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"La Universidad de Santiago es un verdadero núcleo de investigación"

"La Universidad de Santiago es un verdadero núcleo de investigación"

Estudiar en la Universidad de Santiago, hacer un doctorado y ser investigadora de nuestro Plantel, puede ser un sueño de muchos, pero que pocos pueden lograr. Si a ello, le sumamos que nuestra entrevistada también es profesora por hora en nuestra Casa de Estudios, estamos en presencia de una egresada destacada que cuenta con méritos de sobra para conocerla en este espacio y que considera que la Usach es un verdadero núcleo de investigación en Chile.

Marlén Gutiérrez Cutiño es licenciada en Química de nuestra Universidad, pero tras egresar y titularse, fue por más. Obtuvo su doctorado y se desempeña además como profesora por hora, e investigadora en el Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología, Cedenna. 

Desde pequeña supo que la Química sería lo suyo. Durante la enseñanza media fue cultivando su gusto por esta disciplina. “Yo quería explicar cosas, no solo desde la mera apreciación. No todo sucede porque sí”, relata.

¿Por qué te decidiste a ingresar a la Universidad de Santiago?

A la Usach la conocía y tenía buenos antecedentes de ella. El Plantel estaba dentro de las posibilidades que tenía de postular. Soy de Santiago y de las tres Universidades que había en la capital, decidí por esta antes que las otras. Me llamó mucho la atención el campus. Todo estaba junto. Era una Universidad con un gran campus universitario.

¿Conseguiste becas o créditos para sobrellevar el costo de esta carrera?

Mi familia es de clase media. No tuve becas ni créditos, pero mis padres estaban preparados para ese gasto. Teníamos casa y auto. Yo provenía de un colegio subvencionado y mis hermanos de otros particulares, entonces no cumplía con los requisitos para que me dieran becas. Cuando mi hermano entró a la Educación Superior, a mí me dieron crédito. No me fui a una Universidad privada porque necesitaba un arancel que estuviera a nuestro alcance para pagar. En segundo o tercer año accedí al crédito. La carrera me encantó desde un principio y el ambiente universitario también. Cuando terminé tenía dos opciones: irme a la industria o seguir en investigación, porque en esa época tenías que hacer práctica y tesis para obtener título y grado. Opté por lo segundo.

El camino de la investigación y la admiración por Dora Altbir

¿Dónde hiciste tu práctica?

En el Servicio Médico Legal. No era una práctica convencional. Analizaba muestras. Lo que no me gustó fue hacer siempre lo mismo. No me veía 30 años en eso. Antes la Facultad tenía dos carreras. O eras químico o eras bioquímico, no tenías otra opción. El grado académico era licenciado en química y el título profesional de químico.

¿Cómo prosiguió tu camino académico tras titularte?

Ingresé al programa de doctorado de la misma Facultad e hice cosas poco convencionales para el entorno, porque acá todos los chicos hacían solo ciencia básica y trabajaban cada uno de ellos con su grupo de investigación. Mi tesis de doctorado fue completamente multidisciplinaria, no era solo química, no veíamos solo saltos de electrones y me permitió interaccionar con mucha gente. En la Usach hago clases desde que entré al doctorado. Me he dedicado a hacer ciencia aplicada y ciencia básica en diferentes áreas, soy investigadora en Cedenna y profesora por hora en nuestra Universidad.

¿Cómo es la experiencia de estar ahora entregando tus conocimientos a las nuevas generaciones?

Buena. Es ver la historia desde el otro lado. No estas sentada en la sala, sino que estas enseñando para que te entiendan y a los estudiantes les tiene que gustar lo que entregas. Eso sí, veo diferencias entre los estudiantes de mi época y los de hoy, que yo creo que se notan en todas las carreras. Quedó atrás el cuaderno y el lápiz. Usan el celular para sacar fotos que después no ven. Hay una mayor comodidad de los estudiantes actualmente. Si el ppt no está en sus correos o el libro no se lo entregaron en la sala, ellos no lo buscan. Es una generación menos opinante, donde creo que se les ha dado todo.

Hoy trabajas también en Cedenna, ¿cómo recibiste la noticia del Premio Nacional de Ciencias Exactas 2019 para Dora Altbir?

Actualmente estoy de investigadora en la línea de la química de Nanoestructuras en Cedenna y ahí me dedico a hacer ciencia aplicada, que quiere decir proyectos con empresas, transferencias tecnológicas y solicitudes de patentes, entre otras. Estoy orgullosa del Premio recibido por Dora Altbir, porque ella era casi mi tutora de tesis de doctorado. Era mi profesora del doctorado y después pasó a ser colega. Es sumamente grato trabajar con ella. La distinción fue muy merecida.

¿Hacia dónde se encamina tu futuro profesional?

Quiero que la ciencia llegue a la gente habitual, al señor que te atiende en el supermercado. Que él reciba lo que tu hiciste de ciencia de laboratorio, que lo tenga por ejemplo en un filtro de agua, en un recubrimiento de carnes, en algo así que tu trabajaste para que eso llegara a ser de uso habitual… eso quiero lograr. No quiero que eso se quede solo en la cuna de la Universidad; que no permee hacia afuera. Creo que eso le falta a la ciencia. Para que el país progrese, la ciencia tiene que llegar a todo el mundo, no solo a un grupo selecto de gente. Quiero que los chilenos vean que si el país invierte en ciencia van a obtener beneficios. 

¿Crees que el cambio de Conicyt a Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo se encamina hacia ese objetivo?

Es bueno que todos los proyectos se junten en un solo sitio, pero el problema pasa por el financiamiento. Hay muchas líneas de investigaciones; eran diferentes presupuestos desde donde obtenías el proyecto. Se requiere una inversión significativa en ciencia y estamos muy por debajo de los países desarrollados en este ámbito.

¿Qué es para ti la Universidad de Santiago?

La Usach es mi casa. Es un verdadero núcleo de investigación

“El Pregrado en la Usach me mostró el camino hacia la investigación”

“El Pregrado en la Usach me mostró el camino hacia la investigación”

Rodrigo Fernández Verdejo, tiene 34 años y ya cuenta con un PHD en Ciencias de la Motricidad. Su primera etapa educacional la vivió en un colegio particular subvencionado de La Florida. 
 
En la enseñanza media descubrió su vocación con la práctica del basquetbol. Dio la PSU y su opción fue la Universidad de Santiago de Chile, donde estudió Licenciatura en Ciencias de la Actividad Física, egresó el 2008 y recibió el reconocimiento al mejor rendimiento académico de la carrera, con un 6.6 de calificación. 
 
Sin embargo, su formación en la Usach también orientó su trayectoria laboral dirigiéndolo hacia la docencia universitaria y la investigación. Tres años más tarde recibió el título de Magíster en Ciencias Biológicas, mención Fisiología y posteriormente, el PHD en la Université Catholique de Louvain, en Bélgica. Hoy es profesor con jornada completa, del Departamento de Ciencias de la Salud, Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile, pero su paso por la Universidad de Santiago no lo deja indiferente; muy por el contrario. Se siente orgulloso.
 
¿Qué generación familiar eres de egresados de un Plantel de Educación Superior y por qué te decidiste por la Usach como tu Alma Mater?
 
Soy la segunda generación. En mi juventud quería estudiar algo relacionado con el deporte y en ese momento lo más cercano fue la Educación Física, aunque yo no me veía trabajando en un colegio. Yo me movía en un ambiente más de entrenamiento y ahí es donde encontré la Licenciatura en Ciencias de la Actividad Física con especialidad de entrenamiento deportivo en la Usach. Sentí que era más ad hoc a mis intereses. 
 
