaciones en Ciencias Naturales y Exactas; un 30,9% en Tecnologías, en las áreas de Ingeniería, Medicina y Agronomía; y un 25% en Ciencias Sociales y Humanidades.

En materia de género, concursaron 392 proyectos liderados por mujeres, quienes se adjudicaron 91 proyectos, lo que equivale al 31,6% del total aprobado. En el caso de los hombres, se presentaron 666 iniciativas, de las cuales 197 proyectos equivalentes al 68,4% fueron aprobados.

Los recursos otorgados por Fondecyt permitirán a los académicos financiar gastos de operación y difusión, bienes de capital, viajes y becas para tesistas de pre y postgrado, apoyo que mantendrán durante los dos o tres años que dure el estudio.

En tanto, los profesores del Plantel que fueron beneficiados son profesores asociados de la Facultad de Administración y Economía, la Dra. en Economía, Eugenia Andreasen; el Dr. en Economía Damian Clarke y el Dr. en Psicología Social, Andrés Mendiburo; del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), fueron beneficiados  la Dra. en Filosofía, Mariela Ávila y la Dra. en Sociología, Cecilia Dockendorff; del centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología (Cedenna), fue seleccionado el Dr. en Química Walter Cañón.

También resultaron beneficiados el académico del Departamento en Ingeniería Mecánica, Ernesto Castillo; el Dr. en Química Javier Echeverría, profesor del Departamento de Ciencias del Ambiente; el Dr. en Química Raúl Mera, asistente del Departamento de Ciencias del Ambiente; el Dr. en Física, Simón Oyarzún, profesor del Departamento de Física; las Dra. en Química, Laura Tamayo y Carla Toledo, ambas del departamento de Química de Los Materiales; el Dr. en Matemáticas, Erwin Topp, del Departamento de Matemáticas y Ciencias de la Computación, y el Dr. en Ciencias Ambientales, Francisco Zorondo, del departamento de Gestión Agraria.

 

Debuta cuaderno de laboratorio en el Plantel para resguardar conocimiento e innovación

Debuta cuaderno de laboratorio en el Plantel para resguardar conocimiento e innovación

  • Se trata de un soporte para el registro completo de las actividades de los investigadores, donde podrán documentar los procesos de sus estudios, como hipótesis, experimentos, análisis o interpretación de los resultados, con la finalidad de tener un respaldo en materia de propiedad intelectual e industrial. La nueva herramienta de la Dirección de Gestión Tecnológica (DGT) de la Vridei permite determinar la autoría de una invención y los porcentajes de titularidad de la misma.

 

 





La Dirección de Gestión Tecnológica (DGT) de la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Innovación, presenta Cuaderno de Laboratorio para investigadores e investigadoras de la Universidad de Santiago de Chile. Se trata de un soporte para el registro completo de las actividades de investigación, donde los académicos podrán documentar los procesos de sus estudios como hipótesis, experimentos, análisis o interpretación de los resultados, con la finalidad de tener un respaldo en materia de propiedad intelectual e industrial.

La actividad se llevó a cabo el pasado jueves (3), donde participó un grupo de investigadores seleccionados para la primera fase de este instrumento. La actividad estuvo orientada a conocer sus opiniones sobre el cuaderno y cómo mejorarlo para comenzar a su distribución el año 2017.

De acuerdo al equipo de la DGT, liderados por el Dr. Luis Magne, este cuaderno es una prueba documentada clave de la participación del investigador en los trabajos que esté realizando. Su uso permite determinar la autoría de una invención y los porcentajes de titularidad de la misma, ya que indicará de manera clara e inequívoca qué, cómo, quién y cuándo se hizo.

Valoración de la iniciativa 

La Dra. Margarita Montoya, académica del Departamento de Biología, indicó que le parece una buena iniciativa el institucionalizar el resguardo de la información generada en los laboratorios, añadiendo que, “por otro lado, genera una mayor conciencia en los académicos, investigadores y estudiantes, de la importancia y necesidad de realizar este respaldo, para mejorar la trazabilidad  de los resultados y evitar pérdida de información relevante”.

El Dr. Antonio Castillo también valoró la  idea de implementar este instrumento, ya que permite mantener un registro ordenado de los experimentos que se van realizando y de los resultados que se van obteniendo. En su caso está a cargo del laboratorio de Virología de Hongos, donde cuenta que siempre han tenido un cuaderno para cada uno de los miembros del equipo, decisión más bien intuitiva. “Sin embargo, creo que es conveniente estandarizar su uso, con una reglamentación clara”, indicó.

Por su parte, el Dr. Marcelo Cortez, académico de la Facultad de Química y Biología, considera que es necesario sumar a este cuaderno una plataforma digital a este instrumento para adaptarnos a las tecnologías y, además, disponer de un registro con mayor capacidad de almacenamiento.

Aprendizaje para los estudiantes

Para estos académicos uno de los mayores beneficiados con la institucionalización de este instrumento serán los estudiantes, quienes podrán incorporar a su formación académica esta práctica tan necesaria en el mundo científico-tecnológico.

La Dra. Montoya señaló que “el cuaderno sea institucional me hace esperar que genere mayor conciencia de su importancia, especialmente en los estudiantes”.

Este cuaderno cuenta con un decálogo que orientará a los profesionales sobre su uso y responsabilidades involucradas.

 

Forman el primer grupo especializado en percepción remota a través de drones

Forman el primer grupo especializado en percepción remota a través de drones

  • El mes pasado se constituyó oficialmente el USACH-RPAS, agrupación formada por académicos e investigadores de los departamentos de Ingeniería en Informática, Ingeniería Geográfica y la Escuela de Arquitectura, que aborda de manera transversal e interdisciplinaria la operación de aviones no tripulados en el territorio nacional. El académico Gastón Herrera Astudillo, de la Escuela de Arquitectura y jefe del Departamento de Gestión de la Infraestructura, asegura que el objetivo es “profundizar el trabajo que actualmente se hace con los drones en la Universidad, principalmente en lo que se refiere a investigación”.

