Bloque 3

Opinión de los académicos Pedro Palominos y Juan Barrientos: La intimidad perdida

Opinión de los académicos Pedro Palominos y Juan Barrientos: La intimidad perdida

Para nuestras generaciones, una pandemia era vista como antiguos recuerdos que la historia almacenaba y mostraba en imágenes en blanco y negro. Las tumbas, los cuerpos famélicos, la saturación de hospitales y las caras de angustia ante una pandemia eran imágenes del siglo XX ante la fiebre española en 1918. Con la ilusa creencia que situaciones así no podrían repetirse en el mundo “moderno”, vimos (y vemos) pasar los horrores del Sida, la gripe aviar, el ébola y el reciente virus H1N1. Pero nada nos había preparado para enfrentar la situación que hoy vive el planeta, con millones de personas enclaustradas en sus hogares y con la amenaza cierta de contagiarse. Consideremos que hay sectores  sociales y segmentos etarios en donde las probabilidades de perder la vida en el contagio es alta.  Este virus que tímidamente se presentó en una lejana ciudad oriental hace solo 6 meses y que no era más que una curiosa nota del noticiario, hoy tiene a toda la especie humana en busca de una solución.

A mediados de junio 2020 en Chile hubo más de 8 millones de personas en cuarentena, siendo la totalidad de las comunas del Gran Santiago sometidas a este régimen de enclaustramiento social. Con una totalidad de 167 mil contagiados en solo 100 días y más de 3 mil personas fallecidas la emergencia no ha sido fácil para este país. En medio de esta catástrofe nacional, se produjo el cambio de Ministro de Salud como una manera de dar nuevos aires a esta lucha que por el momento se pierde, pues la llamada “batalla de Santiago” no logra frenar el avance sistemático de contagios y víctimas fatales.

Respecto a las consecuencias, sin duda la primera es la enorme cantidad de fallecidos. Las notas de prensa que describieron la saturación de hospitales, escasez de tumbas, servicios funerarios colapsados solo agregan más detalles a esta pesadilla casi irreal que se vive. Luego tenemos el frenazo económico que implica la propagación del virus, cerrando mercados, frenando la producción y el consumo, generando la quiebra de miles de empresas. Todo esto repercute en un creciente desempleo.

¿Pero que pasa con la pérdida de la intimidad?

Tan importante como añejo, es el derecho a la privacidad. Tenemos derecho a vivir sin dejar rastro de nuestras acciones, preferencias y opiniones, pero esa quimera hoy es un lujo. Las miles de huellas que dejamos en nuestras interacciones con los teléfonos inteligentes, tablet y computadoras, van configurando un perfil que es valorado por las empresas de mercadeo y que, por ende, es comercializado. Ahora bien, cuando estas huellas las vamos dejando como producto de la expresión de nuestros intereses (por ejemplo en el uso de las redes sociales) de alguna manera (adecuadamente informada o no) autorizamos a quienes administran las redes, a usar y eventualmente vender la información de nuestros perfiles. Pero ¿qué ocurre cuando esta información pasa a ser propiedad de los organismos gubernamentales?

La desobediencia social que se ha podido ver en tiempos de pandemia, cuando las autoridades han insistido en la necesidad del aislamiento social y la urgencia de quedarse en la casa, nos deja postales tan preocupantes como absurdas de cientos de personas paseando por los centros comerciales, viajando hacia sus segundas viviendas, atiborrando los supermercados o incluso haciendo fiestas clandestinas.

Esta irresponsable conducta ciudadana nos pone frente al cuestionamiento de si es posible suspender algunos derechos con la finalidad de velar por el bien común. Este argumento permite decretar estados de emergencia que posibilitan que nuestro país ya entere dos o tres meses con un régimen de toque de queda nocturno. Pero, a pesar del uso de estas herramientas legales, persiste la transgresión de las medidas y en ese escenario el uso de la tecnología parece sensato cuando el objetivo final es el bien común.