¿Era la única Universidad que entregaba esta especialización?
 
Si, al menos en Santiago. Cuando yo ingresé era el segundo año que se daba una Licenciatura en la Actividad Física en Chile yo creo. Siempre tuve en mi mente que las mejores Universidades eran la Católica, la Universidad de Chile y la Usach. Mi hermana mayor había estudiado en la Chile y yo no conocía a otras personas que hubiesen estudiado en la U. de Santiago, pero estaba en mi mente porque es una de las tres grandes. Fue súper impresionante para mi pasar de un colegio pequeño que quedaba a una cuadra de mi casa, a llegar al campus donde había un montón de personas con intereses distintos. Se podían combinar los estudios con prácticas deportivas, con cultura, con la vida social entre los diferentes estudiantes; fue todo un mundo que me encantó.
 
¿Qué opinión te dejó estudiar en un Plantel donde el tema social se vive día a día, no solo en las aulas, sino que en todo el campus?
 
Yo ingresé a la Usach sin becas. Mis papás pudieron pagarme la carrera, pese a que mi familia es de clase media. Vivíamos en La Florida, en un sector nada especial. Lo que si fui el primer seleccionado en ingresar a la Licenciatura y terminé como el número uno también al egresar. Sin embargo, el primer año estuvimos en un paro que duró como tres meses y estaba súper fuerte el tema político. Entonces fue sorprendente ver que había compañeros que tenían tanto conocimiento y luchaban con intensidad por sus intereses. En esos años reconozco que no aprecié tanto esa importancia, porque yo no tenía problemas de becas, por ende, no lo sentía de forma tan directa, pero me impresionó cómo mis propios amigos luchaban por lo que consideraban justo y seguíamos en paro y toma hasta que se solucionaran los problemas. Eran demandas válidas y aunque habíamos algunos que no teníamos estos problemas para seguir estudiando, apoyábamos lo que pidiera el resto porque eran demandas válidas.
 
¿Qué recuerdos tienes del campus de la Universidad?
 
Recuerdo con cariño el Departamento de Deportes, donde pasábamos mucho tiempo; los dos gimnasios, la piscina donde tuvimos natación todo el primer año. Aparte de asistir a clases, integraba la selección universitaria de basquetbol. Para mis intereses, la implementación deportiva era bien buena, también el espacio. El gimnasio principal era súper bueno, me parecía excelente.
 
Fin a la subcontratación y glosario constitucional
 
La Universidad durante el año 2019 estuvo en la noticia por el acuerdo para el término de la subcontratación del personal de aseo y vigilancia. ¿Cómo usachino te enteraste de aquello?
 
Sí, yo creo que el fin de la subcontratación es uno de los cambios fuertes que hace una Institución grande en respuesta a la crisis social que hay en Chile y me siento sumamente orgulloso que haya sido la Usach. Es un ejemplo para muchas otras que están en esta situación, y que hace que las condiciones laborales sean precarias. Nosotros trabajamos ahora en investigación y el sistema nos obliga a contratar gente por honorarios. El sistema te tiene atrapado a condiciones que no son las ideales. Que la Universidad de Santiago haya dado ese paso es un ejemplo a ser imitado por otras Instituciones, aunque lo veo difícil, pero realmente ahí la Usach pisó fuerte con algo concreto.
 
Además, encontré súper valioso que realizaran este Glosario Constitucional. Lo encontré excelente. A mí me llegó porque conozco amigos que trabajan en la Usach…me llegó, lo leí y lo encontré top de top. Se lo pasé a la gente de la Universidad Católica donde yo trabajo y es otro punto donde siempre decimos: hablamos y hablamos, pero alguien tiene que comenzar a hacer cosas. Son dos aportes fuertes que hizo la Universidad de Santiago a la sociedad.
 
El deseo por la investigación
 
Tu curriculum es extenso. No te quedaste solo en la Licenciatura. ¿En qué momento nace el gusto por la investigación?
 
Algunas de las clases del Pregrado en la Usach me generaron este deseo por seguir el camino de la investigación, me generó la curiosidad. En el mismo pregrado contacté profesores que estuvieran interesados en ello, trabajé con algunos y me contactaron con gente en España, pero en un comienzo todo estaba relacionado con el deporte, con el entrenamiento. Realmente eso me hizo aprender mucho de investigación y fue lo que me hizo decidir, ya que en un principio quería ser un entrenador de alto rendimiento, pero la investigación pudo más y seguí el camino de investigador en deportes, con el Magíster y el Doctorado. Sin embargo, todo mi interés nació de la misma Usach conociendo a docentes que me inculcaron ese interés. Hoy mismo estamos postulando un proyecto con una profesora de la Universidad de Santiago, así que sería una colaboración entre ambos Planteles y tenemos otro trabajo de investigación ahora con otro profesor de allá así que, si lo hacemos todos juntos, es beneficio para ambas universidades.

“Me siento orgullosa de la Usach por su papel en la reciente Consulta Ciudadana”

“Me siento orgullosa de la Usach por su papel en la reciente Consulta Ciudadana”

Jeannette Jara Román atiende nuestro llamado desde la Contraloría de la Universidad de Humanismo Cristiano donde están sus oficinas labor que, como abogada, alterna con las clases que realiza como profesora por hora en nuestra Casa de Estudios y su candidatura a magister de Gerencia Pública en la FAE.

Jeannette forma parte de la primera generación de administradores públicos de la Usach, egresó el año 1996 y un año más tarde se tituló. En esa etapa de su vida fue electa presidenta de la Federación de Estudiantes. Destaca que siempre le gustó trabajar en políticas públicas orientadas al bien común.

¿Por qué eligió la Universidad de Santiago para cursar esta carrera?
-Mi padre había hecho un curso de perfeccionamiento a través del convenio CUT- UTE y para él había sido motivo de mucho orgullo estar en esas aulas. Por eso siempre me llamó la atención la historia de la Universidad. Estudié una carrera que tiene diversidad en la composición de sus alumnos, pero que nos transformamos en un núcleo de amigos y compañeros bien potentes. De hecho, hasta el día, de hoy todos los egresados de la carrera estamos en una red y nos comunicamos permanentemente; además, nos divertimos, hacemos asados. Humanamente esta carrera es muy rica, pero tiene una formación muy rigurosa. A veces como egresado, en un principio uno se siente medio inseguro, pero al ejercer te das cuenta de la formación sólida de la Usach.

¿Fueron años difíciles en lo político durante su permanencia en la Universidad, aunque ya hace un tiempo había retornado la democracia?
-Sí, fueron difíciles porque el neoliberalismo se había afianzado durante la transición y había una amenaza de algunos por radicalizar la subordinación al mercado en las universidades estatales. Desde el movimiento estudiantil logramos resistir a esa idea y nos movilizamos con el Confech para detener un proyecto de ley que se llamaba Modernización de las Universidades Estatales, pero en su matriz consideraba la privatización de las mismas.