 




El pasado 28 de octubre se constituyó oficialmente el USACH-RPAS, grupo formado por académicos e investigadores del Plantel especializados en tecnologías de percepción remota, mediante Sistemas de Aviones Pilotados Remotamente o RPAS (Remotely Piloted Aircraft Systems).

Una vez que el grupo concluya el proceso de certificación para operar drones, no solo se convertirá en un referente a nivel de academia, sino que también instalará a la Universidad de Santiago de Chile como la primera institución de educación superior que aborda de manera transversal e interdisciplinaria la operación de aviones no tripulados en el territorio nacional, entre otras iniciativas.

El profesor Gastón Herrera Astudillo, académico de la Escuela de Arquitectura y jefe del Departamento de Gestión de la Infraestructura del Plantel, explica que el grupo nace a partir de la inquietud de ejecutar desde la Universidad acciones que impulsen el desarrollo de investigaciones a innovaciones a través de las tecnologías RPAS, que permitan la vinculación con ONGs y el Gobierno.

“Uno de nuestros objetivos es que a través de los RPAS, los drones, que en este caso son plataformas o herramientas, profundizar el trabajo que actualmente se hace con ellos en la Universidad, principalmente en lo que se refiere a investigación, y vincularlas tanto con instituciones públicas como privadas”, precisa.

Certificación

El profesor Herrera aclara que antes de la formación del grupo, había muchos académicos que trabajaban con drones de manera aislada, y que a raíz de la certificación obligatoria que ordenaba la nueva norma, notaron que algunas iniciativas eran muy similares y por tanto, tenían muchas cosas en común.

“Hace poco tiempo apareció la normativa de certificación de operadores de drones que estableció la DGAC (Dirección General de Aeronáutica Civil), y que obliga a que los operadores estén inscritos. A raíz de esto es que se hizo un levantamiento de los académicos que estaban trabajando con drones en la Universidad, y se les invitó a participar de una posible certificación”, comenta.

Y agrega que “nos dimos cuenta que coincidíamos con muchas iniciativas comunes, y que eso permitiría una posible integración multidisciplinar, y entonces decidimos seguir reuniéndonos hasta finalmente crear este grupo”.

El grupo en una primera instancia está formado por 13 académicos de los departamentos de Ingeniería en Informática, Ingeniería Geográfica y la Escuela de Arquitectura, pero está abierto a nuevos integrantes. De acuerdo con el profesor Herrera, en los próximos días recibirán la certificación definitiva.

“Este es un grupo abierto, nos interesa sobre todo, que haya más disciplinas porque creemos que las herramientas tecnológicas integran las disciplinas. De cierta manera se rompen las barreras de la disciplina, pero esto nos permite conversar y colaborar”, sostiene el profesor Herrera.

En ese contexto, el académico asegura que cada carrera aportó con uno o más aviones no tripulados, de manera que “se puede decir que la Universidad ya cuenta con una armada de drones”.

Aplicaciones

Desde el punto de vista académico, las funciones de los drones son múltiples. Desde la Ingeniería Geográfica, los aviones no tripulados pueden transportar cámaras fotográficas simples para la captura y procesamiento de imágenes, entre otras aplicaciones.

El profesor del Departamento, Claudio Campos Arriaza, aclara que “utilizamos estos aparatos para generar modelos tridimensionales, y a partir de eso hacemos todo el análisis territorial. Pero también estamos buscándole nuevas potencialidades”.

Los drones también pueden trabajar con cámaras multiespectrales, y procesar información para determinar la calidad de la vegetación, o recopilar datos térmicos de los territorios, entre otros aspectos, además de verificar avances de construcciones, información que puede ser utilizada por las municipalidades.

El académico aclara que “hay una diversidad de aplicaciones que se le pueden dar en el contexto de la seguridad y la responsabilidad en el uso de estos aviones”.

Y acota “además, esto no tiene techo tecnológico, cada año van generándose nuevos modelos con nuevas capacidades en términos de peso, de duración de batería, y eso va generando, también, poder visualizar otros aspectos que tal vez con la tecnología tradicional no se pueden hacer”.
 

Universidad se adjudica recursos para adquirir equipamiento científico y tecnológico mediano

Universidad se adjudica recursos para adquirir equipamiento científico y tecnológico mediano

  • La Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), a través de su programa Fondequip, le otorgó un monto superior a los $ 610 millones a nuestro Plantel, lo que la convierte en la tercera institución a nivel nacional con más fondos obtenidos en este concurso. Las iniciativas que se verán beneficiadas con este aporte, van dirigidas a promover líneas de investigación en ingeniería, ciencia de los materiales, nanociencia y nanotecnología.

 





La Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, Conicyt, recientemente entregó los resultados del V Concurso de Equipamiento Científico y Tecnológico Mediano, Fondequip. En esta oportunidad se presentaron 173 iniciativas a nivel nacional, siendo adjudicados un total de 30 proyectos que permitirán la actualización de equipamiento científico y tecnológico mediano destinado a actividades de investigación en diferentes universidades y centros de investigación del país.

Nuestra Universidad se adjudicó tres iniciativas, transformándose en la tercera institución nacional que más recursos obtuvo, con más de 610 millones de pesos. Este resultado permitirá a esta Casa de Estudios continuar realizando ciencia de frontera, además de dotar a sus investigadores con la infraestructura necesaria para seguir contribuyendo al desarrollo del país.