En este escenario nos precipitamos hacia una sociedad digital forzada por lo eventos y las tecnologias disponibles, dejando de lado los conceptos de privacidad, intimidad y libertad. Las tecnologías de la información están disponibles, y hemos podido ver cómo, con no poca polémica, se han implementado en Europa aplicaciones que tienen como finalidad saber de manera exacta los movimientos de cada persona a través de la ciudad y con esa información establecer quién, cómo y cuándo podría estar alguien infectado con el Coronavirus.

La generosa plataforma que nos brindan los Smartphones, y por sobre todo su tan extensivo y abrumador uso permiten que cientos de millones de datos circulen segundo a segundo por todo el mundo, abriendo el apetito de quienes pueden obtener beneficios de esa información.

El primer paso lo dio el gobierno chino que mediante el uso de códigos QR identifica a los ciudadanos permitiendo saber quiénes están contagiados, con quienes se han reunido y por donde han transitado (por cuáles calles, qué estaciones de metro, qué centros comerciales han visitado etc.). Mediante esta información, entrega indicaciones a quienes deben guardar cuarentena de manera inmediata por haber estado cerca de una persona con COVID.

Esta medida impulsada por China, se ha considerado una herramienta poderosa para lograr controlar la pandemia en la ciudad de Wuhan. En Europa el gobierno Italiano implementó Inmuni, una aplicación que a través del uso del Bluetooth permite saber con quienes estuvo una persona. Cuando alguien es declarado con COVID envía mensajes a todos quienes estuvieron en contacto con esa persona para generar los aislamientos forzados.

En Francia la aplicación StopCovid es de una lógica similar, con la diferencia que los teléfonos intercambian mensajes encriptados luego de estar 15 minutos a menos de un metro de distancia. Por su parte, en Alemania se utiliza la aplicación llamada Corona – Warm – App desarrollada por Google y Apple. En Chile, existe CoronApp que tiene una función básicamente informativa frente a la emergencia sanitaria.

A pesar de los razonables y urgentes fines que persiguen estas aplicaciones (frenar los contagios), las alertas no han parado de sonar a propósito de lo invasivo de las aplicaciones en relación a la vida privada, y por sobre todo en qué uso se le dará a esta información una vez superada la emergencia.

Parecemos estar en la novela 1984 de George Orwell, sabiendo que “EL GRAN HERMANO TE VIGILA”, con sus tres consignas de partido; “la guerra es la paz”; “La libertad es la esclavitud”y “La ignorancia es la fuerza”. Los gobiernos se han apurado en aclarar que la información es anónima y que solo es usada con fines sanitarios. ¿Podrían estas aplicaciones ser una fuente con la cual los gobiernos logren tener información de sus opositores políticos? ¿En qué lugares del planeta algunos especialistas en inteligencia nacional podrán estar observando los movimientos de cada uno de nosotros con fines sanitarios, pero por qué no también con fines electorales, comerciales y de persecución?

El Gobierno Chino ya ha anunciado que sus Apps seguirán siendo utilizadas cuando sea superada esta contingencia sanitaria, y medidas similares se observan en India y Rusia.

La Constitución Política de la República de Chile asegura a todas las personas “el respeto y protección a la vida privada y a la honra de la persona y su familia, y asimismo, la protección de sus datos personales”. Existe además la ley de proteccion de datos personales aun en tramitacion en el Senado. Hay esperanzas que estos principios puedan orientar la gestión de las ciudades inteligentes, para no convertirnos en esclavos  de nuestras propias creaciones y de las personas que estan detras es éstas.

Hoy somos capaces de sacrificar muchas de nuestras libertades individuales con la finalidad de enfrentar esta emergencia. El incumplimiento de las medidas, fundamenta la necesidad de sacrificar derechos en pos de preservar la vida, pero la crisis pasará, entonces tal vez tendremos que dirigir nuestros esfuerzos en recuperar lo que hemos perdido: nuestro simple y saludable derecho a la intimidad.