¿Cómo fue su experiencia de un año dirigiendo la Feusach?
Fui elegida al final del periodo que egresé, el año 96, entonces el 97 ejercí en el tiempo que hacía mi tesis. Mi experiencia fue muy enriquecedora porque tuvimos la posibilidad de reconstruir la Federación de Estudiantes, refundarla. A partir de la lucha contra la dictadura, las federaciones tuvieron una potencialidad importante, pero en los 90 varias se fueron quebrando, entre esas la Feusach que estuvo desaparecida entre tres y cuatro años, porque los movimientos estudiantiles debieron reenfocar su lógica de representación. A mí me correspondió refundar la Federación con propuestas alternativas: primero el arancel diferenciado y luego la gratuidad; el claustro universitario que pretendía abrir espacios para la democratización del Plantel y además el Plan Estratégico Institucional, que la vincularía con el desarrollo del país, en una matriz de justicia social. En lo cultural, además, la semana cachorra del 97 constituyó un gran hito de nuestra gestión, porque en la Escuela de Artes y Oficios pudimos ofrecer La Negra Ester, en forma gratuita y con Andrés Pérez encabezando el elenco, lanzando a la multitud un ramo de crisantemos al finalizar la obra. Eso aún me emociona.


Volviendo a los tiempos actuales, ¿cómo ve la actual Universidad de Santiago y qué ha significado en su vida profesional?
La Usach es mi casa. Siento un gran afecto por la comunidad universitaria, por sus trabajadores, estudiantes y académicos, pero además por su historia, por haber estado siempre al servicio de la educación pública y del desarrollo del país. Nuestra Casa de Estudios enfrenta enormes desafíos que la harán avanzar aún más en su carácter de Universidad nacional y en el aporte a la comunidad, pero sin duda hechos como su labor en la Consulta Municipal, donde la Usach ocupó un rol tremendamente importante, me hacen sentir mucho orgullo de haber estado en sus aulas. Concuerdo plenamente con aquella frase: “El profesional no nace. El profesional se hace” y eso te lo da el Plantel, no solo su formación académica, sus relaciones interpersonales, su formación cultural y propedéutica más allá del ámbito de los ramos que haces. El hecho de que todos estemos en un mismo campus te hace conocer compañeros de otras carreras, la organización triestamental también. Es un bello ejercicio de vida pertenecer a la Universidad de Santiago.

Pensiones y crisis social

Es inevitable consultarle como exsubsecretaria de Previsión Social sobre el manejo del Gobierno frente a las demandas sociales y en particular del tema pensiones. 

"El tema de las pensiones grafica el tema de la dignidad en la crisis sistemática, porque tienes en esa demanda, muy sentida, muy necesaria e indispensable, no solo a los pensionados luchando por ella, sino que también tienes al conjunto de la sociedad pidiendo dotar de dignidad a las personas mayores. Por eso, este despertar de Chile es más integral y sistémico que lo que vimos antes, pero además nos desafía a encauzar un camino de soluciones para el futuro, con bases de igualdad y justicia social. Hay que leer lo que la ciudadanía está diciendo. No puede pasar que se tape el sol con un dedo y con pequeñas medidas de agenda, no sustantivas, nos quedemos conformes porque si eso ocurre en un tiempo mediano va a volver a estallar".

Desde su experiencia, ¿qué debería hacer el Gobierno para mejorar las pensiones de los chilenos?
Déjame darte un dato. De los últimos pensionados del mes de noviembre, la mitad eran mujeres y la mitad de ellas tuvo una pensión inferior a 1 UF. La tasa mediana de pensiones en Chile está en 25.500 pesos. No podemos pensar que un pequeño reajuste solucione este drama. Se requiere una reforma tributaria progresiva, que aporte mayores recursos al Estado de quienes más ganan e incorporar solidaridad a través de mecanismos de reparto, que hagan de Chile un país con sistema mixto.

Arquitectos Usach elaboran cartografías urbanas y su relación con conflictos sociales del país

Arquitectos Usach elaboran cartografías urbanas y su relación con conflictos sociales del país

 
Hace un año, los arquitectos Rolando Durán Cavieres y Alejandro Díaz Jara, iniciaron, junto al historiador Jaime Navarrete, el colectivo “Cartografías de la Memoria”, un proyecto interdisciplinario que busca visualizar, a través de mapas, las acciones y reacciones de los procesos socio-espaciales entre 1970 y 1976.
 
En ese marco, postularon el trabajo “Hacia un urbanismo de los procesos socio-espaciales: Cartografías de la Memoria. Utopía y terror en Santiago de Chile 1973-1976” al Fondo Nacional del Desarrollo Cultural y las Artes (Fondart) en la línea de Arquitectura y modalidad investigación, adjudicándose los recursos.
 
De acuerdo al responsable del proyecto, Rolando Durán, este trabajo “trata de mezclar la historia con las cartografías para dar un espacio a aquellos procesos que nos parecen relevantes y que no están visibilizados”.
 
Esta investigación, sostuvo el arquitecto, les permitirá relacionar las acciones durante los movimientos y conflictos urbanos para conocer cómo se fue construyendo la ciudad en torno a ello. 
 
Estallido social
 
En pleno desarrollo del estudio, comenzaron las protestas de octubre y la crisis social en nuestro país. “El 19 de ese mes, hablamos por teléfono con Alejandro y pensamos que con todas las herramientas que teníamos gracias a este proyecto, debíamos hacer algo”, recordó el arquitecto Durán. 
 
“Nos vimos en la necesidad de aportar y registrar lo que estaba pasando, pero, además, entender este conflicto desde el punto de vista urbanístico”, agregó su compañero Alejandro Díaz. 
 
Al plantearse la inquietud, se inició el nuevo proyecto en el que ambos trabajan en paralelo al Fondart. En este son acompañados por Francisco San Martín Ide, Danitza Valenzuela Valenzuela, Camila Espejo Vallejos y Francisca Geisse Rodríguez,  rastreando las acciones realizadas desde el viernes 4 de octubre, que es la primera evasión masiva del Metro, hasta el día de hoy, en la ciudad de Santiago.
 
En ese momento comenzaron la recopilación de datos para levantar cartografías del conflicto, “empleando las herramientas que desarrollamos en el Fondart, con el objetivo de resguardar y ordenar la enorme cantidad de información disponible y categorizarla”, añadió Díaz. 
 
En esa misma línea, enfatizó que la idea es comprender el fenómeno social, creando un vínculo entre el pasado y el presente para analizar las relaciones entre los dos momentos históricos.
 
Para los arquitectos de la Usach, este segundo trabajo en el contexto del estallido está ligado a la formación que recibieron en nuestro Plantel. “Nosotros tuvimos la idea de hacer esto como una forma de ayudar y contribuir al país de manera pertinente, y creo que eso es parte de la formación de la Escuela de Arquitectura de la Usach, que te entrega esa perspectiva junto con el deseo de colaborar con el desarrollo de Chile”, sostuvo Durán.
 
Hallazgos preliminares 
 
Dentro del Fondart, los investigadores pudieron identificar algunas ideas preliminares. Por ejemplo, la primera manifestación que se registró en Plaza Italia ocurrió en octubre de 1970, cuando un grupo de personas sin vivienda se tomaron el sector, que hasta ese momento no era un lugar de protesta. “Podemos decir que en la historia se guardan algunas huellas y recuerdos que aparecen ahora, varios años después”, explicó el arquitecto Díaz. 
 
En ese sentido, Durán comentó que recientemente se levantó el ‘Campamento de la Dignidad’ en el exterior del Palacio de Tribunales en Santiago. Ese recurso también se utilizó en Plaza Italia, por lo tanto, continúan apareciendo atisbos de memoria. Podemos comprender lo que ocurre hoy con los hallazgos del pasado, dijo.
 