El Dr. Claudio Martínez, Vicerrector de Investigación, Desarrollo e Innovación, evalúa positivamente los resultados obtenidos por el Plantel en la quinta versión de este concurso. “Nuevamente la Universidad ha tenido un muy buen resultado en el concurso Fondequip, mejorando comparativamente con años anteriores y también en el contexto nacional. Así la Universidad de Santiago este año se posiciona como la tercera institución en términos de proyectos adjudicados en relación a los concursados y también en fondos totales adjudicados, superando los 600 millones de pesos. Esto  no es un dato aleatorio, sino una tendencia de los últimos tres concursos, donde hemos avanzado del sexto, al quinto y ahora a la tercera posición. Esto confirma una situación sólida da la Universidad en términos de investigación y nos plantea desafíos mayores para los tiempos que vienen”, enfatiza.

La autoridad también destaca que este programa, a diferencia de fondos individuales, obliga a postulaciones colectivas que fortalecen una mirada amplia de la investigación. Esto, implica “un esfuerzo enorme que deben hacer los investigadores para coordinar y generar una propuesta interesante a ojos de los evaluadores. Por ello se debe felicitar a todos los investigadores que logran levantar una propuesta y, por su puesto, a quienes logran su adjudicación. Su esfuerzo permite a la institución el disponer de equipamiento de última generación que permite a nuestro plantel posicionarse en las principales revistas internacionales y facilita la formación de profesionales con acceso a tecnología del más alto nivel existente”.

Actualmente, este programa permite adquirir herramientas que se clasifican en seis grupos: cromatógrafos y espectrómetros, equipamiento de informática, instrumentos bioanalíticos, microscopios y difractómetros, equipos de procesamiento y ensayo de materiales y otros, que son aquellos que no se pueden incorporar en ninguna de las categorías anteriores.

Aporte a la Ingeniería estructural y sísmica

Uno de los equipos que adquirirá nuestra institución es una mesa vibradora para el estudio del comportamiento sísmico y vibraciones de estructuras de gran escala, que se instalará en el Departamento de Ingeniería en Obras Civiles y que contará con un aporte de Conicyt de $ 218.407.112.

El Dr. Erick Saavedra, subdirector de docencia de la unidad académica y director del proyecto, indica que los recursos adjudicados serán fundamentales para fortalecer la investigación e innovación en ingeniería y la docencia de pre y postgrado en la Universidad, destacando que las principales líneas beneficiadas con la compra de este nuevo equipamiento serán la investigación del comportamiento estructural y sismorresistente de edificios, estudios sobre novedosos sistemas constructivos de madera, estudios sobre vibraciones en estanques, investigación de la fractura y fatiga en estructuras de nuevos tipos de acero, estructuras compuestas acero-hormigón y detección de daño en edificaciones de hormigón, entre otros.

Además, destaca que contar con un equipo de estas características “permitirá fortalecer el desarrollo científico del país en las áreas de ingeniería estructural, ingeniería sísmica, ingeniería de materiales, ingeniería de la madera e ingeniería mecánica. También permitirá aglutinar y consolidar la investigación colaborativa intra e interinstitucional entre investigadores de la Universidad de Santiago de Chile y otras instituciones en torno a un equipo de alta tecnología, único en Chile y Sudamérica”, enfatiza.

Fortalecimiento de la Nanociencia y Nanotecnología 

La segunda iniciativa adjudicada corresponde a un equipo SAXS para la investigación avanzada de materiales, propuesta liderada por el Dr. Juan Escrig, investigador del Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y de la Nanotecnología, CEDENNA, y del Departamento de Física de la Universidad, herramienta que impactará también en el trabajo de académicos de tres facultades: Tecnológica, Química y Biología y de Ciencia, potenciando la investigación interdisciplinaria.

El Dr. Escrig, también director del Laboratorio de Nanomagnetismo, plantea que este resultado es un orgullo y un espaldarazo fuerte al trabajo serio y constante que han venido desarrollando en los últimos años en el área de los nanomateriales. “El Laboratorio de Nanomagnetismo ha demostrado un creciente desarrollo científico y tecnológico con impacto a nivel nacional e internacional. Fuimos los primeros en sintetizar nanotubos magnéticos en Chile, y sólo el año pasado presentamos tres solicitudes de patente, lo que demuestra nuestra capacidad tecnológica”, comenta.

Además, menciona que nuestra universidad está tratando de impulsar la generación de innovaciones, a partir de la ciencia básica, para resolver los problemas país, agregando que “esta característica propia de nuestra universidad permite extender el alcance de este proyecto más allá del ámbito académico, logrando un impacto que no solo será a través de prestación de servicios, sino que mediante el desarrollo de futuros proyectos de investigación aplicados en temáticas de interés industrial”.

Según explica el científico, actualmente, CEDENNA cuenta con diversos métodos de análisis tales como un microscopio electrónico de barrido (SEM), un microscopio electrónico de transmisión (TEM), un microscopio de efecto Kerr (NanoMOKE3), entre otros, que se limitan a dar información en 2-dimensiones, en la superficie o en una sección transversal de la muestra, revelando solamente la punta del iceberg. Además, el sistema SAXS compacto para la investigación avanzada de materiales será el primero  que se instale en Chile y permitirá el análisis de diversos nanomateriales, como volúmenes sólidos a fibras, superficies o muestras biológicas con SAXS, WAXS y GISAXS. Para ello, contará con un aporte de Conicyt de $ 188.600.060.

“Con la instalación de este equipamiento (SAXS) esperamos tener una perspectiva global, estadísticamente relevante de las propiedades nanoestructurales en 3-D de todo el sistema, como funciona en la vida real. Además, SAXS es realmente un método de caracterización no destructivo”, detalla.