Opinión de la Dra. Lorena López: ¿Cómo afectará la pandemia a la permanencia de los estudiantes en la Universidad? La persistencia y retención en tiempos de pandemia

Opinión de la Dra. Lorena López: ¿Cómo afectará la pandemia a la permanencia de los estudiantes en la Universidad? La persistencia y retención en tiempos de pandemia

Junto con el cálculo del indicador de retención, a la hora de explicar su resultado, es decir, su valor, se realizan estudios que consideran principalmente características de entrada de los estudiantes.  ¿Cómo se medirá la retención para este año?, ¿Es posible hacerlo solo restando los estudiantes que ingresan menos los que se vuelven a matricular en el período siguiente?, ¿Es serio utilizar solo características de los estudiantes, para entender su resultado?

Quizás, como en ninguna oportunidad anterior, tendremos la posibilidad de entender la complejidad que está detrás del indicador que llamamos retención. Existen diversos marcos conceptuales que están a la base de las distinciones de retención, esto es, pensamos que los estudiantes son los únicos responsables de sus resultados, o superamos esa perspectiva–denominada del déficit-y consideramos que los logros de los estudiantes son el resultado de la interacción de variados factores.

La investigación actual sugiere que son muchos los factores que inciden en que un estudiante se quede o no en una institución e incorpora otros conceptos. Para abordar de una manera compleja la permanencia, debemos diferenciar persistencia de retención. La primera, la persistencia es el lado subjetivo de la ‘permanencia’, esto es, los motivos y significaciones que ella tiene en el proceso dinámico y no lineal de las trayectorias de los y las estudiantes, y la segunda, la retención, es el lado institucional, de la mayor o menor capacidad de las mismas instituciones de educación superior para ser efectivas en sus procesos de formación.

En este sentido en la literatura reciente se ha llamado la atención en la necesidad de una reconstrucción tanto teórica como empírica del concepto de éxito o fracaso académico considerando el ingreso de ‘estudiantes no tradicionales’, por ejemplo aquellos/as provenientes de sectores históricamente excluidos del acceso que irrumpen en la aulas universitarias de la mano de las vía de acceso inclusivas, junto a los incrementos en los números de estudiantes que reingresan a la educación superior lo que pone de manifiesto una diversidad de trayectorias académicas.

Si esto es lo que dice la literatura sin pandemia, ¿Qué podríamos decir nosotros en un contexto de pandemia por el lado de la subjetivación de los estudiantes?.  Su participación en las clases no presenciales, se ve ha visto mediada por disponer de computador y de conexión. Según los datos disponibles, había un gran número de estudiantes que no contaban con ello al inicio del semestre.

La institución hizo notables esfuerzos por procurar equipos y conexión. Por otro lado, también los/as especialistas, recomiendan, disponer de un escritorio, mejor si está orientado a la luz natural, en el que pueda estar concentrado/a sin ser molestado/a. Quizás sea difícil de lograr para aquellos/as estudiantes que viven con más de cinco familiares en viviendas de 40 metros cuadrados. También recomiendan los/as especialistas, que un estudiante debe tener una alimentación saludable y balanceada, así como una apropiada salud mental; desafío mayor para nuestros estudiantes, los cuales, en un 50%, debían trabajar para poder mantenerse en la universidad y ayudar a sus familias.

Podemos advertir que difícilmente nuestros/as estudiantes no estén siendo afectados/as por la cesantía y sus consecuencias. Por último, los índices de contagios y de muerte por el COVID-19, están poniendo en tensión a toda la población, pero en mayor proporción a los sectores más vulnerables.

Es en este contexto que los y las estudiantes han debido transitar hacia una modalidad pedagógica no presencial, apoyada con plataformas que permiten realizar clases sincrónicas. ¿Cómo se han dado esas clases? Luego de varios meses de trabajo, se observa que algunos/as docentes han replicado lo que han hecho siempre, esto es, clases completamente expositivas, con nula consideración hacia el estudiantado; formato que, si en una versión presencial debiera erradicarse, en el formato actual, contraviene cualquier recomendación especializada. En el lado opuesto, felizmente, encontramos a muchos profesores que están haciendo un esfuerzo notable por incorporar la tecnología disponible a favor del aprendizaje activo, donde los estudiantes son los que ejes centrales del trabajo docente, esfuerzos, sin embargo, que no han sido suficientes para que los estudiantes no paralicen sus actividades.