Por otro lado, un tema que surgió en la investigación fue el problema de la infraestructura y cómo la segregación genera diferencia de clases. 
 
Mencionaron por ejemplo las carreteras o el propio Metro de Santiago, “que pasa por sobre nivel en algunos sectores, y en otros bajo nivel, provocan enclaves, es decir, situaciones aisladas del resto de la ciudad”, sostuvieron.
 
Al explicar el título “Utopía y terror”, los arquitectos cuentan que, en los límites de la mancha urbana de Santiago, hubo un periodo de cordones industriales –organizaciones obreras que se instalaron en grandes avenidas-, donde la ciudad estaba muy conectada entre sí. “Esto nos demuestra que la infraestructura social permite no tener segregación”, detalló Durán, aduciendo al término “utopía”.
 
Por su parte, Díaz explicó que el término “terror” viene de la planificación urbana oculta y subterránea, como los centros de detención y tortura. “Tras un mapeo, hallamos que estos tienen una distribución singular en Santiago y vemos cierta organización”, aseguró.
 
Detallaron que correspondería a una planificación militar. Su origen "tendría que ver con la guerra colonial francesa que desarrolla una metodología para hacerse cargo de un territorio determinado. Eso se traspasa a Chile y Argentina, lo cual es una manera de ordenar el territorio a través del terror”.
 
Otro de los aspectos que identificaron los investigadores se relaciona con las denominadas Operación Confraternidad I y II, realizadas en la década de los años ochenta, donde camiones militares llegaban a los campamentos que se ubicaban principalmente en las comunas de Las Condes, Providencia y Santiago, para llevar a estas familias a la periferia de Santiago, como por ejemplo a La Pintana. 
 
“Este es un ordenamiento del espacio y no aparece en ningún plano. La Pintana se habitó de erradicados y la comuna se vio obligada a ser el lugar de llegada de la pobreza, estableciéndose un estigma sobre la comuna y sus habitantes”, enfatizó el arquitecto Durán. 
 
Las conclusiones respecto de ambos proyectos serán presentadas el próximo año. Con ellas será posible realizar el enlace entre los procesos pasados y presentes para comprender el fenómeno desde el territorio.

 

“Estudiar en la Usach fue mi mejor decisión de futuro: me entregó el amor por la radio y la fotografía”

“Estudiar en la Usach fue mi mejor decisión de futuro: me entregó el amor por la radio y la fotografía”

La dilatada trayectoria de Sergio Cancino se inicia con colaboraciones para la Zona de Contacto, Cuerpo D Reportajes y Wiken del Diario El Mercurio. Fue creativo, editor y conductor en Radio FM Tiempo; columnista en Revista Vive y Rolling Stone Chile; editor y conductor en Radio Concierto; Director de Radio Rock and Pop entre el 2008 y 2010, conductor y director de la desaparecida Radio Uno. Hoy dirige la Radio Concierto.
Desde sus oficinas del conglomerado Ibero Americana Radio Chile nos cuenta de su orgulloso pasado usachino.


¿Por qué estudiaste periodismo?


-Me parecía que esta carrera era suficientemente flexible, que me permitiría hacer periodismo cultural por un lado (cine, libros, la música), pero en algún momento también me gustó el periodismo científico. Quería ser como Hernán Olguín. Inicialmente quería ser astrofísico, pero mis resultados en física y matemáticas eran del montón, por eso opté por el humanismo y también en algún momento alucine con el periodismo internacional de Informe Especial y Santiago Pavlovic. La carrera de Periodismo en la Usach juntaba muchas cosas, incluyendo la fotografía que me apasiona.


¿Por qué te decidiste por la Universidad de Santiago?


-Postulé a la Universidad de Chile, pero algo pasaba ese año con la admisión allí y opté por la U. de Santiago. La Usach tenía una especie de puntaje adicional para quienes veníamos de regiones y estábamos dentro de los mejores alumnos de nuestra generación. Entonces, tuve una bonificación que me dejó muy arriba en el corte. Cuando niño y venía de paseo a Santiago alucinaba con el Planetario. Recuerdo que estudiar en la Universidad del Planetario tenía un atractivo doble para mí. Con el paso del primer semestre me di cuenta que había tomado la mejor decisión, porque me sentía muy cómodo en la Usach, era muy diversa, tenía historia y peso en la vida estudiantil universitaria que era innegable.


¿Sentiste el impacto del cambio tras llegar de una ciudad pequeña como Molina a estudiar a la capital en una Universidad estatal?


-Sí, yo venía de una zona rural vitivinícola. Mi hermano y yo fuimos la primera generación de la familia que estudiamos en la Universidad. Mis padres solo completaron el cuarto medio. Había un rollo familiar muy potente. Era importante estar en una Universidad estatal tradicional. Para mis compañeros yo era un huaso…me hacían bromas, por ejemplo, de que los diarios llegaban cuatro días tarde a Molina. Eran bromas de cabros, y me gustaba eso. Claramente era lo que esperaba de mi Universidad, que me abriera la mente para conocer otro tipo de realidades. Siempre me llamó la atención que en mi generación de periodismo en la Usach hubiese gente de derecha y me gustaba mucho que hubiesen elegido nuestra Casa de Estudios, que básicamente siempre ha estado relacionada con la centro izquierda, digamos. Esa convivencia entre personas con distintas ideas y orígenes hacía muy valiosa la experiencia universitaria.


Formación, mucha calle y su primera aparición en TV


Sergio Cancino recuerda con emoción las aulas de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Santiago. Habla con especial cariño de la profesora de fotografía, Iris Colil y si bien comenta que la carrera era relativamente nueva en los años que él estudió, la orientación práctica que le daban sus docentes era destacable. Aquí nació el amor por la radio y por la fotografía, sus dos grandes pasiones. Comenta que su paso por el Plantel no estuvo exento de anécdotas.


-Desde los primeros años de Universidad los profesores y todo el contexto de la carrera, buscaban que perfeccionáramos el oficio periodístico, hiciéramos mucha calle, más allá de los ramos teóricos o excesos de lectura. La Usach nos pedía reportear desde muy chicos, estar en contacto con la realidad. Que la Universidad estuviese en Estación Central, con todos los campus juntos, era una valiosa riqueza.


En otras entrevistas, los egresados han valorado de la Universidad de Santiago su formación profesional. ¿Concuerdas?


-Yo recuerdo la exigencia que nos hacía la Usach (y pienso que ahora es aún más porque hay muchas escuelas de periodismo), que era marcar la diferencia. Teníamos que ser muy profesionales, muy rigurosos, porque afuera la competencia era dura con la Chile, la Católica, porque estaba periodismo de la Diego Portales, por ejemplo, que estaba entrando con fuerza. Las privadas tenían más tecnología que nosotros, pero lo suplíamos con el profesionalismo.


A propósito del contexto de crisis social actual, ¿te tocó vivir también momentos de protestas en la Universidad, bajo el Gobierno de Frei Ruiz-Tagle?


-Recuerdo que en el primer semestre tuvimos una toma. Obviamente yo participaba porque me parecía que también era parte de la vida universitaria exigir respuestas a demandas justas. También viví esos rigores y siempre me acuerdo que en unas de las primeras tomas llegaron las Fuerzas Especiales muy temprano a sacarnos. Estaba el móvil del Buenos Días a Todos transmitiendo y desde Molina mis padres vieron en directo pasar a su hijo con su saco de dormir rumbo a la calle.