Desarrollo de nueva línea de investigación

Por su parte, la Facultad de Química y Biología, a través de una iniciativa liderada por el Dr. Jorge Pavez, podrá adquirir un microscopio de efecto túnel y fuerza atómica para estudios de transporte electrónico en interfaces y moléculas individuales; propuesta que surgió en el Centro SMAT-C  de nuestra Universidad (Soft Matter  Research and Technology Center) que dirige el Dr. Francisco Melo, académico del Departamento de Física, y que contará con un aporte de Conicyt de $ 203.985.444.

Aprovechando la vasta experiencia y expertise del grupo de investigación responsable en el área de Electroquímica Interfacial y las Microscopías de AFM y STM, se desarrollará una nueva línea de investigación en el campo de la electrónica molecular, implementando estudios a nivel de moléculas individuales con las técnicas de “STM-AFM-Molecular Junction” en nuestra universidad.


El Dr. Pavez explica que “la posibilidad que ofrece la implementación de este campo de investigación, junto con el desarrollo de técnicas experimentales afines, permitirán estudiar procesos de transporte interfacial a nivel molecular, lo que tendrá un fuerte impacto en el conocimiento fundamental para el desarrollo y construcción de nano quimio y bio-sensores, dispositivos moleculares bio-inspirados, y sistemas auto-ensamblados, y aquellos que permitan explotar propiedades electrocatalíticas para generar dispositivos de conversión de energía de alta eficiencia”.

Tanto las características técnico-electrónicas como la arquitectura del equipo adquirido hacen de sus modos de trabajo un conjunto de poderosas herramientas para un importante número de grupos de investigación de nuestra institución, y de otras, en el ámbito de la ciencia de materiales, la química, la física, y la biología. Líneas de investigación que centran su atención en el desarrollo y caracterización de nuevos e “inteligentes” materiales.

Según detalla el académico, hoy, las necesidades de estos grupos van más allá de la caracterización morfológica superficial a escala nano, sino que buscan dar repuestas a fenómenos interfaciales (como el transporte electrónico, entre otros) que dan cuenta de las particulares y potentes propiedades de estos materiales, para ello cuentan con el apoyo y concurrencia al proyecto de alrededor de 10 grupos de investigación de tres facultades de nuestra Universidad y también de las Universidades de: Chile (Facultades de Ciencias y Ciencias Físicas y Matemáticas); de Valparaíso (Facultad de Ciencias); del Bío Bío (Facultad de Ciencias); y de la Universidad Católica (Facultad de Química).

Académica Daniela Toro Ascuy, Dra. en Microbiología por la U. de Santiago: “Mi objetivo es estudiar e investigar para salvar vidas”

Académica Daniela Toro Ascuy, Dra. en Microbiología por la U. de Santiago: “Mi objetivo es estudiar e investigar para salvar vidas”

  • Bioquímica de profesión y con sólo 29 años, trabaja actualmente con el virus del SIDA, como parte de su primer año de postdoctorado, luego de haber desarrollado diversas investigaciones sobre salmones.

 





Daniela Toro Ascuy no sólo se tituló en la nuestra Universidad como bioquímica. También cursó el doctorado de Microbiología. Hoy, a sus 29 años, se desempeña como investigadora de postdoctorado. A pesar de su juventud, acumula una importante trayectoria en investigación y docencia.

Siempre con excelencia académica, su gran fortaleza en el colegio radicaba en las matemáticas. “Para mí siempre fue un juego. De hecho, todos pensaban que estudiaría ingeniería”, recuerda sobre su etapa escolar, agradeciendo el apoyo incondicional de su familia en todas sus decisiones.

Con mucho orgullo relata que su papá también se tituló en esta Casa de Estudios Superiores, como profesor de Matemática, aunque hoy trabaja como gerente de compras en una empresa que importa repuestos para autos. Su mamá, en tanto, trabajaba como secretaria de gerencia. A ellos se suma su hermano mayor, abogado, a quien considera su gran compañero.

De la medicina a la bioquímica

Sus primeras aproximaciones con la investigación no se dieron precisamente en un laboratorio. “Mi prima más cercana tuvo una enfermedad, que en ese momento era muy poco común, linfogestasis intestinal, considerada hoy como un cáncer. Los médicos no supieron tratarla”, lamenta. Fueron cinco complicados años para la familia. Su prima falleció cuando Daniela tenía 17 años. “Me propuse estudiar medicina para dedicarme a la investigación”, confiesa, iniciando así un camino ligado a los laboratorios.

Sin embargo, durante su proceso de postulación a la educación superior descubrió la Bioquímica. “Mi objetivo era la investigación y esta carrera me conduciría directamente a eso, por lo que no lo dudé, especialmente por tratarse de esta Universidad”, aclara.

A partir de su primer año académico, en 2005, son frecuentes los viajes desde y hacia su hogar en Puente Alto. “Salía a las 6:30 de la mañana y muchas veces llegaba a mi casa muy tarde en la noche”, rememora, añadiendo que “aunque te da una flexibilidad en los horarios, la investigación exige mucho tiempo. Hay experimentos que implican presencia permanente en el laboratorio”.

Y tal como agradece los vínculos de amistad generados con sus compañeros, también valora la calidad de los académicos. “Durante mi pregrado tuve excelente docentes e investigadores. Recuerdo a Kevin Maisey, quien impartía todos los ramos biólogos, incluidos los laboratorios”, explica. El mismo académico que se transformaría en su cotutor, junto a la Dra. Mónica Imarai, durante su proceso de tesis. “Gran parte de mi base como bioquímica es gracias a él”, reconoce. Su desafío era caracterizar el sistema inmune de los salmones.

Nuevas posibilidades: Despega Usach

En 2010 Daniela se titula de bioquímica. Ese mismo año postula al doctorado en Microbiología, junto a una beca de Conicyt. Al siguiente comienza sus estudios, cuya tesis, bajo la tutoría del Dr. Marcelo Cortez, académico del Departamento de Biología, también se centra en el ámbito de los salmones.

