- En entrevista de fin de año con UdeSantiago al Día, el rector Juan Manuel Zolezzi Cid, aborda temas del acontecer interno que van desde la situación financiera de la Universidad, pasando por las solicitudes de los funcionarios y las medidas para satisfacerlas, así como las acciones inmediatas tendientes a renovar cuadros académicos y espacios físicos. Entre los anuncios destacan importantes proyectos de infraestructura para la docencia, la investigación y un gran edificio para la atención integral del estudiante.
Los últimos años han sido difíciles para la Educación Superior Estatal. Esto, debido al escaso incremento de recursos públicos para este sector y la fuerte arremetida en el sistema de las universidades privadas creadas después de 1981, para “competir” en el actual “mercado” de la educación terciaria, y la creciente demanda por becas y créditos, cuyos fondos públicos han sido destinados a los estudiantes del sistema, sin importar la institución que elijan para cursar sus estudios, un terremoto, una crisis económica mundial (2008-2009), entre otros problemas.
De este modo, son diversos los frentes externos que ha debido enfrentar de manera activa, férrea y pública el Dr. Juan Manuel Zolezzi, en su calidad de Rector de nuestra Universidad, de presidente del Consorcio de Universidades del Estado (entre 2006 y 2011) y ahora como vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (Cruch).
A nivel interno, la autoridad ha liderado los equipos tendientes a posicionar a la Universidad de Santiago entre las mejores de Chile y de América Latina.
El costo personal, especialmente familiar, ha sido enorme, reconoce el rector Zolezzi, pero asegura que no ha sido en vano. “La U. de Santiago es una gran institución y se merece estar, gracias al trabajo de sus académicos, docentes, estudiantes y funcionarios, en una instancia de liderazgo. Debemos ser referentes de calidad y excelencia académica a nivel nacional e internacional, en un contexto de Responsabilidad Social e Inclusión”, sostiene.
En el plano externo, pone de relieve el movimiento estudiantil, que supo poner en la agenda pública con mucha fuerza, los temas de la educación superior, donde –según advierte- nuestros dirigentes estudiantiles tuvieron y siguen teniendo una actuación destacada. “Esperamos poder concretar muchas de las iniciativas planteadas por ellos en sus movilizaciones”.
Rector Zolezzi, ¿en qué pie se encuentra hoy la U. de Santiago?
Somos una Universidad que lidera a nivel nacional y tenemos un buen reconocimiento a nivel internacional. Estamos entre las 10 mejores universidades de América Latina, según un reciente ranking internacional. Tenemos 6 años de acreditación institucional en todas las áreas certificables y pretendemos la máxima acreditación. Para lograr esto último, hemos generado participativamente un Plan Estratégico Institucional para el período 2011-2015 y recientemente hemos modificado la estructura del Gobierno Central. La idea es enfrentar un nuevo proceso de autoevaluación de mejor forma que el anterior y materializar los acuerdos alcanzados en el proceso de acreditación 2008. El objetivo central de esta planificación, es además de dar respuesta, entregar una mejor atención a los usuarios de nuestros sistemas.
En este tenor, deseamos implementar una nueva política de incentivos en la Universidad, para académicos y funcionarios, relacionados con los objetivos estratégicos institucionales.
En el contexto del reciente cambio asociado a la estructura del Gobierno Central, ¿considera Usted que se asumen riesgos innecesarios debido a las innovaciones en una de las áreas más sensibles como lo es la gestión económica y financiera de la Universidad?
No estamos asumiendo riesgos de ninguna manera. Como Universidad debemos tender a mejorar la gestión económica y financiera de la Institución y la Prorrectoría tiene la capacidad suficiente para hacerlo, debido a que cuenta con un equipo de primer nivel que está usando las mejores herramientas de gestión, registro y control de los recursos financieros con que podemos contar.
Sobre este punto, es necesario dar a conocer a la comunidad universitaria que a partir de 2013 contaremos con un sistema integral de información para la gestión administrativa y que en una segunda etapa, también nos permitirá mejorar los procesos de compras y pagos de la Universidad, entre otras mejoras.
¿Cómo está la Universidad en el ámbito financiero?
