Investigación

Sin definir

Concluyen que las mujeres se ocupan en su mayoría del cuidado de la salud de la familia

Concluyen que las mujeres se ocupan en su mayoría del cuidado de la salud de la familia

“Health outcomes of unpaid care workers in low-income and middle-income countries: a protocol for a systematic review”, es el nombre del artículo de la Dra. Irene Magaña, de la Escuela de Psicología, que fue publicado por la prestigiosa revista BMJ Open, revista Q1, índice de impacto 2.369 (WOS).

El estudio, que realizó una revisión sistemática de estudios observacionales sobre los resultados de salud según el estatus de cuidador y el sexo de las personas que viven en países de ingresos bajos y medianos, tuvo como coautores a los tesistas del Doctorado en Psicología de nuestra Facultad, Pablo Martínez y María Soledad Loyola.

En palabras de la Dra. Irene Magaña, autora principal del estudio,  este trabajo se pudo realizar debido al apoyo institucional entregado a través de un proyecto Dicyt,  “A partir de esta investigación financiada por la Universidad de Santiago, hemos logrado posicionar  este artículo en un revista de importancia mundial que tiene un altísimo índice de impacto, en la que es muy difícil publicar, incluso para investigadores de largo recorrido y de proyectos internacionales, lo que significa que estamos poniendo en el discurso científico internacional un conocimiento producido exclusivamente en la Usach, con financiamiento propio y con nuestro equipo de investigación generado con mis tesistas del Doctorado en Psicología de la Facultad de Humanidades”.

La metodología de investigación utilizada en el estudio se enmarca en estudios de mediciones sistemáticas y esta publicación en particular se refiere a un protocolo propuesto por el equipo de investigadores, donde cuestiones como la transparencia  y la replicabilidad en la investigación científica hoy en día son importantes. “Estos protocolos de revisión sistemática,  buscan básicamente ser una explicación de la relevancia del por qué vamos a estudiar lo que vamos a estudiar y el cómo  lo vamos a estudiar, pero además, ayuda a la comunidad científica, específicamente a los investigadores de otras latitudes que están pensando en temas de investigación científica semejantes, el tener en cuenta que hay pares en Chile y particularmente en la Universidad de Santiago que están investigando las mismas temáticas”, nos comenta el coautor Pablo Martínez.

En este sentido, la investigadora María Soledad Loyola, nos habla desde su condición de tesista de un programa de Doctorado de la FAHU y de un equipo que comienza a instalarse en el concierto internacional de la investigación  “La importancia que tiene esta publicación es que las temáticas  que nosotros estamos investigando son relevantes a nivel mundial. Lamentablemente en Chile las materias de género y cuidado no son de mucha importancia para los grupos de investigación, de hecho hemos intentando con un proyecto Fondecyt que a pesar de estar muy bien evaluado no tuvo la oportunidad de ser adjudicado, entonces que internacionalmente se reconozca que el foco de investigación que nosotros tenemos es importante,  y eso para cualquier estudiante tesista será un gran logro”.

Este destacado equipo de investigadores no solo elaboró este protocolo, sino que también acaba de terminar un nuevo artículo “Prontamente lo enviaremos a una revista de características similares a ésta,  ISI Q1 y esperamos pueda ser publicado, ya que corresponde a la prosecución del protocolo y que aborda los resultados de la revisión sistemática” señaló la Dra. Irene Magaña.

Como proyección, el equipo espera que estudiantes tanto de pregrado como de postgrado puedan incorporarse a este grupo de investigación, para en el futuro y como un sueño mayor, se pueda crear un Centro de Estudios de Género y Salud dentro de la Universidad, así consolidar esta iniciativa nacida en el seno de la Facultad de Humanidades y en su Escuela de Psicología.

U. de Santiago desarrolla nueva línea de investigación asociada a Electrónica Molecular

U. de Santiago desarrolla nueva línea de investigación asociada a Electrónica Molecular

“Explotar, explorar y entender los nuevos fenómenos eléctricos que se presentan al estudiar el transporte electrónico a nivel de moléculas individuales” es como define la Doctora en Química Ingrid Ponce la línea de investigación que comenzó durante el desarrollo de su tesis de doctorado y que le ha permitido realizar estadías de investigación en la Universidad de Columbia (New York) en el laboratorio de la Dra. Latha Venkataraman y en la Universidad de Barcelona en el laboratorio del Dr. Ismael Diez Pérez para especializarse en el estudio de la Electrónica Molecular.

“Desde ese entonces quise desarrollar esta área de investigación en Chile. Sin embargo, hace cinco años atrás no existía ni el equipamiento necesario ni el capital humano avanzado experto para hacerlo”, comenta Ingrid sobre el camino que ha recorrido y lo que ha significado e implementar está nueva área calificada como un “nuevo y promisorio” campo de investigación.

Hoy, gracias a la obtención de los proyectos PAI-CONICYT, en el 2016, y el Fondecyt Regular Fondecyt Regular 1171408: “Bioinspired Molecular Electronics: Understanding and Exploiting the Structure-Function Relationships in Single Molecule Junctions”, en el 2017,  la Dra. Ingrid mantiene una colaboración con la Dra. Latha Venkataraman de la Universidad de Columbia en New York, quién es considerada una de los principales referentes en el área en el mundo.