Paralelamente Daniela postula a un proyecto de Valorización de Investigación Universitaria (VIU) de Fondef. “Postulé con mi tesis de doctorado, que trata sobre el desarrollo de un sistema de genética reversa para el virus de la anemia infecciosa del salmón, es decir, el virus ISA. Entonces, a partir de varias moléculas de ADN, incorporadas en una célula, pude generar un virus y, conociendo sus propiedades, manipularlo, lo que me permite, por ejemplo, generar nuevas vacunas”, detalla.

Un sistema que se había intentado desarrollar en varios países, como Francia y Canadá, sin que nadie pudiera conseguirlo. “Incluso grupos de investigación con muchos recursos disponibles”, advierta la académica. Por ello, no duda en destacar el logro alcanzado junto a su tutor al hacer funcionar el sistema propuesto. De hecho, la investigación fue patentada. Daniela cursaba el segundo año del doctorado, cuando aparece una nueva posibilidad: el Concurso Despega Usach.

Una instancia organizada por la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Innovación para los estudiantes, y que hoy, en su segunda versión, se encuentra en etapa de selección entre los proyectos postulados. “Era importante aprovechar los seminarios y capacitaciones sobre modelos de negocios y así retroalimentarnos como equipo”, asegura. Finalmente, su proyecto fue uno de los cinco ganadores.

Investigadora, docente y futbolista

Luego de dos semanas en el Stanford Research Institute de San Francisco, Estados Unidos, Daniela confirma su excelente preparación como investigadora. “Me dijeron que la importancia de mi proyecto es de alcance internacional, por lo que debo desarrollarlo pensando no sólo en Chile”, advierte. De hecho, la patente también está en trámite en Canadá, Estados Unidos y Noruega.

Por ello no duda en definir su paso por la Universidad de Santiago como una gran experiencia, al recordar que “durante el doctorado tuve la posibilidad de hacer clases y codirigir a varios estudiantes del Dr. Marcelo Cortez, quien recién se había ganado un Fondecyt de iniciación”.

Ya suma varias publicaciones: papers propios y colaboraciones con otros investigadores, además de sus tesis de pregrado y doctorado y dos patentes de investigación. En lo inmediato, debería viajar a Francia y Estados Unidos por su actual proyecto de postdoctorado.

Hoy Daniela vive en Santiago Centro. Practica yoga y todos los miércoles por la noche juega fútbol en una liga. “Dentro de la cancha soy polifuncional. Puedo parchar todos los puestos, incluso en el arco, aunque me gusta más jugar de delantera”, reconoce. Actividades que le ayudan a mantener controlada la diabetes tipo 1 que le fue detectada hace tres años.

Actualmente, como Dra. en Microbiología y en su primer año de postdoctorado, se desempeña como investigadora en el Laboratorio de Virología Molecular y Celular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, junto al Dr. Ricardo Soto Riffo, también bioquímico egresado de la Universidad de Santiago. “Él trabaja con el virus del SIDA, un tema que me atrajo muchísimo. Mi objetivo era estudiar e investigar para salvar vidas humanas. Por eso decidí retomar el foco inicial”, aclara.

Además, imparte clases de virología a estudiantes de doctorado y codirige a tesistas. “Soy feliz enseñando. Es algo muy gratificante”, concluye.

Realizan encuentro para promover investigación interdisciplinar en el Plantel

Realizan encuentro para promover investigación interdisciplinar en el Plantel

  • El grupo de Investigadores para el Desarrollo y la Interdisciplinariedad (INDI USACH) convoca a todos los interesados en reflexionar e impulsar estudios interdisciplinarios al interior de nuestra Casa de Estudios, a una jornada prevista para el  21 de noviembre. “Es una convocatoria abierta a todos quienes se interesen por este tipo de investigación al interior de la Universidad”, precisa el Dr. Francisco Cubillos Riffo, académico del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de los Alimentos (Cecta) y coordinador del grupo.

 

Con la finalidad de promover la creación de vínculos de colaboración entre los académicos de las diferentes facultades, teniendo como principal objetivo fomentar el desarrollo de estudios interdisciplinarios que permitan responder de mejor forma a las necesidades del país y su sociedad, es que se realizará el II Encuentro de Investigadores USACH, organizado por el grupo de Investigadores para el Desarrollo y la Interdisciplinariedad (INDI USACH).

Este encuentro busca instaurar una instancia de reflexión que promueva un cambio cultural, donde se instaure y se reconozca la importancia del desarrollo de investigaciones interdisciplinarias al interior de nuestra universidad. Es así, como ese día se celebrará el día de la interdisciplina, con una serie de actividades artístico-culturales.

De acuerdo al Dr. Francisco Cubillos Riffo, académico del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de los Alimentos (Cecta) y coordinador del grupo, durante el primer encuentro de este tipo, lograron que muchos investigadores de todas las facultades de la Universidad, conocieran el trabajo e intereses de sus pares. Hoy buscan que esa visión de desarrollo de investigaciones se instale como una práctica cotidiana en la institución.

“Es una convocatoria transversal a todas las personas que tengan interés por la investigación interdisciplinaria al interior de la Universidad, para que reflexionemos sobre la investigación que se desarrolla en la institución”, señala Cubillos, quien añade que “la complejidad del mundo, los problemas y desafíos actuales a los que nos enfrentamos en el sistema de educación superior, nos invita permanentemente a trabajar con investigadores de otras disciplinas, países y entornos. Por esto, creemos que es importante tener esta mirada para poder potenciar nuevas investigaciones que pueden comenzar desde nuestra universidad, generando un mayor impacto para la sociedad”.

Por otra parte, el Dr. Cubillos plantea que los académicos deben sacar partido de una importante característica de la institución, que es que están todos ubicados en un campus único, lo que debería propiciar mayor convergencia entre las diferentes áreas del conocimiento.