La pandemia ha develado, con mucha más fuerza que lo que muchos y muchas quisiéramos, la tremenda desigualdad estructural que tenemos como país. Ese es el contexto en el cual, como Universidad pública y estatal, debemos operar; por lo tanto, volviendo a la pregunta inicial ¿Cómo afectará la pandemia a la permanencia de los/as estudiantes en la universidad? Sin duda, tanto los/as estudiantes cómo la institución, tendrán una difícil tarea para responderla, quizás sea más oportuno que nunca centrar el análisis en las trayectorias estudiantiles que permiten reconocer como un valor la diversidad de perfiles estudiantiles asumiendo institucionalmente los desafíos que ella implica para la retención.

Es probable que algunos de nuestros estudiantes, tengan que decidir no continuar sus estudios en este período, por más que la Institución ofrezca solución a algunos de los problemas que pueden tener. Queda claro que no será solo en características exclusivas del arbitrio de estudiantes, ni de la Institución, donde habrá que buscar las explicaciones a los efectos pandémicos en la persistencia, sino también a nivel de las endémicas inequidades estructurales de la sociedad chilena, a las que la pandemia no ha hecho más que quitar el velo. Los sistemas de calidad deberán estar a la altura de las circunstancias y comprender de manera compleja el resultado dela retención. Es hora de cambiar el paradigma.

Opinión de la académica Paula Walker: Luces o sombras en la pandemia

Opinión de la académica Paula Walker: Luces o sombras en la pandemia

Durante años vivimos en la burbuja del progreso, en la creencia del éxito, de pertenecer al club de los países OCDE, mostrando una cara de Chile que ocultaba muchas otras caras.

Ese país ganador, lo era en verdad solo para un grupo privilegiado, mientras el resto vivían al tres y al cuatro. Dábamos lecciones de cómo se llega al desarrollo, o se derrota a la pobreza (por años medida solo en ingresos), sabiendo que la pobreza es mucho más que tener un ingreso mínimo mensual. ¿Éramos campeones en protección social? ¿O en una buena educación? ¿O en la batalla contra el narcotráfico? ¿O en el acceso al agua, o a pensiones que nos cuidarán para cuando fuéramos mayores? La verdad que no. ¿Y qué nos trajo la pandemia? Nos sacó el velo y nos permite ver lo que somos: un país violentamente desigual.

Cuando las encuestas preguntan por las emociones de las personas en este tiempo, se declara rabia, tristeza, miedo. Hasta aquí las sombras. ¿Y las luces de todo este tiempo? Algunas son el cariño y la solidaridad de la gran mayoría de las personas, esas que ayudan sin que nadie las vea, sacándose plata del bolsillo, o robando tiempo a su descanso.

Han surgido nuevos liderazgos, en distintas disciplinas, en la medicina, la ciencia, el periodismo, las organizaciones sociales, dirigentes vecinales.

Nos hemos reencontrado con la familia, con los hijos e hijas.

La política se ha visto obligada a debatir en torno a materias que ignoraron por años, dando explicaciones poco convincentes. Al fin se pudo discutir sobre el retiro de los fondos de las AFP, en este caso un 10%, ya que nos dijeron que son cuentas individuales: a ver si ahora abrimos la puerta para construir un sistema de seguridad social solidario. Y a las Isapres, vía administrativa, las han mandatado a no cobrar de más, a no aprovecharse de la enfermedad, a no tener que pedirle a la persona enferma que se acuerde de activar su seguro catastrófico: mágicamente ahora ya no es tan necesario activar el seguro en medio de la agonía.

Gracias a Zoom, conocemos lo que de verdad piensan unos de otros, aunque en público se golpeen las espaldas.

Hemos constatado que se construyó un sistema muy favorable para los consumidores (pago y exijo) pero muy esquivo para asegurar derechos.

En fin, cuando esto pase, sabremos quién es quién, sabremos más de nosotros mismos y de nuestras familias, también de nuestros amigos, y del tipo de país que queremos tener.

Podremos elegir entre las pistas que nos dejan las sombras, o las que nos dejan las luces que hemos visto en tiempos de pandemia.