“La idea es implementar las técnicas STM-Break Junction y Electroquímica- STM-Break Junction en Chile mediante la construcción de un equipo de Microscopia de Efecto Túnel acoplado a Electroquímica que estará instalado en la Facultad de Química y Biología  y en el que colaborará el grupo de la investigación de la Dra. Venkatarman de la Universidad de Columbia”, explica la investigadora quien está involucrada en la construcción de este nuevo microscopio con el fin de “solucionar los posibles problemas que se presenten, instruir a nuevos estudiantes, además de mejorar o modificar el equipo de acuerdo al experimento que necesitemos realizar”.

“Esto nos permitirá explorar las propiedades eléctricas a nanoescala de moléculas de nuestro interés”, agrega la Doctora sobre su uso.

Hacia una definición de la disciplina

En términos generales, la investigadora de la Universidad de Santiago define la Electrónica Molecular - o “Molecular electronics” como es ampliamente conocida esta discplina - como “la idea de utilizar moléculas como componentes activos de dispositivos electrónicos moleculares”.

En concreto, y en cuanto a sus aplicaciones, esta pareciera no tener restricciones. Gracias al desarrollo de técnicas espectroscópicas en las décadas de los 80’ y los 90’, éstas pueden abarcar desde la manipulación de moléculas individuales y sus modificaciones mediante la síntesis en laboratorio, hasta el desarrollo componentes electrónicos bioinspirados y biocompatibles.

“Por ejemplo, actualmente complejos similares al citocromo-C o la hemoglobina, tendrían propiedades eléctricas funcionales para ser utilizados en dispositivos de almacenamiento de memoria, nano-biosensores, nanodispositivos de almacenamiento y conversión de energía, etc.”, profundiza la investigadora, quien se encuentra estudiando una familia de moléculas redox que presentan un estado de encendido y apagado, entendido como “switching”, el que es altamente funcional para la fabricación de dispositivos de memorias.

Respecto a los plazos, la investigadora espera que mayo de este año sea la fecha en que el equipo esté completamente instalado y operativo.

Para ello, la Doctora Ponce contará con la ayuda de un investigador de postdoctorado proveniente de la Universidad de Columbia y el grupo de Electrónica Molecular que en este tiempo ha ido formando en la universidad.

Reformulan productos artesanales para reducir nutrientes críticos

Reformulan productos artesanales para reducir nutrientes críticos

Según los resultados de la Encuesta Nacional de Salud 2016-2017 del Ministerio de Salud, el sobrepeso y la obesidad afecta al 74,2% de la población chilena. Esta alarmante situación se ha agravado respecto de años anteriores y estaría incidiendo en el aumento de enfermedades crónicas tales como diabetes, cáncer y enfermedades cardiovasculares.

Ante tal evidencia, un grupo de investigadores de la U. de Santiago ha ideado un proyecto en tres etapas, que cuenta con el apoyo de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria dependiente del Ministerio de Agricultura, y que busca disminuir nutrientes críticos tales como sodio, azúcar y grasas saturadas de longanizas, cecinas, quesos y mermeladas, desarrolladas por productores de la Región del Libertador General Bernardo O'Higgins hasta la Región de  Los  Ríos que adscribieron a esta iniciativa.

El equipo dirigido por el Dr. José Luis Palacios Pino, director del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de los Alimentos (Cecta), está compuesto por el experto en alimentos Luis Sáez Tonacca, del Departamento de Gestión Agraria; Lina Yáñez Catalán, jefa del Laboratorio de Análisis Fisicoquímico del Cecta y Carlos Díaz Ramírez, investigador asociado de Cecta.

Sobre la investigación, el director del Cecta, Dr. José Luis Palacios,  explica que el desarrollo involucra “tomar productos y reformularlos, sin que pierdan la naturaleza de lo artesanal y el sabor típico que tiene cada uno de  ellos. Ese es el desafío tecnológico para nosotros como investigadores”.

Por su parte, el Ingeniero Agrónomo, académico del Departamento de Gestión Agraria y co investigador, Luis Sáez Tonacca, destaca el rol del Plantel en la ejecución del proyecto.

“La iniciativa permite habilitar a estos productores o darles soluciones para que eliminen los sellos negros en sus productos, poniendo a su disposición tecnología de punta. Además, pretende propiciar una mejor relación y asociatividad entre ellos”, puntualiza.

Innovación

Tras una primera etapa de diagnóstico en la que los especialistas revisaron el estado de la composición nutricional de distintos productos en función de los nutrientes críticos y el parámetro de calorías, relacionándolos con la nueva normativa de etiquetado de alimentos que puso en marcha el Ministerio de Salud, comenzaron a aplicar las fórmulas ideadas por  el equipo, obteniendo diversos prototipos que están siendo revisados por los productores.

Cabe destacar, finalmente, que este desarrollo científico busca impactar de manera positiva en comunidades rurales, pequeños productores artesanales y micro empresarios, así como establecer redes de colaboración y entregar herramientas para que desarrollen sus propias fórmulas de productos.

Investigadora crea soluciones con compuestos naturales para la industria del salmón

Investigadora crea soluciones con compuestos naturales para la industria del salmón

Desde 2008 que la Dra. Margarita Montoya Kunsting, académica del Departamento de Biología de la Facultad de Química y Biología, trabaja en la Universidad de Santiago de Chile. Con líneas de investigación ligadas al cáncer y la inmunología, además de estudios con extractos de plantas, finalmente derivó al trabajo con salmones.