La Dra. Alejandra Pérez Bonilla, académica del Departamento de Tecnologías Generales de la Facultad Tecnológica y presidenta del congreso, considera que “esta es una instancia muy importante para establecer las confianzas y el conocimiento mutuo que generen nuevas líneas de investigación”. Además, agrega que “tener instancias como esta es una oportunidad de integración, necesaria en una universidad que requiere adaptarse a los permanentes cambios del entorno”.

Los interesados en asistir deben inscribirse en el siguiente formulario. Para descargar el formulario para participar como expositor debe visitar el sitio www.indi.usach.cl , archivo que luego deberá enviar con su propuesta al correo indi@usach.cl, indicando el área en la cual desea participar.

La actividad que se llevará a cabo el lunes 21 de noviembre, desde las 09.00 a las 17.00 horas, en el CENI-VIME.

Desafíos del nuevo Vridei Dr. Claudio Martínez Fernández: generar nuevas políticas y potenciar la investigación de buena calidad

Desafíos del nuevo Vridei Dr. Claudio Martínez Fernández: generar nuevas políticas y potenciar la investigación de buena calidad

  • Doctor en Ciencias con mención en Biología, se integra en el año 2000 al Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Facultad Tecnológica, llegando a dirigir el Centro del área (Cecta). “Esta Universidad me dio la oportunidad de desarrollar una línea de investigación que me ha permitido aportar al país desde la genética y biotecnología de levaduras”.

 




La ciencia y todo lo que ella implica son parte inalienable del Dr. Claudio Martínez Fernández, quien a sus 50 años asumió hace un par de semanas como Vicerrector de Investigación, Desarrollo e Innovación (Vridei) del Plantel. Su trayectoria académica en el Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Facultad Tecnológica es de gran relevancia, tanto en aulas como en laboratorios. Especialmente cuando se trata del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de Alimentos (Cecta), del que incluso ha sido su director.

“Llego a una Unidad que funciona muy bien, como un pilar fundamental de esta institución. Venimos a fortalecer la labor que históricamente ha desarrollado esta Vicerrectoría, por lo que los énfasis estarán en donde se requiera aportar para levantar los indicadores que la Universidad requiere”, explica la nueva autoridad.

Incluso plantea que actualmente se desarrolla un proyecto de mejoramiento institucional, ejecutado durante los últimos tres años. “Se ha logrado reunir profesionales de áreas muy distintas del Plantel, lo que ha dado excelentes resultados en el ámbito de la investigación transversal. Me encantaría que eso se multiplicara a través de las distintas Unidades de la Universidad”, afirma con optimismo.

Primeros acercamientos al Plantel

Viviendo en Maipú, su educación escolar la cursó en Santiago Centro, mientras su papá trabajaba en Estación Central. Inevitablemente transitaba por el frontis de la entonces Universidad Técnica del Estado. “Cada vez que la veía, me llamaba mucho la atención, por lo que cuando se presentó la posibilidad de trabajar en ella, ya como Universidad de Santiago, no lo dudé”, recuerda.

Estudió Licenciatura en Ciencias con mención en Biología en la Universidad de Chile, donde luego cursó un Doctorado en la misma área, grado que obtuvo en 1996. Cuatro años después ingresó como académico a la Universidad de Santiago. “Cuando llegué, esta Vicerrectoría se preocupó de mí, como investigador, pues me dieron la oportunidad de desarrollar una línea de investigación que me ha permitido aportar al país desde la genética y biotecnología de levaduras”, destaca.

De esta manera, ha logrado consolidar su investigación. “Además, como director del Cecta conocí la Universidad desde el punto de vista de la gestión, más allá de la investigación de laboratorio, interactuando con otras Unidades gracias a la transversalidad de ese Centro”, agregando que “logramos levantar nuevas líneas de trabajo que espero sigan progresando”.

Fortalezas y logros institucionales

“La gran fortaleza de esta Universidad es que ha logrado recorrer todo el camino que existe desde la investigación hasta la transferencia”, plantea con satisfacción el académico. Y si de logros se trata, para él no hay dudas. “Mis dos hijas son mi mayor orgullo. Una estudia Medicina en la Universidad de Santiago y la otra Ingeniería en la Universidad de Chile. Ambas tienen una importante base científica”, agrega sonriendo.

También destaca la reciente aprobación de los proyectos Fondequip, un fondo estatal que apoya con equipamiento de gran valor. “A la Universidad le fue muy bien. Obtuvimos el tercer lugar a nivel nacional. Hace cuatro concursos atrás habíamos conseguido el sexto puesto”, detalla.

Escenario similar en cuanto a los proyectos Fondecyt de iniciación, de los cuales el Plantel obtuvo doce. “Esto significa que existe una transversalidad dentro de la Universidad, donde ninguna Unidad puede quedarse atrás en el tema de la investigación. Nuestra labor es generar políticas y, en esa dirección, apoyar en todo lo necesario a las Facultades”, explica, “Lo que tenemos que hacer es continuar con la investigación de buena calidad”, añade el Dr. Claudio Martínez.

Investigación para estudiantes

Y tal como lo establece, el proyecto de ley de Educación Superior que se discute en el Congreso tiene una definición muy clara de lo que se debe entender por Universidad. “Es aquella institución que genera conocimiento, lo que significa investigar. Por lo tanto, nuestro aporte a los estudiantes es generar conocimiento junto a ellos e introducirlos en esa dinámica. Es algo intrínseco a nuestra labor institucional”, define con seguridad.

Asimismo, para el académico está claro que muchas ideas surgen precisamente de los estudiantes. “Queremos seguir buscando nuevas y mejores formas para que continúen incorporándose en la labor de investigación”.

