- En la mesa redonda “Cómo narrar el fin de la dictadura y las crisis sociales. Comparación Argentina y Chile”, Elsa Drucaroff declaró que en el proceso de la memoria el olvido es importante, pero eso no significa un “aquí no ha pasado nada”.
El encuentro, realizado el lunes (29), fue moderado por la académica del Departamento de Lingüística y Literatura de nuestra Universidad, Andrea Jeftanovic, y participaron el director de dicho Departamento, académico Luis Hachim; el coordinador del Área Educación Villa Grimaldi, Luis Alegría; y el escritor argentino, Edgar Scott.
[“Mi problema con lo que ocurre alrededor de los espacios de la memoria es que buscan producir piedad y horror”, señaló la ensayista y escritora argentina, Elsa Drucaroff, quien describió y contextualizó el proceso que llevó a La Escuela de Mecánica la Arma (ESMA) del país trasandino, a convertirse en el centro de tortura más grande de Latinoamérica y que, posteriormente, con la llegada del kirchnerismo, se transformara en un centro para la memoria.
En el proceso de la memoria el olvido es importante pero “olvidar no es aquí no ha pasado nada, es sacárselo de adentro”, subrayó la autora del libro de “Los prisioneros de la torre. Política, jóvenes y literatura”.
Por su parte, el coordinador del Área Educación Villa Grimaldi, Luis Alegría, profundizó en el proceso que también experimentó ese lugar de memoria, que de ser un campo de exterminio durante la dictadura de Pinochet pasó a convertirse en un lugar donde la memoria se construye.
“Villa Grimaldi ha vivido un proceso. Al igual que en el contexto argentino, las organizaciones de DD.HH. chilenas comienzan a recuperar espacios de la memoria y visibilizar estos centros clandestinos de detención”, señaló el historiador Luis Alegría.
Además, Alegría destacó el aporte de otros actores sociales en el proceso de creación del Parque por la Paz, que hoy se ubica en el ex centro de tortura. “Muchos sobrevivientes nos dijeron que este parque aportaba en la preservación de la memoria, pero nos comentaron que aunque el lugar era hermoso, opacaba el horror que ahí sucedió. Entonces, se decidió realizar una reconstrucción de las celdas y también de la emblemática torre de Villa Grimaldi, que fue utilizada por los militares como un lugar de aislamiento de quienes hoy se encuentran desaparecidos”.
Narrar la memoria
El escritor argentino Edgardo Scott señaló que los “espacios físicos tienden a cristalizar la memoria, como lo que a mí me ocurre cuando veo un partido de fútbol que se realiza en el Estadio Nacional y cómo en mi cabeza se cristaliza esa idea de que ese fue un gran campo de concentración durante la primera época de la dictadura chilena”.
Para finalizar, y en otra arista en torno al concepto de la memoria, el Dr. Luis Hachim, director del Departamento de Lingüística y Literatura, señala que “pareciera que en Chile existen enclaves que quieren administrar ciertos temas y el de la memoria pasaría por una administración y existirían ciertas personas que pueden hablar de memoria y otras no”.
La mesa redonda “Cómo narrar el fin de la dictadura y las crisis sociales. Comparación Argentina y Chile”, fue organizada por el Área de Extensión de la Facultad de Humanidades y el Departamento de Lingüística y Literatura de nuestra Universidad.