La situación financiera de la Universidad es buena y tranquilizadora. Tenemos números azules y la evolución de nuestro endeudamiento (Deuda bancaria) ha disminuido significativamente, pasando de 24 mil millones de pesos en 2010 a 14 mil millones en 2012.
Ello ha sido fruto de la obtención de mejores condiciones de financiamiento mediante tasas, plazos y condiciones específicas. También se debe a un importante ahorro de gastos financieros y a una significativa reducción de nuestros compromisos con entidades financieras bancarias.
¿Cuál cree Usted que ha sido el rol de la Junta Directiva de la Universidad en cuanto a resguardar el equilibrio económico y financiero de la Institución, para evitar crisis o problemas en esta materia?
El trabajo de la Junta Directiva ha sido una gran contribución como organismo colegiado que toma las decisiones que son trascendentales para la Universidad, así como ejercer un control sobre la gestión de este Rector. Se debe recordar que la Junta Directiva cuenta con integrantes relevantes de nuestra comunidad universitaria y destacadas personalidades externas e internas, quienes además nos aportan la necesaria visión del contexto nacional sobre la Educación Superior y otras materias.
En lo que a resguardar el equilibrio económico y financiero de la Institución y evitar crisis o problemas se refiere, en el marco de los dos periodos de mi gestión hemos contado con la valiosísima participación de directores de altísimo nivel técnico como han sido, por ejemplo, Guillermo Vera Mehoyas, destacado ingeniero por nuestra Universidad, empresario y ex gerente de Codelco Chile; o del ex presidente del Banco Central Vittorio Corbo, referente nacional e internacional en materia de análisis y proyecciones económicas; también con la colaboración del Honorable Senador de la República, Andrés Zaldívar; o del presidente del Colegio de Ingenieros de Chile y ex presidente de la Sociedad de Fomento Fabril, Fernando Agüero. Han sido aportes técnicos y experimentados. Además, la Junta Directiva, ha sumado las visiones de país y mundo de otros directores como el Premio Nacional de Ciencias Sociales, Manuel Antonio Garretón o la ex ministra de Planificación y Desarrollo, Clarisa Hardy, y del actual director Fernando Echeverría, reconocido empresario del rubro de la construcción. También gran aporte son los integrantes internos de este organismo colegiado, entre ellos los académicos Hans Fox y Ricardo Santander. Su mirada crítica y técnica nos ha permitido sortear situaciones complejas que mantienen a la Universidad en un equilibrio económico y financiero, en el contexto de nuestra realidad institucional, esto es, recibimos escasos aportes del Estado y atendemos estudiantes (académicamente muy talentosos), quienes en su gran mayoría, provienen de los estratos socioeconómicos menos favorecidos de nuestra sociedad.
Tras dos años de intensas negociaciones, que le correspondió liderar, finalmente en 2009 logró ser promulgada la Ley Nº 20.374 que otorga un incentivo al retiro voluntario a los trabajadores de las universidades estatales. ¿Qué impacto ha tenido esta ley en nuestra Universidad?
Siempre fui un convencido de que se estaba cometiendo una tremenda injusticia histórica con los trabajadores (académicos y funcionarios) de las universidades del Estado, al dejarlos en el más absoluto desamparo con pensiones paupérrimas (daño previsional) una vez que decidieran acogerse a un justo y merecido descanso mediante el retiro voluntario. Con la ley logramos, al menos, entregarles recursos que les permitieran irse en mejores condiciones y con mayor tranquilidad.
Al 31 de octubre de este año, se han beneficiados 491 personas, entre académicos y administrativos para acogerse a los beneficios de esta ley.
Cabe recordar que si bien la Ley Nº 20.374 otorgó beneficios hasta el 31 de diciembre de 2011, los funcionarios de nuestra Universidad que desean jubilar ahora tienen la oportunidad de optar al pago de los once sueldos (no a la bonificación adicional). La Junta Directiva aprobó esta prórroga a solicitud del rector Juan Manuel Zolezzi, estipulada en la ley, y que es con cargo al presupuesto Universitario-.