En ese sentido, junto con destacar iniciativas de la Vicerrectoría como el programa “Despega Usach”, orientado precisamente a los estudiantes del Plantel para que puedan instalar sus ideas en el mercado, la autoridad comenta un reciente encuentro con representantes del Ministerio de Educación. “Vinieron a evaluar nuestros proyectos y, en el ámbito de la transferencia tecnológica en el que nos encontramos, nos dijeron que estamos, por lejos, mejor que cualquier otra universidad del país”, afirma.

A esto suma la excelente formación de los egresados del Plantel, siendo muy bien evaluados en contextos internacionales, especialmente en el área de la ciencia y la investigación, por lo que “muchos regresan a esta Universidad porque ven aquí la posibilidad de encontrar soluciones en temas de desarrollo, aplicaciones y transferencias”.

Ayudar a gestionar proyectos

En el contexto de la economía basada en el conocimiento, para el Vicerrector surge la necesidad de profundizar en la investigación. “Existe una especie de orfandad en la que se encuentra la ciencia, donde está claro que si el país no se mete de lleno en investigación, desarrollo y transferencia, nos quedaremos atrás. Ahí la Universidad de Santiago tiene mucho que decir y bastante trabajo avanzado”, explica.

Además, recuerda que el financiamiento de las universidades depende de fondos estatales o privados. “El sistema es así, en Chile y a nivel mundial. La debilidad está en que en este país los privados aportan poco a la investigación”, cuestiona el académico. “Como Universidad debemos ser capaces de ganarnos esos fondos y utilizarlos de la mejor manera para aportar en los valores que a nosotros nos interesa, que es formar personas para transformar este país”, añade.

Él mismo detalla que la Vicerrectoría cuenta con una serie de Unidades que buscan detectar oportunidades, con el objetivo de contactar a los académicos para ofrecerles posibilidades y “ayudarlos a presentar, gestionar y desarrollar proyectos desde el punto de vista administrativo. Incluso a transformar el resultado en alguna innovación, patente o publicación”.

Finalmente, su propuesta es que “somos una Universidad del país y nuestra dinámica tiene que ir en función de los intereses nacionales. Trabajamos con recursos de todos los chilenos, por lo que debemos asegurar que regresan a todos ellos”.

Investigador de la U. de Sidney exhibe dispositivo que aumenta el ancho de banda

Investigador de la U. de Sidney exhibe dispositivo que aumenta el ancho de banda

  • El Dr. Álvaro Casas-Bedoya, investigador postdoctoral y académico de esta universidad australiana, presentó en el Planetario un filtro de radiofrecuencias que funciona sobre la base de silicio y que permite aumentar el ancho de banda entre un teléfono celular y un router. La charla se desarrolló en el marco del seminario “Nanofotónica con dispositivos de Silicio”, organizado por el grupo Optical Society of Americas (OSA) Student Chapter de nuestra Universidad.

 





En el marco del seminario “Nanofotónica con dispositivos de Silicio”, organizado por el grupo Optical Society of Americas (OSA) Student Chapter de nuestra Universidad, filial del norteamericano, el investigador postdoctoral y académico de la Universidad de Sídney, Australia, Dr. Álvaro Casas-Bedoya, presentó el funcionamiento de un filtro de radiofrecuencias en base a silicio que permite aumentar el ancho de banda entre un teléfono celular y un router.

Asimismo, el filtro o chip de silicio también puede eliminar cualquier tipo de señal entre un dispositivo y una fuente generadora en una alta frecuencia.

“El chip permite transmitir más información al mismo tiempo, pero también tiene un uso militar, de seguridad. Nos patrocinó la Fuerza Aérea de Estados Unidos, y ellos lo están usando, por ejemplo, implementándolo en una caja en un avión que elimina cualquier frecuencia que esté tratando de comunicarse con ese avión”, señala el también miembro del Centre for Ultrahigh bandwidth Devices for Optical Systems (Cudos) de la Universidad de Sídney.

Funcionamiento

El Dr. Casas-Bedoya, de 36 años, explica que lo que permite aumentar el ancho de banda y, por tanto, la información que se traspasa es la nanotecnología.

“El chip de silicio contiene una guía de onda que es de 450 nanómetros por 220 nanómetros (un nanómetro equivale a la mil millonésima parte de un metro), y con la vía óptica, que es lo que nosotros implementamos, podemos ir de 0 a 40 GHz, es decir, es un ancho de banda es único y no tiene competidor”, recalca el académico.

Actualmente, los filtros de radiofrecuencia son hechos por vía electrónica, es decir, son circuitos de cobre con aluminio, que se traducen en un gran limitante en el ancho de banda con un tope de 5 GHz.

La vía óptica, en cambio, es el vehículo que permite este mayor intercambio de información.

“Técnicamente la luz interactúa con el filtro o chip de silicio y genera una frecuencia acústica, pero al mismo tiempo, esa frecuencia acústica interactúa de nuevo con la luz, para modularla. Ese efecto permite transmitir más información y mejorar las comunicaciones entre un teléfono y el router de una casa, por ejemplo”, asegura el Dr. Casas-Bedoya.

Y agrega “el truco es usar dos láseres que están separados por diferente longitud de onda, diferente color, de tal manera que se genere esa diferencia en el ancho de banda”.

OSA Student Chapter

En tanto, la estudiante de Ingeniería Física y presidenta del Capítulo Estudiantil (Student Chapter) del grupo OSA de nuestra Casa de Estudios, Javiera Cuenca, destaca la participación del Dr. Casas-Bedoya en el seminario, y enfatiza que este tipo de eventos los visibiliza como grupo.

“Estamos trabajando desde el 2008 y estas actividades son para demostrar que podemos hacer  cosas importantes, además de darnos a conocer, porque entendemos que aún no nos conocen mucho la Universidad”, precisa.