Expertos Usach destacan mejoría en la calidad del aire de Santiago producto del confinamiento

Expertos Usach destacan mejoría en la calidad del aire de Santiago producto del confinamiento

Después de tres días consecutivos de alerta, la Intendencia Metropolitana decretó preemergencia ambiental este martes en la Región Metropolitana, debido a las condiciones de ventilación y a la calidad del aire. La medida fue analizada por tres destacados académicos de la Universidad de Santiago.

Vaguada costera y calefacción residencial

El académico de la Universidad de Santiago y experto en modelos de pronóstico de contaminación atmosférica y ambiental, Patricio Pérez, sostuvo que uno de los principales factores de esta situación es la vaguada costera, que ha impedido la dispersión de contaminantes.

El climatólogo y líder del Grupo de Investigación Antártica de la Usach, Raúl Cordero, explicó que esto se debe a que “si no sopla viento, se mantienen las emisiones en la ciudad y hace que suba la concentración de contaminantes”.

El doctor en ingeniería ambiental y académico del Departamento de Ingeniería Química de la U. de Santiago, Luis Díaz Robles, agregó que otro factor importante en esta seguidilla de días de alerta y preemergencia es la calefacción residencial.

Sin embargo, los expertos advirtieron que los índices de preemergencia aún no se han constatado. “Esto puede deberse, probablemente, a que las emisiones debido a la cuarentena han sido relativamente más bajas”, afirmó Pérez.

“La concentración de NOx (óxidos de nitrógeno) se ha reducido en un 50% respecto a un año normal, lo que refleja la reducción de emisiones del transporte debido a las cuarentenas”, afirmó Díaz.

Cordero concordó con esta percepción. “En promedio, la calidad de aire durante los últimos meses ha sido entre un 20 y un 30% mejor que en años previos. La cuarentena sí tiene un efecto positivo en mejorar la calidad del aire”, concluyó.

Especialistas de la Universidad de Santiago proyectan anuncios del plan “fortalecido” para la clase media del Gobierno

Especialistas de la Universidad de Santiago proyectan anuncios del plan “fortalecido” para la clase media del Gobierno

El Presidente Sebastián Piñera presentó este martes un plan “fortalecido” para la clase media, el cual incluye un bono no reembolsable de 500 mil pesos para trabajadores con ingresos de entre $500.000 y $ 1,5 millones mensuales y que hayan sufrido caídas significativas de sus remuneraciones.

Medida desesperada

Para el doctor en ciencia política y director de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Santiago, René Jara, “este es un anuncio desesperado y tiene un subtexto: hay una posibilidad de que el Gobierno no logre cuadrar a sus diputados y senadores”.

El académico alude a la votación en particular en el Congreso del proyecto que permitiría a afiliados a las AFP retirar el 10% de sus fondos. “Tiene que haber una muy buena propuesta que disuada a su campo. Pese a que el Gobierno ha mejorado el manejo comunicacional de la pandemia, no logra capitalizar ese relativo éxito con este flanco”, sostuvo.

Bajo presión

La experta en comunicación política y gubernamental y académica del Magíster en Ciencias de la Comunicación de la Usach, Paula Walker, compartió que la principal falencia del anuncio es que se realizó de manera tardía.

“Tuvo que hacerlo bajo presión, después que advirtió que el sistema de Administración de Fondos de Pensiones corría peligro”, sostuvo. “Es difícil de creer cuando el Presidente dice ‘he escuchado a la gente y anuncia un bono”, afirmó.

“Sabemos que lo hace en defensa del sistema de AFP tras ver a una parte de la derecha apoyando el retiro del 10% de los fondos”, agregó Walker. “Este anuncio no será suficiente para revertir el gran movimiento social que pedirá un cambio radical a las AFP”, afirmó.

“Machacar el membrillo”

El aporte anunciado por el Mandatario incluirá a trabajadores ocupados, suspendidos, cesantes, a honorarios y por cuenta propia, que hayan sufrido una caída de 30% en sus ingresos formales.