Ámbito académico e infraestructura
Un tema prioritario en universidades complejas y completas como la nuestra es la investigación científica y la innovación. La U. de Santiago presenta buenos índices de producción y productividad científica, también en la generación de patentes, pero no son suficientes ¿Cómo piensa enfrentar esta situación?
Si bien el fin de año nos entrega buenos números en materia de proyectos de investigación y publicaciones, no es menos cierto que otras universidades se están acercando en los indicadores, tendremos que redoblar nuestros esfuerzos en aumentar nuestra participación en proyectos externos y en publicaciones.
Es un deber académico el obtener el más alto grado académico, mantener vigente un proyecto de investigación y publicar anualmente al menos una publicación ISI.
Con la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Innovación estamos trabajando en distintas propuestas de incentivo a la investigación. El académico (a) que concursa y se adjudica proyectos, lo que le lleva finalmente a publicar en revistas de impacto internacional, debe tener una justa retribución económica.
Estamos trabajando tres propuestas para destinar y pagar incentivos a los académicos que realicen investigación de alto nivel, con montos que en total superan los 300 millones de pesos.
En este plano, aunque en una arista diferente, estamos estudiando para 2013 un incentivo especial para los académicos que tengan mayor calificación en su evaluación del desempeño.
Está vigente un concurso público nacional e internacional para contratar a nuevos académicos de excelencia. ¿En qué va ese proceso?
Se trata de un proceso de contratación, en el que esperamos incorporar 40 académicos, con grado de doctor con publicaciones y proyectos de investigación, para diferentes unidades académicas de la Universidad. Todo ello se realizó en coordinación directa y estrecha con los decanos. Por ahora, estamos recibiendo los antecedentes de los candidatos. El proceso se resolverá mediante una comisión central a nivel de universidad que evaluará el cumplimiento de las bases, calidad para ser académico de la Universidad y requerirá un informe psicológico; luego irá a las comisiones departamentales o de facultad para posteriormente ser los consejos de facultad que propongan al rector una terna para su contratación.
En el aniversario de la Universidad, Usted anunció la apertura de nuevas carreras, programas que sin duda requieren de infraestructura. Este año se inauguró el edificio del Departamento de Matemática y Ciencia de la Computación, saldando una deuda de muchos años con la comunidad de esa unidad académica. ¿Cuál es el plan de infraestructura de la Universidad, pensando en la demanda de espacios físicos que se aproxima?
Esta es una materia prioritaria. Debemos aumentar nuestra oferta académica estatal, pero con la calidad y la comodidad que nuestros académicos, docentes y estudiantes se merecen. Con este fin tenemos proyectada una significativa inversión para construir nuevos edificios y pabellones para la docencia y la investigación. Hemos ahorrado, establecido algunas restricciones y optimizado recursos, todo ello para crecer.
Uno de los proyectos, estará en proceso de licitación en los próximos meses, y en trámites de permiso de construcción. Se trata del edificio docente EDOC- U. de Santiago: una estructura de 8 pisos y tres subterráneos, para 42 salas de clases, y espacios para baños y servicios. Es una superficie total de 10 mil 800 metros cuadrados y estará ubicado en la calle Ecuador, actual estacionamiento frente al Departamentos de Ingeniera Eléctrica y Física, por la vereda sur. Será una inversión de 7 mil 400 millones de pesos de los cuales un tercio aportará la Universidad y el resto provendrá de financiamiento bancario. La entrega de ese edificio está programada para marzo de 2014.
También hemos programado construir un nuevo edificio destinado a los proyectos de investigación prioritaria. Es un proyecto conjunto entre la Corfo y nuestra Universidad y estará ubicado al costado norte del Planetario. La iniciativa estará licitada dentro de los próximos meses, y en trámite los permisos de edificación. Es una edificación de 5 pisos y un subterráneo, más una sexta planta técnica. Contará con instalaciones y recintos especialmente diseñados para centros de investigación y laboratorios para Cedenna, el Centro Biotecnológico Acuícola y Smat – C. Son 2 mil 800 metros cuadrados y el costo estimado será de 3 mil 100 millones de pesos. La entrega de este edificio está programada para mayo de 2014.
