Potencial de escuelas con bajo rendimiento motiva charla de experto

  • Un acucioso análisis de la elección familiar, la permanencia de los educandos y las posibilidades de mejoramiento en las escuelas con bajo rendimiento de notas, realizó el Doctor en Sociología Javier Corvalán, quien dirige el Magíster en Política Educativa de la Universidad Alberto Hurtado. La charla estuvo dirigida a académicos y profesionales de los programas de inclusión de nuestro Plantel, en el marco de las actividades de extensión que realiza el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE).

 




En el marco de las actividades de extensión que realiza el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) de nuestra Universidad, el Doctor en Sociología por la Universidad Católica de Lovaina y director de Magíster en Política Educativa de la Universidad Alberto Hurtado, ofreció la charla “Elección familiar y permanencia de alumnos en escuela de rendimiento bajo y medio en Chile”, dirigido a académicos de la Universidad y profesionales de los programas de inclusión.

En cerca de una hora y media, entregó los resultados de su investigación, la cual se enmarca en una línea de estudios de la Facultad de Educación de la Universidad Alberto Hurtado, respecto del modo de regulación del sistema educativo chileno y sus consecuencias en la desigualdad educativa.

Sobre la base de los antecedentes que indican que la regulación educativa chilena se efectúa desde mecanismos competitivos (mercado), que implicarían una autorregulación ascendente de la calidad, el investigador se interesó en resolver la siguiente pregunta: ¿Por qué en Chile subsisten escuelas de bajo rendimiento crónico en condiciones de que existen alternativas formales a ellas?

Habiendo encuestado a apoderados de estudiantes de quinto básico, de escuelas de comunas de La Florida, Peñalolén, Puente Alto, Valparaíso y Viña del Mar, un 33.2% indicó que el criterio para la elección de colegio para sus hijos fue económico, mientras que un 23.2% lo hizo sobre la base de motivos académicos.

En menor medida, los encuestados resaltaron criterios estructurales (19.5%), relacionales (8,5%) y de infraestructura/ recursos (2.8%).

Con dichos datos, sumados a un pool de preguntas tales como ¿Por qué ese colegio? ¿Cómo caracteriza al colegio? ¿Intención de cambio? ¿Nivel de satisfacción?, concluyó que una regulación virtuosa de la calidad del sistema educativo, al establecerse desde la demanda, se basa en una disconformidad que no existe como tendencia generalizada.

A su vez, esta ausencia de disconformidad parece explicarse por los bajos niveles de capitales de los apoderados (culturales y económicos) y por una fuerte valoración de aspectos no directamente académicos.

Como conclusión, el destacado investigador afirmó “que el sistema educativo chileno parece no tener posibilidad de mejoramiento sustantivo desde una presión proveniente de la demanda de las familias de escuelas de bajo rendimiento”.

Próximamente, se realizará una nueva charla a los académicos del Plantel, dentro de las actividades de extensión que realiza el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) de nuestra Universidad.