El doctor en ciencia política y académico del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) de la Usach, Raúl Elgueta, reconoció que la propuesta aparece como mejor que las anteriores. Sin embargo, afirma que la nueva medida anunciada por el Ejecutivo es percibida bajo la lógica del dicho “machacar el membrillo”.

“Para cocinar el membrillo y que dé buen jugo, tiene que ser golpeado para que ocurra. Con el nuevo anuncio, vemos que salen mejores cosas tras machacarlo”, comparó. “El Gobierno aparece todos los días haciendo cosas, pero esto termina interpretándose como un deterioro de su capacidad, lo que produce poca credibilidad”, agregó.

Mucha documentación

Finalmente, el beneficio también favorecerá con montos decrecientes a aquellos trabajadores con ingresos de entre 1,5 y 2 millones de pesos mensuales, que hayan tenido caídas de ingresos.

El doctor en ciencias económicas y académico de la Facultad de Administración y Economía (FAE) de la U. de Santiago, Gonzalo Martner, advirtió que los múltiples grupos para los que está destinado el beneficio sugieren un trabajoso procedimiento para acceder a este.

“Ya se observa la cantidad de documentos que tendrán que reunir las personas que quieran acceder al beneficio y las tramitaciones múltiples que van a tener que enfrentar”, concluyó.

Disfruta de la música de Horacio Salinas, la Orquesta Clásica Usach y la bella voz de María Gabriela Olivares

Disfruta de la música de Horacio Salinas, la Orquesta Clásica Usach y la bella voz de María Gabriela Olivares

Andrés Zúñiga, director del Departamento de Extensión Usach recuerda en su introducción, el origen de la agrupación folclórica Inti Illimani en la Universidad Técnica del Estado, UTE,  actual Universidad de Santiago, que junto a otros músicos como Víctor Jara, Quilapayún, Charo Cofré e Isabel Parra fueron elencos estables del Departamento de Extensión Artística UTE.

Aquí puedes ver el video:

 

Hernán Frigolett por nuevos anuncios para la clase media: “Hay una falta de diagnóstico y de visión que es pasmosa”

Hernán Frigolett por nuevos anuncios para la clase media: “Hay una falta de diagnóstico y de visión que es pasmosa”

“No me explico por qué la rebaja (del bono a 500 mil pesos), si en el momento de la votación anterior estaba tratando de convencer a los suyos con bastante más sobre la mesa y con menos restricciones”, remarcó Frigolett.

Añadió que “es de un optimismo desbordado pensar que la gente ya el próximo año va a tener su situación económica totalmente estabilizada y va a poder pagar estos créditos sin problemas”, lo que de acuerdo al académico es una “falta de diagnóstico y de visión que es pasmosa”.

Escuche aquí su entrevista

https://www.radiousach.cl/hernan-frigolett-por-nuevos-anuncios-para-la-clase-media-hay-una-falta

Exitoso conversatorio de la Facultad de Ingeniería impulsa debate sobre nuevas formas de gestión de residuos

Exitoso conversatorio de la Facultad de Ingeniería impulsa debate sobre nuevas formas de gestión de residuos

La Escuela Internacional de Desarrollo Sustentable y Economía Circular de la Facultad de Ingeniería realizó el seminario “Construir una economía diferente: las brechas entre economía circular y el desarrollo sustentable en Chile”, que fue moderado por su director, Dr. René Garrido Lazo.

El conversatorio se centró en la posibilidad de construir una nueva economía, a partir del cambio desde una economía lineal a una circular, donde estuvieron presentes las visiones de la Academia, del sector público-privado y de la sociedad civil, a través de interacción con la audiencia.

A modo de introducción, el académico del Departamento de Ingeniería Geográfica y director de la Escuela Internacional, Dr. René Garrido, instaló la necesidad de trabajar bajo la agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Para ello, según relató, es necesario identificar y abordar los problemas ambientales más relevantes de nuestro tiempo.

En su análisis, señaló que la situación mundial actual ha reflejado la debilidad de los sistemas económicos tradicionales, ya que muchos países han entrado en recesión y otros en importantes crisis climáticas. En este contexto, instalar la discusión sobre la preferencia del uso de energías renovables y no renovables es fundamental puesto que, según su visión, estas son usadas como moneda de cambio para el progreso.