“Existen muchos componentes dentro de las plantas que pueden tener efectos sinérgicos. Por ejemplo, efectos tranquilizantes, antioxidantes e inmunoestimulantes”, explica la investigadora, a propósito de las necesidades de la industria respecto de las negativas consecuencias del estrés fisiológico de los peces.

En 2012 comenzó a trabajar en el proyecto “Desarrollo de una formulación a base de extractos de plantas destinado al control del estrés y a mejorar la sobrevida de salmones durante el proceso de esmoltificación”. Este último, el momento en el que los peces pasan desde el agua dulce al mar.

Con financiamiento de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Ministerio de Agricultura, el proceso concluyó este año, con la creación de dos formulaciones. “Primero se planteó como un suplemento alimenticio, pero encontramos una fórmula que podría entregarse directamente en el agua y así controlar el estrés de los salmones”, detalla la académica.

Soluciones para la industria acuícola

Como investigadora del Centro de Biotecnología Acuícola (CBA) de nuestra Casa de Estudios, la Dra. Margarita Montoya también destaca la colaboración de Sophia Mejías Medina, bioquímica que actualmente cursa el magíster en Gestión Tecnológica en la Universidad de Santiago de Chile.

Juntas, han podido constatar el gran problema que representa el estrés de los salmones para la industria. “Se refleja en una baja de la inmunidad de los peces, por lo que aumentan las enfermedades, por ser más susceptibles a algún patógeno. Como consecuencia, se movilizan mucho más, por lo que no adquieren el peso suficiente, lo que implica más alimentación”, detalla la académica, añadiendo que peces muy estresados, que estén cerca de morir, son mucho más susceptibles a los patógenos.

En suma, compuestos que podrían aplicarse en situaciones altamente estresantes, como las vacunaciones, selecciones y transporte de peces, lo que afecta y disminuye su inmunidad, el crecimiento y otros parámetros productivos que finalmente perjudican a la industria.

Patentamiento nacional e internacional

Como parte del proceso de investigación, la Dra. Margarita Montoya aclara que para los dos compuestos la Universidad de Santiago de Chile ya solicitó el patentamiento a nivel nacional, lo mismo que para el extranjero. En este caso, agrupados bajo una misma solicitud.

Y si bien aún no se comercializa en el mercado, se muestra optimista respecto de los pasos a seguir. “Tenemos más de una forma para resolver muchos de los problemas de la industria salmonera, de bajo costo y con muy buenos resultados, al menos en lo que hemos trabajo a nivel de laboratorio”, aclara la académica.

En cuanto a la factibilidad de internacionalizar los productos, destaca sus múltiples ventajas, “en cuanto a que mejora el crecimiento, la inmunidad y las barreras antioxidantes, los mismos procesos estresantes que experimentan los peces en Chile y en otros países”.

Investigación de nuevas posibilidades

El siguiente paso es comprobar los resultados en terreno. “Una cosa es aplicar los compuestos en un estanque de 300 litros con 60 peces, a una pequeña escala, en comparación con las piscinas en las que trabajan las empresas”, aclara la investigadora. De hecho, según sus resultados, se alcanzaría al menos un 50% de protección frente a un brote de mortalidad.

En cuanto a los costos de los compuestos, advierte que se encuentran dentro de los valores competitivos para suplementos alimenticios. “Y cuando hablamos de aditivos para el agua, los costos bajan muchísimo”, agrega.

Actualmente, y a la espera de nuevo financiamiento, la Dra. Margarita Montoya se encuentra trabajando en nuevas posibilidades. “Siempre a partir de compuestos naturales, fitofármacos u otros que puedan ayudar no solo en el control del estrés de los salmones, sino también en el control de algunas enfermedades. Por ejemplo, mejorar las condiciones del sistema inmune de los peces”, proyecta con optimismo.

 

Lideran proyectos VIU de nuestra Universidad

Lideran proyectos VIU de nuestra Universidad

Cinco fueron los proyectos seleccionados de la Facultad Tecnológica para la primera etapa del Concurso de Valorización a la Investigación Universitaria (VIU) que realiza anualmente FONDEF a nivel nacional. En esta versión 2017, de las 61 iniciativas seleccionadas a nivel nacional, la Universidad de Santiago clasificó con ocho proyectos, de los cuales cinco corresponden a iniciativas llevadas a cabo por egresados de la Facultad Tecnológica, es decir, un 61,3% de los proyectos proviene de esta Unidad Mayor.

El concurso tiene por objetivo fomentar una cultura de emprendimiento innovador en la comunidad universitaria, por medio de la investigación que realicen estudiantes de pre y postgrado, en conjunto a sus profesores guías de tesis. De esta forma, el programa busca incentivar y promover una formación emprendedora en los futuros profesionales, que derive en un espíritu que valorice la ciencia y la tecnología, además de transformar sus investigaciones en productos u empresas que signifiquen un impacto económico-social y científico-tecnológico relevante para el país.

Proyectos seleccionados

Los cinco proyectos liderados por egresados de la Facultad Tecnológica fueron seleccionados para la primera etapa del concurso, la cual consiste en un financiamiento de dos millones de pesos destinados al pago de una consultora externa, que a lo largo de tres meses capacitará a los estudiantes en el desarrollo de un plan de trabajo y negocios con el objetivo de darle proyección a las iniciativas.