La estudiante aclara que “nos motiva mostrar la Física en otro ámbito, sacar un poco la Física de la pizarra y el plumón, que es lo que nos enseñan en el colegio y en la universidad”.

Por su parte, el académico encargado del grupo, Dr. Ernesto Gramsch, del departamento de Física del Plantel, destaca la organización del seminario porque permite a los estudiantes conocer investigaciones y lo que ocurre fuera del país.

“Es importante la organización de estas actividades y que nuestros estudiantes participen en el OSA porque les amplía mucho la visión de lo que ocurre en otras partes del mundo”, puntualiza el Dr. Gramsch.

Añade que “este evento es parte de las actividades que ellos hacen como grupo del OSA. Pero también, por ejemplo, una vez al año va un estudiante a Estados Unidos a hacer una presentación, financiado íntegramente por la Sociedad Óptica de América”, concluye.

Investigadora de la Facultad Tecnológica: Desarrollan tecnología que permite conservar la fruta por más tiempo

Investigadora de la Facultad Tecnológica: Desarrollan tecnología que permite conservar la fruta por más tiempo

  • La académica del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Facultad Tecnológica, Dra. Laura Almendares, junto al equipo que lidera realiza un nuevo aporte a la industria alimentaria: Esta vez, se trata de  una película comestible orientada a prolongar la vida útil de las tunas hasta en 45 días, lo que favorece su comercialización.

 





Chile es uno de los principales países productores de tunas del mundo, sin embargo, la breve conservación en buen estado del fruto de no más allá de siete días, impide su mayor comercialización, e incluso una eventual exportación, perjudicando a pequeños y medianos agricultores del país.

Es por ello, que un equipo liderado por la académica e investigadora del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Facultad Tecnológica, Dra. Laura Almendares, luego de tres años de investigaciones, creó una cubierta comestible con componentes aprobados por la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), que reemplaza la cáscara del fruto y permite extender hasta en 45 días su vida útil.

“La mejor solución para estabilizar el fruto era recubrirlo, y en base a eso presentamos un proyecto, en conjunto con algunos agricultores de Tiltil, para generar esta tecnología. Tras varias pruebas logramos estabilizar el fruto con la cubierta comestible en alrededor de 40 a 45 días”, señala la Dra. Almendares.

La película comestible es indetectable para el consumidor, pero además mantiene intacto el sabor de la fruta.

“Se hicieron evaluaciones sensoriales comparando frutos recién descascarados con otros que tenían la cubierta, y los consumidores no detectaron cambios en el sabor y tampoco detectaron la cubierta. Además, no cambió ni el color ni el olor de la fruta”, recalca la investigadora.

El fruto continúa estable desde el punto de vista microbiológico, sensorial, y físico-químico, y además se elimina por completo el riego de pincharse.

Costos

Según la Dra. Almendares, este proceso no debería encarecer el precio que debe pagar el consumidor por la fruta.

“El costo de la cubierta comestible aún se está evaluando, pero no es cara porque está desarrollada con productos naturales de origen alimentario. Lo que podría, quizás, subir los costos son los envases por el periodo de almacenamiento, y el descascaramiento de la fruta, que significaría una nueva implementación para la empresa que quiera aplicarlo”, subraya la académica.

No obstante, la Dra. Almendares aclara que extender la vida útil del fruto, permitirá aumentar la demanda y, por tanto, la producción, lo que a la larga debería reducir el valor comercial de las tunas.

“Esta solución perfectamente puede llegar al mercado interno como externo, como fruta de cuarta gama, es decir, en sachets, lista para ser consumida por lo clientes”, enfatiza la investigadora.

Otras frutas

La tuna es un fruto rico en antioxidantes, fibra y magnesio, que requiere muy poca agua para crecer, pero también tiene un pH elevado, factor que facilitaría la aplicación de la cubierta comestible en otras frutas.

“La ventaja que tiene esta cubierta es que se diseñó y se evaluó en uno de los frutos más complicados, como la tuna. Y, por tanto, debiera funcionar en otros frutos, con un menor pH, como frutales menores. Podrían ser manzanas, y algún tipo de hortalizas, también, como la palta, por ejemplo”, argumenta la ingeniera agrónoma.

Por ahora, la Dra. Almendares está en conversaciones con varias empresas para ver la posibilidad de licenciar o vender la patente de la cubierta, firmas que ya le han manifestado su interés en elaborar y comercializar la solución.

La investigación fue financiada con recursos de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), dependiente del Ministerio de Agricultura, de pequeños agricultores, y de nuestra Casa de Estudios.

Participaron los académicos, José Manuel Román, como director alterno, y Ruth Salinas, en el análisis sensorial y entrenamiento del panel de evaluadores; estudiantes de la carrera de Ingeniería en Alimentos de la Facultad Tecnológica; y productores de las comunas de Tiltil y Melipilla, encabezados por Nicolás Jofré. Quienes facilitaron las frutas para la investigación.

Reconocimiento

A raíz de esta innovación, y por toda su trayectoria como científica, el pasado martes 30 de agosto, la Dra. Almendares fue distinguida por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), del Ministerio de Agricultura, con el premio Innova + Agro 2016 en la categoría mejor investigador / investigadora a nivel nacional.

“Este es un reconocimiento a nivel nacional. Participaron muchas personas en esto, lo que indica que el grupo que está trabajando en la Facultad Tecnológica ha encontrado el camino correcto para dar solución a algunos problemas y eso ha sido valorado a través de este premio, no solamente para mí, sino que a toda la gente que está trabajando conmigo”, estima la Dra. Almendares.

“Para una universidad estatal es muy importante estar en el medio del sector alimentario, entregando soluciones que ingresan posteriormente al mercado”, concluye la académica.

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