En la actualidad, Latinoamérica y nuestro país en particular han adoptado marcos normativos para instalar la economía circular como alternativa para el desarrollo sustentable, sin embargo, para el Dr. Garrido, hay que cuestionarse si son suficientes; si la población depende de leyes para generar cambios y también, si tiene el mismo impacto proponer la misma hoja de ruta en distintos lugares del país.

De esta forma, se dio paso a la presentación del antropólogo Mario Radrigán, académico de la Facultad de Administración y Economía Usach y director de Ciescoop, quien abordó principalmente los alcances de la economía social y solidaria, también denominada “tercer sector”.

En la práctica, esta definición corresponde a organizaciones sociales, sindicatos, comunidades y asociaciones indígenas, asociaciones gremiales, corporaciones y fundaciones, organizaciones comunitarias, cooperativas, sociedades mutuales, entre otras.

En ella, según explicó el especialista, “existe una primacía del ser humano y del objeto social sobre el capital. Se entiende que este es un medio que tiene que estar supeditado a las decisiones que tomen las personas, con el fin de mejorar su bienestar”.

Asimismo, en su exposición señaló que a nivel mundial existen 1.200 millones de socios en cooperativas y 400 millones de socios de empresas mutuales. “En total, 1.600 millones de personas están entregando bienes y servicios a sus socios, prácticamente a la mitad de la población del planeta”, explicó.

En cuanto a cifras nacionales, según un estudio de la sociedad civil en Chile del año 2016, del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Católica, se vio un total de 230 mil organizaciones de este tipo, versus los resultados del año 2005, que mostraban  la existencia de solo 106 mil.

Estas organizaciones trabajan en función de lograr un desarrollo sustentable y sostenible para sus territorios, considerando también que el producto de sus empresas debe ser repartido de manera equitativa.

Por su parte, Agustín Correa, gerente de nuevos negocios de Triciclos S.A y académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica, abordó la experiencia de esta organización en torno al fomento de una economía circular.

“Nos hicimos conocidos por la operación de puntos limpios, que son estaciones abiertas al público, en donde se reciben todo tipo de materiales reciclables, se promueve educación y un soporte para los usuarios”, dijo. Este modelo partió hace ocho años y en la actualidad, cuenta con servicios de consultoría en Ecuador, Uruguay, Paraguay, Argentina, Bolivia, México y Costa Rica, y operaciones en Chile, Brasil y Colombia.

Según explicó, “el 38% de las emisiones pueden ser reducidas si adoptamos un esquema circular de producción y mantención en el mundo de las construcciones. Asimismo, se podría reducir el 70% en las emisiones referidas a los transportes y también algo muy importante, se podría reducir el 49% de las emisiones asociadas a los sistemas de comida y pérdidas subyacentes a esto”.

Lo más relevante –dijo- es eliminar el concepto de basura y de desperdicio, porque “bajo la lógica de que los residuos no son basura, estos se pueden transformar en insumos. Además, es importante mantener los productos y materiales en el máximo nivel de servicio y regenerar los sistemas naturales”. Para ello, algunas alternativas son remanufacturar, reusar, mantener, prolongar y compartir.

Por último, el Seremi de Medio Ambiente de la Región Metropolitana, Diego Riveaux, aclaró que las medidas que se toman en este ámbito son a largo plazo, por tanto, su implementación va más allá del Gobierno de turno. Sin embargo, agregó que desde el Ministerio de Medio Ambiente se está trabajando una hoja de ruta hacia la economía circular, “en todos los ámbitos que tienen que ver no solo con la generación de residuos y la disminución de ellos, sino también en que la economía se genere de una manera distinta”.

En ese sentido, han establecido dos metas para el 2040, que contemplan al menos un 60% de reciclaje y que exista un máximo 10% de residuos que lleguen a rellenos sanitarios.