Tras la finalización de esta etapa, los participantes del concurso deberán defender su idea frente a evaluadores de FONDEF, quienes decidirán qué proyecto pasa a la segunda etapa, la cual consiste en la entrega de 24 millones de pesos destinados a la ejecución del plan de trabajo previamente realizado.

Estos cinco proyectos de la Facultad Tecnológica abarcan áreas de mejoras en sistemas fotovoltaicos, materiales biodegradables, reciclaje, optimización de la gestión del mantenimiento industrial, y desarrollo de nuevos embutidos vegetales saludables.

Como menciona Gustavo Alcántara, Tecnólogo en Telecomunicaciones y quien lidera el proyecto “Sistema Automatizado e Inteligente para la Mejora de la Captación Solar en Sistemas Fotovoltaicos”, la iniciativa pretende crear un seguidor solar que pueda ser utilizado con paneles solares, y que ofrece mayores ventajas económicas, además de hacer más eficiente los sistemas fotovoltaicos generando mayor electricidad.

El trabajo es llevado a cabo con la tutoría del académico Luis Rivera Méndez, jefe de carrera de Tecnología en Telecomunicaciones, y se propone impactar, a futuro, en mercados internacionales.

Por otra parte, Fernanda Ramírez, Tecnóloga en Diseño Industrial se encuentra trabajando en el proyecto “Desarrollo de nuevos materiales biodegradables a base de residuos agrícolas, para la elaboración de envases desechables”, el cual consiste en la elaboración de envases desechables de uso común, como bandejas, platos y vasos, entre otros, a través de residuos agrícolas.

Como destaca Fernanda fue su propia profesora de tesis, la académica del Departamento de Tecnologías de Gestión, María José Araya, quien la motivó a participar de este concurso. Motivación que incluso la llevó a participar y ganar del Concurso Despega Usach 2017 con esta misma idea.

Bárbara León, titulada de la carrera de Tecnología en Alimentos es otra de las seleccionadas de este concurso. Su proyecto “Embutido vegetal elaborado con materias primas endémicas que posee características sensoriales similares al de una longaniza, contiene ácidos esenciales Omega 3 y 6, y libre de colesterol” pretende postular una opción más saludable para el consumo de estos alimentos.

“Este es un alimento elaborado con materias primas endémicas, pero que además tiene el sabor característico de una longaniza, embutido que es ampliamente consumido por la población chilena. Este alimento permite que el consumidor no sólo pueda comer un producto sabroso, sino que además mejora su salud cardiovascular a largo plazo ya que contiene ácidos grasos Omega 3 y 6, y además es libre de colesterol”, comenta.

El proyecto que es apoyado por la académica y Vicedecana de Docencia, Marcela Zamorano, como su profesora guía, pretende lograr a futuro la creación de una gama más amplia de productos a base de materias primas similares que mejoren la calidad de vida de las personas al adicionar ingredientes con características nutricionales importantes, como la fibra, ácidos grasos omega 3 y 6, entre otros, pero manteniendo el sabor del alimento que se está emulando.

La cuarta ganadora de este concurso, Karina Urrea, Tecnóloga en Telecomunicaciones, lleva a cabo el proyecto “Sistema integrado de reciclaje inteligente para residuos de alta valorización”, que consiste en un contenedor de reciclaje inteligente, que interactúa con los dispositivos móviles de las personas a través de una aplicación del celular que provee puntos y beneficios directos.

“Por ejemplo cada vez que uno vaya a reciclar latas o botellas, el contenedor las va a ir contando y los puntos van a ir siendo acumulados en la aplicación. Estos después pueden ser canjeados en distintas cosas”, comenta.

La iniciativa que es supervisada por Roberto Peña como profesor guía, busca generar un cambio de mentalidad impulsando el reciclaje, no sólo en el entorno universitario directo, sino también fuera de la Universidad, como en edificios residenciales u otros establecimientos.

Christopher Gutiérrez, Tecnólogo en Mantenimiento Industrial, es el quinto ganador de la iniciativa, con su proyecto “MantChile: Empresa de gestión del mantenimiento industrial con enfoque tecnológico e informático para pequeñas y medianas empresas”, que consiste en un software de gestión y administración del mantenimiento industrial: “A este software pretendo incorporarle herramientas de mantenimiento predictivo para saber en tiempo real el estado de los activos”, comenta.

Como señala Christopher, el proyecto que es supervisado por el académico del Departamento de Tecnologías Industriales, Hernán Núñez, “surge al combinar diferentes disciplinas en pos del fortalecimiento de la filosofía de la industria actual, gracias a los conocimientos adquiridos por mis estudios y también de forma autodidacta”, menciona.

Importancia de la investigación universitaria

Respecto al valor que tienen iniciativas como el Concurso de Valorización a la Investigación Universitaria (VIU) a nivel nacional, o instancias como el Despega Usach o Lions Up dentro de la misma Universidad de Santiago, los cinco seleccionados concuerdan en la importancia que tiene para la comunidad universitaria el contar con el apoyo y financiamiento que permita llevar a cabo potenciales emprendimientos.