Como periodista, en una línea, ¿qué es para ti la Usach?


La Universidad de Santiago es para mí la “gran vieja escuela”. Fue muy importante mi vida universitaria en la Usach, por toda su tradición. Yo hago clases en otras universidades y valoro mucho el concepto de vieja escuela del reporteo, de los académicos que nos enseñaron el oficio. Tiendo a ver en estas nuevas generaciones en la era digital, donde parece estar todo disponible en internet y redes sociales, que eso se ha ido desvaneciendo.

U. de Santiago convoca a egresados a construir propuestas para el país tras estallido social

U. de Santiago convoca a egresados a construir propuestas para el país tras estallido social

Al menos cien egresados y egresadas de la Universidad de Santiago de Chile llegaron al Campus de nuestro Plantel para ser parte de un Cabildo, en el marco del estallido social que vive el país.


La instancia fue convocada por la Unidad de Vínculos con Egresados y Sectores Productivos de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio, en conjunto con la Red de Agentes de Vinculación con Egresados, integrada por las unidades académicas de nuestra Casa de Estudios.


El objetivo es que este grupo se sume al trabajo que desarrolla la comunidad universitaria en la co-construcción de propuestas para el país, desde la visión de las y los egresados de la Usach, luego del movimiento ciudadano.


Al término de la jornada, la Vicerrectora de Vinculación con el Medio, Dra. Karina Arias Yurisch, señaló que el sello y vínculo de los profesionales de nuestra Casa de Estudios permanece intacto. "Ellos y ellas siguen conectados con las problemáticas sociales, por lo mismo quieren participar activamente, respondiendo al llamado que realizamos para este Cabildo", sostuvo la autoridad universitaria.


La Dra. Arias indicó que entre las conclusiones "hay una necesidad de que la Universidad aporte en términos de educación cívica y entendimiento a toda la comunidad, ya que es lo que se requiere para vivir un proceso constituyente".


"Una idea concreta fue hacer una convocatoria para tesis de pregrado y postgrado para que nuestros estudiantes actuales puedan conectarse inmediatamente y contribuir al desarrollo del país con respuestas técnicas concretas en este contexto", puntualizó la Vicerrectora. 


Adicionalmente se propuso la fundación de la nueva Escuela de Artes y Oficios de la ciudadanía, así como también de cursos abiertos; ampliar estas instancias para convocar a egresados de otras universidades estatales y que la Usach apoye iniciativas relacionadas con los Derechos Humanos, reivindicaciones sindicales, etc.


El espíritu usachino


La Jefa de la Unidad de Vínculos con Egresados y Sectores Productivos, Georgina Durán Lorca, destacó la convocatoria del llamado a participar en el Cabildo, lo que "demuestra el interés de los profesionales de la Universidad por lo que ocurre en el país", dijo.


Para el ganador del Emmy y publicista titulado por la U. de Santiago, Hernán Caffiero, este encuentro fue una instancia "muy necesaria por parte de la Usach, como actor preponderante en la historia republicana de Chile. Este Plantel ha sido fuente y generación de conocimiento y de personas que contribuyen al desarrollo de este país", precisó.


"Es fundamental que quienes hemos estudiado acá y hemos sido parte de este espacio, podamos volver a encontrar y aportar a través de la opinión, a tratar de generar un Chile más justo", remarcó.


Víctor Leyton Inostroza, ingeniero civil en obras civiles, calificó la actividad como una excelente iniciativa. "Nunca es tarde para comenzar cambios y generar estas instancias de discusión, de compartir opiniones entre distintas generaciones de profesionales", expresó.


La contadora auditora Miriam Soto Ávila, manifestó su "gratitud y sorpresa porque hacía mucho tiempo que no recibía de la Universidad una invitación como ésta. Siento que es lo que tenemos que hacer, organizarnos y dar opiniones, pero sobre todo, escucharnos y respetarnos".


Cabe destacar que la jornada incluyó el apoyo de un profesional de Eciades, quien se encargó de realizar juegos recreativos para las y los niños que llegaron junto a sus padres.

"La Usach es un lugar de formación académica del espíritu y la conciencia"

"La Usach es un lugar de formación académica del espíritu y la conciencia"

Cuenta con 17 años de experiencia en equipos de alta exigencia en áreas de políticas, planes y programas de inversión y desarrollo. Ha diseñado tresplanes especiales para zonas extremas y tuvo a cargo la primera consulta indígena realizada en Chile en el marco del convenio 169 de la OIT al pueblo Rapa Nui. El curriculum de la Administradora Pública de la Universidad de Santiago, Natalia Piergentili es extenso, y está orgullosa de su formación en nuestra Casa de Estudios, a tal punto que volvió a las aulas para formar a nuevas generaciones como profesora por hora. Natalia ha sido presidenta del Instituto Nacional de Normas (INN); jefa de la División de Desarrollo Regionalde la Subdere; subsecretaria de Economía y mentora de Comunidad Mujer.

¿Por qué eligió laUniversidad de Santiago para formarse como administradora pública?

-Yo no era ni matemática, ni científica en mi periodo escolar, pero me ibabien en las dos áreas. Si bien no tenía claro que quería estudiar, deseaba trabajaren gestión haciendo cosas en lo público. Tenía dos opciones, entrar a laUniversidad de Chile o la Universidad de Santiago, porque meterme a unaUniversidad privada era para mi familia pena de muerte. La sede deAdministración Pública en la Chile era pequeña. Yo quería un concepto de unaUniversidad de verdad. Aquí vi gente diversa, tuve compañeros, yo venía de uncolegio de monjas, conocí realidades distintas, quería entender de política. LaUsach me educó como ciudadana, como persona social.

¿Qué significó la Usach entu vida profesional?

-Nosotros salimos muy bien preparados sobre todo en las áreas más duras,tales como economía y finanzas. Yo me comparaba en esa época con los egresadosde las Universidades de Chile, Concepción, una que otra en el norte y la U Central entre las privadas que impartían Administración Pública, entonces como nosotros estábamos en la FAE teníamos mucho más acercamiento con las Finanzas y la Contabilidad. En la Chile, en cambio, pasaba que tenías muchos aspirantes a ser cientista político. Al egresar de la Usach, yo y mis compañeros nos insertamos laboralmente de inmediato, fuimos súper valorados en el mercado. Siento que salí con un buen background académico.

Estoy orgullosa de mi Universidad

-Fue una de las noticias más comentadas en la prensa y en redes sociales.Nuestra Universidad puso fin este lunes al subcontrato de personal de seguridad, aseo y jardines. Natalia Piergentili sostiene que esta decisión no se trata solo de una medida económica. “El 2017 el PNUD había lanzado un estudio que decía que entre las cosas que los chilenos se sentían más maltratados era por su condición social. Estas personas sienten dignidad ahora por formar parte de una institución, más allá de que ganen más dinero al no estar tercerizados, porque la Universidad de Santiago valora su trabajo, los acoge y les entrega beneficios a ellos, ellas y a sus familias”, destaca con emoción.

¿La Usach está abriendo un nuevo camino a sujuicio?

-Una vez más estáyendo a la vanguardia. Creo que aquí el triestamento funcionó. Lo que se ha hecho tiene enormes externalidades positivas y es una muestra de cómo una Universidad pública, con tradición e historia, además con campus integrados, genera valor social y público más allá de educar a los jóvenes; una Universidad que genera discusión acuerdos y acción. Ese es el sello de nuestro Plantel que me hace sentir orgullosa.