Especialistas del Plantel analizan enfermedad ligada al COVID-19 que afectaría preferentemente a niños

Especialistas del Plantel analizan enfermedad ligada al COVID-19 que afectaría preferentemente a niños

Fiebre alta, escozor, hinchazón de los ganglios en el cuello y enrojecimiento de la piel. Estos son algunos de los síntomas del síndrome multisistémico inflamatorio pediátrico (MISC-C), enfermedad que estaría ligada al COVID-19 y que ha afectado principalmente a menores de 10 años. 

Al respecto, el infectólogo y académico de la Escuela de Medicina de la Universidad de Santiago de Chile, Ignacio Silva, precisó que este síndrome no es una manifestación del virus propiamente tal, y que, si afecta más a niños y adolescentes, es porque su sistema inmunológico se encuentra en desarrollo.

“La enfermedad es resultado de una respuesta exagerada ante un estímulo que, en este caso, sería el COVID-19”, afirmó. “Es importante educar a la población en el reconocimiento de los síntomas probables para llevar a los niños a la urgencia a tiempo. Responden bastante bien al tratamiento si se identifica tempranamente”, afirmó.  

El Ministerio de Salud informó que se ha registrado un aumento de casos en niños de 9 años promedio, y que muchos llegan hasta la Unidad de Cuidados Intensivos. Sin embargo, se destacó que la enfermedad afecta a menos del 2 por ciento de los niños que se contagian de COVID-19 y que, en Chile, todos se han recuperado.

Para la doctora Paulina Silva, pediatra y académica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Usach, el síndrome “se produce por el desencadenamiento de la respuesta inflamatoria exagerada en los niños, secundaria a la infección por Coronavirus, llamada tormenta de citoquinas y que afecta a múltiples órganos de forma simultánea que le da la gravedad a la patología”.  

“Aún no se sabe con ciencia cierta por qué los niños y niñas desarrollan esta patología y no los adultos, aunque hay algunos casos reportados en adultos jóvenes que presentan un síndrome muy parecido. Desgraciadamente, como el COVID-19 es una enfermedad nueva, todavía estamos expuestos a encontrar múltiples formas de presentación, tanto en niños como en adultos”, indicó la doctora.

Por otro lado, la también académica y coordinadora del Internado de Pediatría de nuestro Plantel, advirtió que si bien el Minsal ha llamado a la calma, los estudios en Estados Unidos e Inglaterra indicarían que el alza de estos casos se presentarían post peak del Coronavirus, lo que podría “indicar una eventual alza de esta patología en nuestro país”.

“Los riesgos nunca están controlados. Si bien se ha visto una disminución leve de los casos, el país debe mantenerse alerta a la aparición de este síndrome en niños y posibles rebrotes de la enfermedad como se ha visto en Europa ahora que iniciaron la fase de desconfinamiento. Mientras el virus no tenga una vacuna efectiva el riesgo, aunque en menor medida, siempre seguirá”, advirtió la académica.

Dr. Daniel Andreu llama a pacientes con síntomas de Accidente Cardiovascular que no dejen de ir a urgencias por miedo al COVID-19

Dr. Daniel Andreu llama a pacientes con síntomas de Accidente Cardiovascular que no dejen de ir a urgencias por miedo al COVID-19

El neurólogo recordó que los ACV hace un tiempo superaron incluso como principal causa de muerte en Chile a los infartos al miocardio. El infarto cerebral tiene varias formas dentro de sus secuelas, pasando de un abanico de secuelas leves hasta el deceso.

Señaló que al detectar los primeros síntomas, que pueden ser espaciados en el tiempo o más constantes, como la dificultad en el habla, la parálisis o asimetría en la cara o en una pierna o brazo, hay que acudir a un centro de urgencias porque un tratamiento a tiempo cambia radicalmente el diagnóstico.

El Dr. Andreu llamó a la tranquilidad respecto al miedo de contagiarse ya que las urgencias separan a los pacientes y cuentan con todos los protocolos de las medidas sanitarias, con neurólogos disponibles para evaluar a los pacientes con los síntomas señalados.

Escuche aquí la entrevista

https://www.radiousach.cl/noticias/lo-mas-reciente/dr-daniel-andreu-llama-a-pacientes-con-sintomas-de-accidente-0

Páginas

Suscribirse a RSS - Bloque 3