“Existen estudiantes con grandes ideas pero que no siempre pueden llevarse a cabo por falta de fondos públicos o privados que permitan realizar ensayos, compra de materiales, uso de instalaciones, etc. Por lo mismo, otorgar este tipo de fondos sirve para realizar estos proyectos y que no queden sólo como una idea dentro de la Universidad”, comenta Bárbara León.

Por su parte, Karina Urrea destaca las iniciativas que lleva a cabo la Universidad, además de motivar a los estudiantes a atreverse a participar de estos concursos: “Creo que todos esos programas, como Despega Usach, están a la altura de los estudiantes. Las oportunidades están, es cosa que el estudiante quiera interactuar con otros alumnos o profesores y eso puede crear una oportunidad”, señala.

Finalmente, Gustavo Alcántara destaca el paso por la Universidad como un proceso clave en el desarrollo profesional de los estudiantes, en el cual la investigación, la innovación y el emprendimiento forman parte clave para éste en su futuro.

“Los lineamientos internacionales indican que la tecnología e ingeniería debe ser aplicada desde que el conocimiento se adquiere, con lo cual la universidad es la instancia más idónea para desarrollarte como un profesional con perfil investigativo que colabora al desarrollo del país”, enfatiza.

Investigan efectos de algas marinas para remover hidrocarburos del mar

Investigan efectos de algas marinas para remover hidrocarburos del mar

Una ocurrencia persistente de derrames de petróleo en las costas centrales de Chile, ha provocado un aumento considerable de los hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs), compuestos mutagénicos y cancerígenos que perjudican la salud de quienes habitan en las localidades cercanas.

Es por ello, que interesado en utilizar algas marinas para probar su efecto de biorremediación en las costas nacionales, el Dr. en Biotecnología de nuestra Casa de Estudios, Alberto González Figueroa (32), apoyado por el equipo del Laboratorio de Biotecnología Marina, postuló al Concurso Nacional Inserción de Capital Humano Avanzado en la Academia, adjudicándose la convocatoria 2017 de CONICYT.

Dicha postulación le permitirá desarrollar esta nueva línea de investigación bajo el proyecto “Acumulación y degradación de hidrocarburos aromáticos policíclicos en algas marinas”, que permitirá a su vez contribuir en la formación de estudiantes jóvenes, la aplicación del conocimiento y la difusión a la sociedad, llevando el sello de la U. de Santiago.

Respecto a la contribución, el Biotecnólogo comenta que de entregar resultados positivos, el desarrollo del proyecto podría, “mejorar la salud humana, y la economía de las poblaciones costeras”.

Esto se explica debido a que, “al ir removiendo compuestos tóxicos de estas zonas se propicia un mayor desarrollo humano; la utilización de los ambientes tanto para recreación, economía en el sector pesquero, recolección de algas comestibles, entre otros, que va a mejorar a su vez la proliferación de especies que antes habían sido depredadas en esa zona, proyectando una recuperación de las zonas costeras dañadas”, puntualiza.


Interés en las algas marinas

Desde su infancia, durante vacaciones familiares en la zona central, el Dr. Alberto González observaba como pequeños recolectores artesanales reunían distintos tipos de algas marinas.

Al informarse respecto a su destino, descubrió que mayoritariamente se exportaban a la industria farmacéutica y cosmética, destinándose sólo una pequeña cantidad a la elaboración de comestibles y aditivos para alimentos nacionales.

Fue así, como decidió estudiar Bioquímica en la U. de Santiago, continuar con el doctorado en Biotecnología, y un post doctorado, todos en nuestra Casa de Estudios, en donde comenzó a desarrollar distintas investigaciones relacionadas al uso del alga marina.

En su último programa, estudió los mecanismos de señalización intracelular y la activación de genes de defensa en el macroalga marina parda Ectocarpus siliculosus expuesta a exceso de cobre, que lo derivó al proyecto que busca desarrollar actualmente.

“Ahora me quiero dedicar a hacer algo más biotecnológico, tratar de utilizar algas para biorremediar las costas nacionales que están afectadas por derrames de petróleo, como la zona de Quintero, que tiene las refinerías, zonas metalúrgicas, entonces está súper contaminado”, explica.

Un proyecto esperanzador

Tras probar distintas especies de algas marinas, propias de la costa central de Chile y exponerlas a distintas dosis de hidrocarburos aromáticos policícliclos (PAHs) presentes en el petróleo y en la combustión incompleta de materia orgánica, el Dr. González escogió la macroalga verde Ulva Lactuca para desarrollar su investigación, debido a su distribución geográfica presente en distintas regiones y su gran tamaño.

En una primera etapa, la iniciativa se centrará en investigar los mecanismos de acumulación y degradación de hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs) en la macroalga, para evaluar sus respuestas de sobrevivencia, y analizar la existencia de indicios de metabolización, para ver si logra absorber los PAHs y transformarlos en elementos inocuos, como fuente de alimento.

Posteriormente, evaluará qué enzimas y proteínas participan en la degradación de los hidrocarburos, y buscará los genes que se encienden o apagan, para responder a la metabolización de estos hidrocarburos.
De manera esperanzadora, el científico explica que a largo plazo y de resultar efectivo, se podría desarrollar un sistema para remover los PAHs de las costas afectadas.

Inserción a la academia

Desde hace un tiempo, el Dr. González ha realizado clases relacionadas con metabolismo vegetal, botánica, clasificación, biología de las plantas, metabolismo de las plantas, entre otros.