En una frase, ¿cómo definiría a la Universidad deSantiago?

Para mí, la Universidad de Santiago es un lugar de formación académica del espíritu y la conciencia.

El estallido social y las demandas

Imposible sería entrevistar a Natalia Piergentili y no consultarle su opinión como ex subsecretaria de Economía, sobre las medidas que está implementando el Gobierno de Sebastián Piñera para dar respuesta a las demandasde los chilenos.

¿Cuál es su percepción delmomento social, económico y político actual?

-Viendo el tema en perspectiva, a mí me tocó también participar de un Gobierno que tuvo alta desaprobación, con cifras de crecimiento que no eran tan auspiciosas y donde la coalición se había desgranado un poco. Entiendo que hay que enfrentarse a contingencias, pero lo que se vive hoy es algo que ni en mis peores sueños pensé que ocurriría. Las medidas en favor de las pymes, puntualmente, son para el hoy, lo inmediato y efectivas. Es el ABC de lo que sepodría haber hecho, sin desmerecerlas, pero eso solo puede paliar los efectos del último trimestre, es decir lo que tiene que ver con los pagos del IVA, con los PPM y no dejar sin trabajo a la gente ahora. Sin embargo, enero y febrero,son meses difíciles de estacionalidad económica. Además, no veo al Gobierno actuar con prontitud dar una hoja de ruta de las reformas relevantes que requiere el sistema para volver a tener grados de cohesión social. No he escuchado hablar a Piñera de una gran reforma en salud, ni al sistema depensiones. Hoy son puras píldoras. No veo recesión en este momento, pero sí estamos en una desaceleración grande. Estamos con una fiebre en 38 grados, pero si pasa a 40, uno comienza a delirar y el paracetamol no será suficientes para bajarla.

¿El camino del Gobierno esoptar por un mayor endeudamiento para hacer frente a las demandas sociales?

-Si bien Chile tiene un nivel bajo en endeudamiento en consideración con el Producto Interno Bruto, nos vamos a endeudar solo para efectos del Bono para estas políticas puntuales. Lo bueno es que no tienen pensado endeudarse para políticas generales o sea para gastos permanentes, pero como el Gobierno nohabla del tipo de justicia tributaria que hay que tener, yo no sé cómo está proyectando el gasto permanente.

Y del anunciado bono de 100 mil pesos para familias vulnerables, ¿qué opina? La derecha siempre condenó estas medidas calificándolas de asistencialistas.

-Yo creo que uno es esclavo de sus palabras. A esta misma fecha, hace dos años Bachelet tenía una aprobación del 30 % o sea muy por sobre Piñera y casi le decían “atine”. Pienso que es el sino de un Gobierno que ha tenido que retrotraerse de gran parte de las cosas que dijeron para llegar al poder: orden y progreso, bonos y asistencialismo, Constitución perfecta. Es una más de aquellas, por las cuales han tenido que decir la verdad. 

“En la U. de Santiago me encontré con un hobby: la publicidad es mi pasión”

“En la U. de Santiago me encontré con un hobby: la publicidad es mi pasión”

 
Abrir su curriculum es sumergirse en un mar de premios y reconocimientos nacionales e internacionales. Pancho González, no usa su nombre Francisco, porque Pancho es su marca. No cambia su nombre en el Registro Civil, porque –dice- “hay temas de contratos de propiedades y sería engorroso hacerlo.  Reconoce que desde pequeño era muy inquieto y curioso. Luego en su juventud quiso estudiar medicina. Dio la Prueba de Aptitud Académica, pero el puntaje no fue suficiente, por lo tanto, postuló a varias carreras, entre ellas a Publicidad. En ese instante, la U. de Santiago era el único Plantel estatal que dictaba la carrera. Pancho González se tituló el año 1994.  “Yo descubrí la Publicidad más que buscarla y en el primer semestre me gustó tanto que comencé a hacer práctica en una empresa. Me encantó la creatividad, las ideas, la gráfica…me embalé y no he parado hasta el día de hoy”, recuerda.
 
Pancho González ingresó completamente becado a estudiar a nuestra Universidad.
 
-Tenía notas muy buenas en enseñanza media. En esa época no se pagaba el semestre. Así que no tenía nada que perder. Obtuve la beca Mineduc también y prácticamente toda mi educación en la Usach me costó casi cero.
 
¿Estudiar casi gratis es, sin duda, un peso menos para concentrarse específicamente en terminar una carrera o no?
 
-Sí, fue muy valioso. Yo creo que la deuda pendiente en el pagaré universitario habrá sido unos 200 mil pesos. Tenía todas las becas. Publicidad fue un descubrimiento para mí. De hecho, toda mi familia estaba en contra. No hay pega para los diseñadores, me decían. En esos tiempos no se sabía mucho qué hacía un publicista, pero hoy el campo es mucho más amplio. Además, era tema el retorno económico al egresar. Todos sabemos cuánto gana, más o menos, un médico o profesionales en las carreras de la ciencia, pero en publicidad no. Nadie en mi familia estudió carreras vinculadas con la economía creativa.
 
¿Qué recuerdas de la Usach que te haya marcado?
 
-Lo que más me gustó fue conocer gente de otras carreras. Tenía amigos de todos los sectores sociales. Las conversaciones eran muy ricas desde el plano intelectual. Estuve en la Usach en una época en que el país venía saliendo de la dictadura, tenía compañeros de todas las edades y tendencias ideológicas. En general vi gente que iba a la Universidad a hacer, más que a que le hicieran las cosas.
 
¿Ese dirías que es uno de los sellos de los egresados de la Usach?
 
Absolutamente. Cuando tú ves a un egresado usachino te das cuenta que ese tipo no te va a preguntar qué tengo que hacer. No se va a quedar esperando sentado en su silla que le llegue una orden de trabajo.
 
Curriculum destacado
 
Pancho González, es publicista de la Universidad de Santiago y MBA de la Berlin School Steinbeis University, Alemania. Ha trabajado en las mejores agencias del país y en la actualidad es co-fundador y director general creativo de Inbrax Chile; director de Achap y director y vicepresidente de la IAB Chile, asociación de empresas orientadas a la publicidad interactiva.
 
Ha sido jurado en los principales festivales de publicidad del mundo, entre los que destacan: Cannes, Art Director's Club, Clio, LIAA, The New York Festivals, Mobius, Webby Awards, Ad Stars, FIAP, Effie Latam, Golden Awards, Eagle Awards, Cresta Awards, El Ojo de Iberoamérica y Achap (Chile), entre muchos otros. 
 
Fue el primer chileno en ser presidente del jurado de los AME Awards en New York y en enseñar en Miami Ad School. Cuenta con más de 100 reconocimientos nacionales e internacionales. Está entre los mejores 25 directores generales creativos del mundo y Top 100 Influencer por Creativepool 2017-2018-2019. Adlatina ubicó su agencia en el Top 10 del Ranking Crema 2014 y el 2016 en el puesto número 7 del WINA Festival. El 2017 en bestadsontv.com fue Top One en directores creativos, Top 5 en directores generales creativos e Inbrax Top 8 a nivel global.
 
En 2018, fue el primer chileno en ser jurado del World Media Awards (Inglaterra), además jurado en Muse Awards (Alemania), Mobile Web Awards (USA), Webby Awards (USA), Cresta Awards Grand Jury (USA), Lisbon International Advertising Awards (Lisboa), Web Awards (USA) y W3 Awards (USA).
 