Además, estamos muy preocupados por el mal estado en que se encuentran muchas salas de clases de la Universidad y servicios higiénicos, por lo que se ha contemplado un plan de inversión para readecuar, durante este verano, una infraestructura importante para las actividades docentes.
Rector, a mediados de este año un estudiante fue gravemente herido por arma blanca, lo que obligó a tomar medidas institucionales drásticas e inmediatas, que han sido altamente valoradas, pero que no han estado exentas de críticas.
El Plan de Seguridad en el campus, que debemos seguir mejorando, es una medida que debimos haber tomado hace mucho tiempo y no esperar que un hecho tan grave y lamentable nos obligara a hacer lo que debimos hacer antes. La vida e integridad física de quienes conforman la comunidad universitaria es lo más importante, principalmente la de los estudiantes, y debe protegerse a cualquier costo, incluso si ello implica restringir ciertas libertades de acceso al campus o limitar ciertas actividades. Con la colaboración de la comunidad universitaria continuaremos reforzando las medidas tendientes a erradicar de nuestro campus las conductas ajenas al espíritu académico, estableciendo las acciones de prevención y educación, como también, las sumariales y legales correspondientes en los casos que los hechos lo ameriten.
Preocupación por los funcionarios
Una preocupación importante de los funcionarios académicos y administrativos de nuestra Universidad es el reajuste de remuneraciones del sector público, cuestión compleja para todas las universidades estatales debido a que el Gobierno no otorga en el presupuesto de la Nación los recursos para ese incremento salarial.
La pérdida del poder adquisitivo de nuestros académicos y funcionarios del área administrativa es un tema que me preocupa como Rector, porque considero una injusticia mayor que el Estado no se haga cargo de este incremento de los sueldos en el presupuesto nacional. Esta situación nos deja en una encrucijada, porque, en nuestro caso, nos obligaría a incrementar los aranceles de los estudiantes en función del porcentaje del reajuste que se determine cada año.
No puedo desconocer que ha habido un perjuicio a nuestros trabajadores en lo que a sus ingresos se refiere. Pero debo señalar que a partir de marzo del 2012, hemos hecho un esfuerzo al incrementar los sueldos en un 3,9 por ciento y, a partir de diciembre del 2012 en un 5 por ciento. Probablemente no es suficiente, pero el presupuesto del Estado es un tema esencial que debemos resolver con el Ministerio de Educación o, de ser necesario, con el Presidente de la República.
Pese a tratarse de temas diferentes, pero relacionados, debemos mencionar que este año hemos otorgado excepcionalmente un bono de desempeño al personal administrativo, consistente en 180 mil pesos (en tres cuotas; octubre, noviembre y diciembre) y también un no menos merecido incentivo a académicos que tengan un buen puntaje en su evaluación de investigación. También hemos incrementado la cobertura de la beca de arancel para los hijos de funcionarios académicos y administrativos que estudian en la Universidad de un 50 a un 75 por ciento.
Rector Zolezzi, recientemente el Ministerio de Educación cuestionó el proyecto de Estatuto Orgánico de nuestra Universidad en cuanto a la participación triestamental, ante lo que Usted anunció una impugnación al pronunciamiento de la cartera…
Fue muy decepcionante leer ese dictamen del Mineduc. Ante eso, haré todo lo que está a mi alcance para lograr que nuestro nuevo Estatuto se convierta en Ley de la República tal como lo votó la comunidad universitaria. Ese es mi compromiso.
Por tanto, interpusimos inmediatamente, un recurso de reposición ante el Ministerio de Educación. Además ejerceremos acciones ante la Contraloría General de la República mediante una presentación ante el Contralor General para que emita un dictamen interpretando el artículo 56 del DFL n°2 de 2009 de Educación y los Tribunales de Justicia, por la vía de la interposición de un recurso de protección invocando la ilegalidad del oficio del Ministerio por aplicación errónea del señalado artículo 56 del DFL n°2 de 2009 de Educación.