Hoy, con su fuerte en la biorremediación, podrá hacer clases en distintas carreras de la Facultad de Química y Biología.

Sobre la adjudicación del concurso, señala que, “algunos lo ven como un premio, yo lo veo más como un logro del equipo de trabajo. El tipo de trabajo que tenemos en este laboratorio es bien colaborativo, todos estamos pendientes de lo que hace cada uno”.

A futuro espera iniciar proyectos en zonas costeras, traspasando el conocimiento obtenido en laboratorios de la U. de Santiago a la comunidad y aplicándolo en terreno.

Respecto a su Alma Mater, el científico formado en la U. de Santiago, destaca las oportunidades que entrega para poder desempeñarse de manera integral.

“La U. de Santiago tiene una gran cualidad: que es una sola sede con todos los elementos para desarrollarse aquí mismo, no hay necesidad de viajar a otros lugares para hacer grandes proyectos. Afortunadamente han estado todos los recursos, el equipamiento económico, infraestructura, colaboradores científicos, lo que es muy favorable en la formación”, concluye.

Egresados presentan nuevo catálogo de levaduras saborizantes

Egresados presentan nuevo catálogo de levaduras saborizantes

Lelikelen, del mapudungún “abrir los ojos”, fue la primera innovación desarrollada por un equipo de profesionales de nuestra Casa de Estudios agrupados en Kayta, que los llevó al éxito el año 2015, otorgando un sabor a plátano y clavo de olor a las cervezas nacionales gracias a una levadura nativa extraída de Cauquenes, séptima región.


Hoy, con una producción robusta y experimentada en el mercado, el equipo presenta siete nuevos tipos de levaduras, obtenidas a partir de micoorganismos nativos seleccionados desde hojas, frutas, maderas y hongos, entre otros elementos, provenientes de la III a la VIII Región, para lo cual comenzarán a promover un nuevo catálogo a través de su página web.


Respecto al desarrollo tecnológico, Kayta mantiene un contrato con el Plantel para realizar las pruebas, en donde la académica del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos, Dra. María Angélica Ganga, recupera y selecciona las levaduras.


Felipe Castro co-fundador de la iniciativa y egresado de Ingeniería en Biotecnología por nuestra Casa de Estudios, agradece la formación inculcada para fortalecer los saberes del equipo, “la U. de Santiago me inculcó independencia, creatividad, a no quedarme solamente con lo que me entregó e ir más allá, y pensar lógicamente en los resultados que estoy obteniendo”, puntualiza.


Las nuevas variedades


Con un trabajo colaborativo de parte del equipo, y la búsqueda incansable de muestras para descubrir perfiles aromáticos nativos a lo largo de Chile, los investigadores descubrieron siete nuevos tipos de levadura, que agregan a un mosto estándar (jugo de cebada), para que se mezclen y generen un tipo de huella digital única.


Fue así como obtuvieron un sabor a manzanas rojas, proveniente de microorganismos de la III región; aroma a granja, proveniente de la zona central; un perfil neutro que pronuncia otros sabores evidenciando una alta cantidad de lúpulos, como IPA, de la VII región, lugar de donde también obtuvieron su primogénita, que libera olor a plátanos y clavo de olor.


También descubrieron un perfil más vinoso que pronuncia los amargores del mismo lúpulo, obtenido en la  VIII región.


Asimismo, crearon otras dos levaduras obtenidas a partir de hongos y no utilizadas comúnmente en la industria cervecera.


La primera, es un contaminante de vinos, utilizado en países como Bélgica para otorgar perfiles aromáticos con notas a dulzor o frutas ácidas, como la piña.


Mientras que la segunda es una levadura acompañante que otorga un perfil más aromático similar a frutos cítricos, pomelo, toronja o naranja.


El tiempo de fermentación de las primeras es de 7 días, en tanto las dos últimas tienen un promedio de 21 días.


Otros proyectos


Debido al prestigio que ha cobrado su saborizante Lelikelen y otras pruebas exitosas, los emprendedores comentan que volvieron a producir saborizantes para la industria vinícola, por lo que probarán nuevas levaduras en 150 mil litros de vino.


Otra de sus novedades tiene relación con el desarrollo de un proyecto que permitirá mejorar las cepas que poseen, respecto a aumentar la maltosa, para lo cual se adjudicaron un proyecto Corfo de 44 millones de pesos.


Además, gracias al interés de productores de pan y la adquisición de un Voucher de Innovación Corfo de 7 millones de pesos, Kayta comenzará a desarrollar en febrero una levadura que buscará bajar el contenido de gluten, debido a la tendencia mundial del aumento de las alergias, y realizarán el cultivo mixto de lactobacilos.


El equipo, considerado el primero a nivel nacional en innovar en el área, espera otorgar una impronta distinta a la que entrega el mercado en cervezas y vinos, y potenciar el concepto de identidad chilena en la industria.


Al respecto, Felipe Castro remarca: “Hoy las empresas no se pueden quedar solamente con lo que tienen, deben innovar con otras cosas que se las podemos dar a través de estos productos, y en base a eso la industria nacional puede crecer infinitamente, ya que cada región otorga un sello e identidad geográfica única a través de los sabores y aromas que se producen a raíz de nuestros productos”, concluye.