Este usachino además fue nominado MKTG Best Director General Creativo (Chile), finalista Small Agency Creativepool y Best of Show 2018 en Summit Creative Award.
 
¿Qué te entregó la Universidad de Santiago en tu formación como publicista para lograr tanto prestigio en el mercado publicitario nacional e internacional?
 
-Yo miro lo que he hecho y donde estoy ahora, dirigiendo una empresa, liderando equipos de millennials y centennials y creo que he hecho de todo en este negocio. Yo diría que lo más importante que me entregó la Usach, fueron sólidos conocimientos de cómo se gestiona una estrategia de comunicación y cómo llegar a cada segmento de consumidor. Pero, también me ayudó a entender los principios bases de la comunicación y de la ciencia técnicamente creativa, para generar ventas. En la época en que yo estudié todo era off line, hoy todo es instantáneo, pero los jóvenes no tienen idea de cuáles son los procesos.
 
Pancho González destaca el énfasis matemático que tiene el pregrado de la Usach, porque ayuda a que el profesional se desarrolle como creativo, pero con una visión más comercial. Recuerda que después de egresar de publicidad, estudió Ingeniería Comercial en la FAE, pero en la noche. Su pasión fue tanta por la publicidad que el éxito que tuvo como creativo lo hizo abandonar esa carrera. “Le tengo mucho cariño a esta profesión que me permite superar presiones, stress, carga laboral, dificultades, y hasta pérdidas económicas. Siento a la publicidad como un hobby y soy un agradecido de la Universidad de Santiago, mi Alma Máter”, concluye.

"Descubrí la Usach, me conquistó y marcó mi trayectoria social"

"Descubrí la Usach, me conquistó y marcó mi trayectoria social"

 
El tema social está en su ADN, pero se encauzó cuando ingresó a estudiar Historia en la Facultad de Humanidades de nuestra Casa de Estudios. La protagonista del #Soy Usach de esta semana es Antonia Garcés, actualmente Directora Metropolitana de la Fundación para la Superación de la Pobreza, Servicio País, institución privada, sin fines de lucro, que trabaja con fondos del Estado. La entidad cuenta con cuatro grandes programas, de los cuales el principal es Servicio País que envía, por un año, a jóvenes universitarios a vivir a comunas aisladas territorialmente y/o con altos índices de vulnerabilidad social, para prestar apoyo a sus habitantes.
 
Servicio País también tiene como objetivo descentralizar el capital humano. “De hecho el 1 de octubre se abrió la campaña de postulación para seleccionar a 300 profesionales, que partirán a distintos puntos del país. Siempre la Usach está presente en estas convocatorias y muchas veces los estudiantes viajan, por ejemplo, a Colchane o a Guaitecas, que son localidades donde no existe un capital humano específico, y que marca una diferencia profesional significativa”, explicó.
 
La egresada de Licenciatura en Historia de la Usach puede hablar con propiedad sobre el tema, ya que hizo Servicio País en la comuna de Alhué. “Tengo amigos arrieros, una abuelita de 80 años que fue toda su vida profesora normalista… uno llega a personas que jamás pensó conocer. Entonces, ese cambio biográfico es realmente impactante. Nosotros tenemos un slogan que resume esta percepción: un año que puede durar toda tu vida”. 
 
Tras ese año de voluntariado, los jóvenes manifiestan un cambio notable en sus vidas. “Muchos ingenieros o jóvenes que postularon desde el área técnica vuelven con una mirada distinta de la importancia de trabajar en el servicio público”. 
 
La Fundación entrega un aporte de 530 mil pesos mensuales y con eso los seleccionados costean su permanencia en los lugares a los que son enviados. En zonas más extremas reciben un aporte un poco mayor.
 
La Usach y la historia
 
Fue durante su periodo como alumna de enseñanza media que se forjó el horizonte laboral de Antonia Garcés. Tras dar la PSU su idea fue estudiar Historia, posiblemente porque desde el seno familiar esta profesión estaba asentada hace mucho tiempo. Su padre, Mario Garcés, es historiador y académico de nuestra Universidad. Durante los dos primeros años que ella cursó esta carrera, su padre aún no dictaba cátedra en nuestro Plantel y llegaron a un acuerdo para que nunca compartieran aulas. “Podía ser contraproducente”, reconoce. La Directora Metropolitana de la Fundación para la Superación de la Pobreza, recuerda con cariño a grandes docentes de nuestra Casa de Estudios. “Me hicieron clases los doctores Julio Pinto e Igor Goicovic. También la doctora Cristina Moyano, entre otros. Era una Escuela de Historia tremendamente llamativa el 2006“, recuerda.
 
¿Cuál fue la primera impresión al ingresar a la Usach? 
 
 -La Usach es una Universidad grande, donde llega gente muy distinta. Yo venía de un colegio privado, donde éramos todos parecidos socialmente, pero aquí había un mundo mucho más abierto… Esta Casa de Estudios es representativa de un país. Hay gente de todos los estilos, lugares y valores. Reconozco que, en un principio, no tenía muy claro querer estudiar en la Usach… la fui descubriendo, y me fue conquistando.
 
¿Qué importancia le asignas a nuestra Universidad, en el compromiso social que hoy te tiene en un cargo tan importante en la Fundación para la Superación de la Pobreza?
 
-Mi familia es bien diversa socialmente y por ende este tema estuvo siempre muy instalado. Cuando pequeña iba con mis papás a las poblaciones, pero la Usach me dio un espacio que me permitió escuchar historias distintas. Recuerdo a compañeros de regiones que venían con mucho esfuerzo a Santiago o aquellos que eran primera generación de sus familias en ingresar a un Plantel de Educación Superior. A mí me pagaban la Universidad. Éramos pocas y eso abrió mi mente. La Usach fue formativa en ese sentido, pero siento que fue algo más coherente, fue parte de mi trayectoria de vida. Lo social se profundizó en esas salas de clases y eso hizo que quisiera trabajar en una institución como la Fundación, donde la descentralización y la justicia social, son valores que la U. de Santiago me ayudó a profundizar.
 
La conversación y un café
 
Antonia regresó a la Usach hace algunas semanas invitada a participar de un desayuno de egresados destacados con nuestro Rector Dr. Juan Manuel Zolezzi Cid.
 
Me imagino que, al transitar por estos espacios, los recuerdos volvieron a tu mente.
 
-Si, en particular mi mirada se quedó en los quioscos. Siento que es una particularidad de la Usach ese espacio tan democrático donde te encontrabas con el profesor tomando un café o con mis dos grandes amigas que aún conservo. La clase tenía una extensión con lo que pasaba después en el quiosco, en la conversación cotidiana, pasar horas bajo los árboles. No fui muy del carrete, pero si del cafecito y el diálogo fraterno.  Estaba la tía del quiosco, el profe y el estudiante, hablando de igual a igual en ese espacio, debajo de aquel árbol o en torno a un café…era algo como muy igualitario. Fueron cinco años en que esos lugares formaron parte de mi vida estudiantil.
 
Si fueras periodista y tuvieras la oportunidad de titular esta nota indicando que representa para ti la Universidad de Santiago de Chile, ¿qué escribirías?
 
-Yo creo que es un lugar comprometido con la política y la sociedad. Esos dos componentes me marcaron de la Usach… sentí que estaba en un espacio que estaba comprometido con lo que pasaba realmente pasaba en Chile.
 