Pese a esta eventualidad, hemos avanzado. Este año logramos un acuerdo inédito en lo que a participación se refiere. Se trata del Protocolo de Acuerdo para la Participación, firmado por este Rector, los decanos, los directores de la Escuela de Arquitectura y del Programa de Bachillerato, y los presidentes de Feusach y de las Asociaciones de Funcionarios y de Profesionales, y en el que nos comprometimos a que antes que finalice el presente año, estos estamentos deberán estar representados y tener derecho a voz y voto en todos los Consejos de Facultades, de Departamentos y de Escuelas. Lamento, en todo caso, que algunos integrantes de la comunidad se hayan restado de esta iniciativa.
No ha pasado por alto la nueva denominación de nuestra institución, que ha desplazado la sigla Usach por la marca U. de Santiago...
En primer lugar quiero insistir que no se ha cambiado el nombre de nuestra Universidad; lo que se ha modificado es la sigla. La iniciativa pasó por un detallado y acabado análisis de las autoridades y profesionales de la Dirección de Estudios y Análisis Institucional (DEAI) y el Departamento de Comunicaciones, instancias que constataron las percepciones negativas asociadas a la marca Usach, en base a, entre otros, el estudio elaborado por la consultora MORI, en el contexto del conocido Barómetro de la Educación Superior en Chile en base a la opinión de estudiantes de enseñanza media y sus padres, quienes evalúan la calidad de las instituciones de Educación Superior del país a partir de las percepciones que reciben de ellas. En todo caso esta situación está en evaluación permanente.
Una falencia evidente de infraestructura son espacios de estudio y alimentación para los estudiantes. ¿Hay algún proyecto que beneficie a nuestros jóvenes?
Por supuesto. En 2012 hemos realizado importantes mejoras en la infraestructura deportiva, como fue la remodelación de la Piscina y el Gimnasio Principal. Pero no es todo, ya que está proyectada la construcción del Edificio de Atención Integral al Estudiante, que contará con módulos de atención, un Patio de Comida, 3 plantas de logias de estudio y un piso destinado a la Vicerrectoría de Apoyo al Estudiante. También contará con dos niveles de estacionamientos y un nivel zócalo destinado a un auditorio y una sala de expresiones artísticas. Es una superficie estimada de 2 mil 900 metros cuadrados. Tenemos cinco alternativas de emplazamientos de este edificio, lo que debemos definir, en función de lo que sea mejor para los estudiantes en cuanto a su acceso. Este proyecto será financiado en un tercio con recursos propios y dos tercios con financiamiento bancario. La fecha de entrega será el 1 de agosto de 2014.
También cabe dar a conocer una importante inversión para renovar el equipamiento computacional de nuestra Universidad, para lo que hemos adquirido mil 200 computadores para actividades de docencia y 500 para funciones administrativas. Los recursos propios para esta adquisición ya están disponibles.
Quiero manifestar que producto del esfuerzo conjunto de la comunidad universitaria, se logró no solo equilibrar la operación financiera de la Universidad, sino que fortalecer nuestro proyecto institucional.
Por último, ¿Por qué Usted cree que somos capaces de alcanzar la máxima acreditación?
Porque somos una Universidad de excelencia y comprometida con el país. Contamos con buenos indicadores en la productividad científica, y en la docencia. Tenemos una nueva estructura, avances de posicionamientos en los Rankings, además de un Plan Estratégico en pleno desarrollo formulado de manera participativa. Asimismo, poseemos un equilibrio financiero de la Institución y un liderazgo en el sistema de educación superior (CUECH, CRUCH). Todo ello se ha realizado con el fin de mejorar significativamente las debilidades detectadas en el proceso 2008. Además, contamos con claridad de misión y visión estratégica de la Universidad. Si fuimos capaces como comunidad, de avanzar de los 3 a los 6 años de acreditación, ahora también podremos. Y, algo muy importante, con el carácter participativo que tendrá este proceso de autoevaluación, que comenzamos el jueves 20 de diciembre, recién pasado, y el concurso de todos los integrantes de nuestra comunidad, lograremos el máximo nivel de acreditación institucional.
Finalmente, como Rector de la Universidad hago un llamado a la comunidad a sumarse a los desafíos y trabajos que implica un nuevo año de actividad, entregando lo mejor de nosotros en pos de nuestros estudiantes y la sociedad chilena.
Nuestra institución y sus integrantes se lo merecen, por la calidad y excelencia de su quehacer.