Científicos logran describir cómo se adapta la ventilación pulmonar a las demandas fisiológicas

Científicos logran describir cómo se adapta la ventilación pulmonar a las demandas fisiológicas

“La publicación de nuestra paper “D-serine released by astrocytes in brainstem regulates breathing response to CO2 levels" es un alegría ya que ha sido producto de mucho trabajo y dedicación en que todos los involucrados aportaron un gran esfuerzo” contesta el investigador de la Facultad de Química y Biología, Dr. Jaime Eugenín respecto a la publicación que, tras siete años de investigación, fue publicada en octubre recién pasado en la prestigiosa revista científica Nature Comunnications.

La investigación, construida sobre los resultados de dos tesis de alumnos del Doctorado en Neurociencia: el Dr. Sebastián Beltrán, el primer egresado del doctorado, y la actualmente candidata a Doctor y quien se encuentra desarrollando su tesis doctoral, la estudiante María José Olivares,  corresponde a una investigación realizada totalmente en Chile que se suma a los recientes logros de los académicos de la Facultad de Química y Biología Rodrigo Vidal, Claudio Vásquez y el egresado de la Carrera de Bioquímica Maximiliano Amenábar, quienes también han sido publicados en Nature.

“Esta publicación avala el alto nivel de investigación que se está alcanzando en nuestra Facultad y es un buen índice del nivel de investigación que se está desarrollando al interior del Doctorado de Neurociencia de la Universidad de Santiago, representativo de la calidad del grupo de investigadores que conforma su comunidad”, comentó el Dr. Eugenín, director también del Doctorado en Neurociencia de la Universidad de Santiago.

El trabajo, realizado por el grupo de investigación perteneciente al Laboratorio de Sistemas Neurales, trata sobre los mecanismos de eliminación del CO2 a través del sistema respiratorio. La investigación específicamente describe la función de los astrocitos del troncoencéfalo y su responsabilidad en detectar los niveles altos de CO2, liberar transmisores y activar las neuronas encargadas de generar el ritmo respiratorio y, por tanto, adaptar la ventilación pulmonar a las demandas fisiológicas.

“Hay varias patologías como el Síndrome de Rett, el Síndrome de Hipoventilación Congénita en Humanos y el Síndrome de Muerte Súbita del lactante, en las cuales la respuesta ventilatoria a la acumulación de CO2 está disminuida. Por lo tanto, conocer el mecanismo subyacente permitirá mejores estrategias terapeúticas en estas condiciones”, indicó el investigador respecto al trabajo en el que también colaboran los miembros de la Facultad de Química y Biología, los doctores Rodrigo Contreras y Gustavo Zúñiga del Laboratorio de Fisiología Vegetal y la Dra. Rommy von Bernhardi del Laboratorio de Neurociencia de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Respecto a las repercusiones que tendrá para el progreso de su línea de investigación la publicación en Nature, el Dr. Jaime Eugenín comenta que, en la actualidad, “como grupo estamos en un momento de mucho dinamismo y de muy buena interacción”.

“Una de las bellezas de la actividad científica es que cada hallazgo abre la puerta a nuevas interrogantes y la búsqueda de nuevos hallazgos. Esta publicación facilitará la difusión de nuestro trabajo pues representa una plataforma altamente visible a nivel internacional”, afirmó.

Investigador se adjudica Fondecyt para estudiar la estatura como indicador de desarrollo

Investigador se adjudica Fondecyt para estudiar la estatura como indicador de desarrollo

El Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, Fondecyt, tiene por objetivo estimular y promover el desarrollo de investigación científica y tecnológica básica, y es el principal fondo de este tipo en el país.

Creado en 1981, ha financiado más de 16 mil proyectos de investigación cuyos impactos han beneficiado tanto a la comunidad científica como a la sociedad en general.

Este 2018, el Jefe de Carrera de Ingeniería Comercial con mención en Economía, Dr. Manuel Llorca, se adjudicó el  Fondecyt Regular número 1180005, por tres años,  con un monto asignado de alrededor de cien millones de pesos. Llorca es el investigador principal y sus coinvestigadores son Juan Navarrete y Roberto Araya.

El proyecto, titulado "Historia Antropométrica de Chile, siglos XVII-XX", es el primer estudio de esta naturaleza en Chile, a pesar de lo popular de la disciplina en otros países. “Este es un trabajo que busca mejorar los indicadores disponibles de desarrollo económico en el largo plazo. Nuestro equipo ya ha aportado otros indicadores como salarios reales de la población, distribución de la tierra y del ingreso agrícola en Chile, pero ninguno de ellos cubriendo un período tan largo como este. Esto se enmarca en una tendencia mundial, donde la estatura de la población se ha usado de manera creciente como indicador de desarrollo y niveles de vida”, comenta Llorca.

Existen muchos indicadores de desarrollo económico y  niveles de vida de la población. Uno de ellos es la estatura promedio de la población. En la actualidad está establecido que la estatura promedio de la población, es resultado directo de la dieta, la salud y la educación de la misma, así como el medioambiente en que vive.

Se ha demostrado, además, que existe una correlación positiva entre estatura y esperanza de vida. Finalmente, la estatura promedio según estratos socioeconómicos también se ha utilizado para medir desigualdad. “A pesar de su importancia, no existen estudios de largo plazo para Chile, en adultos. El principal objetivo de este proyecto es proporcionar las primeras series de estatura promedio de la población adulta de Chile desde 1730 al 2000. También explicaremos cómo y por qué ha variado la misma”, puntualiza el investigador principal.