¿Cómo influyó la Usach en tu formación?
 
-Influyó muchísimo. Me dio la posibilidad de conocer realidades distintas que es lo que hoy hago desde este cargo. A los chicos hoy se les ofrece, por decir así, la posibilidad de abrir la mente a que no estemos tan segregados, a que no seamos islas; aunque provengamos de realidades distintas, que generemos espacios de conversación con un horizonte compartido. Creo que la Usach me ayudó a entender que hay un objetivo y que hay que sentarse a dialogar. Es lo que propongo en la Fundación. La Universidad marcó mi trayectoria laboral, que después tuvo otro giro importante al estudiar el Magister en Sociología.
 
¿Cuáles son las perspectivas que ves para aquellos jóvenes que hoy estudian Historia y que seguramente analizan ya sus perspectivas laborales futuras?
 
-Historia es una carrera que requiere seguir estudiando constantemente. Yo soy un caso particular. En Historia podías elegir distintas menciones, la mayoría se iba a pedagogía, yo me fui a la Licenciatura donde es más difícil el campo laboral, pero creo que la Usach te da más que contenidos… te abre una mirada para entender el mundo, que después que uno sale, es súper valorada.  El mundo está avanzando hacia quienes tienen habilidades blandas. Son mejores trabajadores. Son cosas que nadie te enseña con un pizarrón y un plumón…te lo entrega el día a día y la Usach tiene esa particularidad de hacerlo de manera cotidiana. Es una cátedra que quizás para mi duró seis años, cinco de la carrera y un año de adquirir estas otras habilidades. Hay que atreverse a poner la historia al servicio del presente.

“La Universidad de Santiago es un Plantel con sentido de país”

“La Universidad de Santiago es un Plantel con sentido de país”

 
Sigue siendo una de las voces más reconocidas de nuestro país.  Sergio Campos Ulloa, periodista, locutor, conductor de noticias, insigne entrevistador en el Canal del Senado y Premio Nacional de Periodismo 2011, ocupa un sitial destacado entre quienes pasaron por las aulas de la Escuela de Periodismo de nuestra Universidad de Santiago.
 
Campos se tituló de profesor normalista en 1967. Fue entonces cuando dio la Prueba de Aptitud Académica, quedando en publicidad de la Universidad Técnica del Estado y en Periodismo en la Universidad de Chile. Optó por matricularse en la ex UTE en horario vespertino. “Quería ser profesor de publicidad y o publicista… las dos profesiones eran una sola si es que tomaba los ramos de pedagogía, y eso me favorecía porque ya los había cursado en la Escuela Normal”, recuerda. 
 
Cursando el tercer año de esta carrera, otra de sus pasiones llamó a su puerta. Decidió ingresar a un curso profesional de locutores que duró dos años y por ese camino llegó a la Radio Corporación en 1969, donde estuvo hasta el 11 de septiembre de 1973. Tras el golpe militar se autoexilió en Argentina; trabajó para una agencia latinoamericana de información con sede en Canadá y a fines del año 77 volvió a nuestro país para encabezar el trasnoche de la Radio Chilena junto a Oscar Madrid, ex periodista del Diario Puro Chile. Tras dos meses en la radio de la Iglesia Católica, fue llamado a Radio Cooperativa, transformándose en la voz del Diario de Cooperativa, que conduce en su edición matinal, por más de 40 años.
 
La ex UTE y la Usach
 
Sergio Campos recuerda con mucho cariño su paso inicial por la Universidad Técnica del Estado y al ex Rector Enrique Kirberg, figura señera de la Educación Superior y a Ricardo Núñez, ex Secretario General, quien posteriormente fuera presidente del Partido Socialista. “La significación de la UTE para mi es que forma parte del movimiento cultural de 1842 y ahí se inscribe la formación de la Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez, que es donde yo estudié y luego la fundación de la Universidad de Chile”, recuerda el locutor y académico universitario. Añade que la UTE tenía el precedente de la Escuela de Artes y Oficios, “que fue un gran centro de formación, que se potenció en la época de la creación de la Corfo”, destaca.
 
¿Cuándo decide volver a estudiar a la Universidad de Santiago?
 
- Lo del periodismo surgió cuando se abre la posibilidad de regularizar estudios en la Universidad de Santiago y se exigía tener cuatro ramos cursados de una carrera afín; en este caso yo tenía los de publicidad. Además, era requisito contar a lo menos 10 años de experiencia. Yo tenía muchos más. Ingresé a esta modalidad de dos años y medio con lo que la Usach me permitió regularizar mi situación como periodista.
 
¿Cómo pudo compatibilizar la vida familiar, la presencia en los medios de comunicación y los estudios en la Usach?
 
- Fue complicado. Tenía clases de 18 a 22 horas y fue en un momento en que hacía los tres noticiarios de la Radio Cooperativa, el diario matinal, el de mediodía y el vespertino. Además, tuve que dejar un poco antes este último porque comencé a trabajar en la edición nocturna del noticiero de Megavision y después a conducirlo. Así que fue un periodo bastante álgido de mi vida con tantas responsabilidades.
 
Sergio Campos ha destinado en los últimos años su tiempo a otra pasión: la docencia.  Hizo clases en la Escuela de Periodismo de nuestra Universidad hasta el año 1998 y luego le ofrecieron un cargo y docencia en la Universidad de Chile, por lo que conoce y fue formador de muchos de los actuales periodistas que laboran en los medios de comunicación masivos y en sus plataformas digitales. “Eso es una satisfacción enorme para mi”, reconoce.
 
De sus tiempos de estudiante de periodismo en la Usach, ¿qué recuerdos tiene?
 
- Yo tuve clases de Teoría de la Comunicación con Erico Carrasco, un gran profesional, doctor de la Universidad de Lovaina, que fue fundador de nuestra Escuela de Periodismo y tuve compañeros como Carlos Caszely, Fernando Villagrán y Marcelo Contreras de la Revista APSI…en fin mucha gente que hizo periodismo durante largo tiempo y que no se habían titulado. Volver a la Universidad fue una rica experiencia ya que teníamos la parte profesional, pero nos faltaba la formación teórica… entonces fue un intercambio muy potente. Incluso uno de nuestros profesores fue Alejandro Guillier en su condición de periodista de la Universidad del Norte y Sociólogo. Recuerdo con aprecio también al profesor Enrique Fernández y a Jorge Uribe, que fue corresponsal de guerra y había entrevistado a Yasser Arafat y a Menájem Beguín, entre otros líderes mundiales.
 
¿Si tuviera que resumir en una frase, a modo de titular de un informativo qué es la Universidad de Santiago de Chile para usted, qué escribiría?
 
- La Universidad de Santiago es una Casa de Estudios con sentido de país. Es un Plantel con una diversidad de carreras muy importantes y completa porque aparte de la docencia en el pregrado, tiene docencia en el posgrado, tiene investigación muy relevante en todos los ámbitos, especialmente en Ingeniería, Medicina, en Humanidades. La Usach tiene sentido de país.
 
Hoy Sergio Campos llega cada madrugada a los nuevos estudios de Radio Cooperativa en calle Maipú 525, Barrio Yungay, desde donde cada mañana entre las 6 y las 9 horas, sigue siendo la voz de las noticias del Diario de Cooperativa. Asimismo, entrega su experiencia a las nuevas generaciones de periodistas desde la Universidad de Chile y conduce su programa de entrevistas para el Canal del Senado.
 

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