Investigación a través del CIHEAP

El Centro Internacional de Investigación de Historia Económica, Empresarial y de la Administración Pública (CIHEAP) es un centro adscrito a la FAE USACH, fue  creado en mayo del 2014 con el propósito principal de promover la investigación y enseñanza de la historia económica, de la historia empresarial (tanto pública como privada) y de la historia de la administración pública, en Chile y América Latina.

Los objetivos del centro son investigar temas relacionados con historia económica, empresarial, agraria y de la Administración Pública de Chile y América Latina; desarrollar asesoría técnica a organizaciones públicas y privadas en el desarrollo de proyectos de rescate de su memoria institucional; promover la colaboración entre los departamentos de la FAE en el desarrollo de proyectos de carácter histórico; potenciar las publicaciones de la Facultad de Administración y Economía; instalar en circuitos académicos nacionales e internacionales, vía publicaciones y participación en congresos, debates sobre la historia económica, empresarial y organizacional de Chile; entre otras.

Desde que se creó CIHEAP, los académicos asociados al centro, Diego Barría, Claudio Robles y Manuel Llorca, han  ganado en los últimos cuatro años, cuatro proyectos Fondecyt y dos Redes de Conicyt, por más de 400 millones de pesos, lo que lo posiciona como un centro de excelencia a nivel latinoamericano.

Investigan nuevas técnicas de control para mejorar el uso de sistemas industriales

Investigan nuevas técnicas de control para mejorar el uso de sistemas industriales

Este proyecto de dos años de duración que comenzó a inicios de 2017, financiado por la Dirección de Investigación Científica y Tecnológica (DICYT) de la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Innovación de la Universidad de Santiago, pretende investigar nuevas técnicas en el área del Control Adaptable, permitiendo el control de un aparato o maquinaria, incluso sin conocer los parámetros específicos de éste.

El control automático de procesos pretende que los sistemas físicos se comporten de la manera en que el usuario desee. De esta forma, en el caso de un ascensor “el ascensor siempre quiere caer, por la gravedad, no hay forma que suba por sí mismo. Entonces se debe generar una estrategia para que suba, y eso se hace a través de un mecanismo que permita forzar que el sistema se comporte como tú quieres”, menciona el investigador.

En tanto que el Control Adaptable, como señala el académico, trata de evitar conocer los valores de los parámetros característicos del sistema, y que éste se comporte de la forma deseada: “Un ejemplo de esto son las cámaras fotográficas. Antiguamente uno tomaba la cámara y había que ajustar la distancia, la iluminación, etc. Hoy en día sólo aprietas el obturador y la cámara se adapta, lee la luz, ve la distancia, el foco y toma la foto, todo después de autorregularse. Eso es sistema adaptable”, comenta.

El proyecto que busca combinar las técnicas de aproximación de funciones mediante polinomios de Taylor y de control basado en pasividad (que torna pasivo a un sistema para facilitar luego el control mediante una simple ganancia) ya fue llevado a la práctica con resultados exitosos.

El nuevo controlador se aplicó al control del nivel de agua de un estanque cónico, muy empleado en la industria por su forma que facilita el drenaje aunque complejiza el control, considerando que sólo se tenía acceso a su entrada (velocidad deseada del variador de velocidad de la bomba) y a su salida (altura de la columna de agua medida mediante un sensor de nivel). Como resultado la nueva técnica preservó la estabilidad de todo el sistema.

“Lo aplicamos a una planta de nivel de estanque cónico, que nos facilitó la Universidad de Chile a través de una alianza que establecimos con ellos y lo comparamos con otras técnicas de control tradicionales. De esta comparación nos percatamos que esta nueva técnica que empleamos funcionó asegurando los mismos resultados que las técnicas tradicionales”, enfatizó.

El diseño y los resultados experimentales luego de la aplicación de la técnica y su comparación con los de un controlador industrial, se publicaron en:

-J.C. Travieso-Torres, M. A. Duarte-Mermoud, O. Beytía (2017), “Taylor Polynomial Approximation and Adaptive Passivity based Control Applied to the Level Regulation of a Conical Tank”. Asian Journal of Control. Vol 19(5) pp: 1722-1730, 10.1002/asjc.1496.

Cabe destacar también que durante este primer semestre se desarrolló un exhaustivo estudio comparativo, en cuanto al diseño y resultados experimentales, con otras técnicas de control publicado en:

-Juan Carlos Travieso-Torres; Manuel A. Duarte-Mermoud; Antonio Gutiérrez-Osorio; Orlando Beytía (En Prensa), “Passivity Based Control of a Class of Nonlinear Systems and its Application to the Level Regulation of a Conical Tank”. RIAI.

Los resultados muestran que el nuevo controlador asegura buenos resultados siendo el más simple de diseñar aunque es más lento. Respecto a esto último, se espera mejorar este factor durante el segundo año del proyecto junto con ampliar y probar los resultados para sistemas vectoriales, temas en los que ya se trabaja en conjunto a los estudiantes Francisco Hernández y Mauricio Espinoza, y el Dr. Matías Díaz, del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Universidad.

Páginas

Suscribirse a RSS - Investigación