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Usach reflexiona sobre su quehacer en jornadas de Autoevaluación Institucional

Usach reflexiona sobre su quehacer en jornadas de Autoevaluación Institucional

Este lunes 25 de noviembre se dio inicio a las Jornadas de Autoevaluación Institucional de la Universidad de Santiago de Chile, en el marco del proceso de Acreditación 2020: #SoyUsach Digamos presente y futuro a nuestra Universidad.

Esta etapa tiene por objetivo analizar los principales resultados obtenidos a la fecha en el proceso, evaluar el desempeño institucional en las distintas áreas de acreditación, identificar las fortalezas y debilidades, y proponer preliminarmente acciones de mejoramiento.

El Rector de la Usach, Dr. Juan Manuel Zolezzi Cid, destacó que "la participación de la comunidad universitaria es clave en la fase de reflexión en el que nos encontramos como Institución".

"Este es un proceso significativo para todas y todos quienes formamos parte de nuestra Universidad, buscando cuál será nuestro plan de mejora para los próximos 7 años", agregó la máxima autoridad del Plantel.

Para el Prorrector Jorge Torres Ortega, la opinión de toda la comunidad universitaria es fundamental para el proceso, ya que "debe dar cuenta de nuestra cultura de mejoramiento continuo y de nuestro compromiso con el aseguramiento de la calidad".

"Es parte de nuestra obligación como Universidad estatal demostrar el compromiso que adquirimos hace 170 años con la educación pública de calidad", enfatizó el Prorrector Torres.

Metodología

En esta primera jornada de autoevaluación participaron cerca de 200 integrantes de la comunidad, entre académicos y funcionarios. Los asistentes se dividieron en dos Comisiones: Estructura de gobierno y recursos materiales y financieros; y Gestión del pregrado, Modelo Educativo y Armonización curricular.

Cada una de ellas trabajó en dos salones diferentes del Hotel Manquehue, evaluando los resultados de procesos preliminares, como la medición de los indicadores de cada área de acreditación y los estudios de opinión (encuestas, entrevistas, focus group).

Una vez finalizado esto, las comisiones tendrán la labor de identificar las fortalezas y debilidades, además de entregar ideas y acciones de mejoramiento del desempeño de la Universidad en las áreas de la acreditación: Docencia de Pregrado; Docencia de Postgrado; Vinculación con el Medio; Investigación y Gestión Institucional.

El Jefe del Departamento de Calidad y Acreditación, Carlos Medrano Soto, puntualizó que los resultados de estas jornadas "serán insumos fundamentales para el informe de autoevaluación institucional que debemos entregar a fines de enero ante la Comisión Nacional de Acreditación".

La Decana de la Facultad de Química y Biología, Dra. Leonora Mendoza Espinola, valoró la instancia para discutir y compartir con los mismos colegas que uno ve a diario, pero en otras circunstancias. "Será muy constructivo para la Universidad, pues se trata también de un ejercicio democrático", sostuvo.

En tanto, la Jefa de la Unidad de Admisión, Su Hsen Sun Muñoz,  destacó la participación de la comunidad universitaria en esta fase de diagnóstico. "Con la reflexión de hoy, podremos avanzar en elaborar ideas y acciones de mejoramiento institucional", detalló.

Este martes 26 trabajarán las comisiones de Gestión de la Información y del mejoramiento continuo; y Desarrollo del Cuerpo académico. Para el 27 de noviembre lo hará Gestión del Postgrado e Internacionalización; mientras que el jueves concluirá con la Generación del conocimiento e investigación, y Gestión de la Vinculación con el Medio.

 

Usach ratifica compromiso para erradicar cualquier forma de violencia de género

Usach ratifica compromiso para erradicar cualquier forma de violencia de género

Hoy 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres, y en nuestro país la jornada se encuentra marcada por el alzamiento ciudadano, que entre sus demandas también plantea incluir propuestas feministas en la agenda social del Gobierno.

Diversas organizaciones que pertenecen al movimiento feminista, aseguran que es imprescindible que su petitorio sea parte central de las reivindicaciones del conjunto de los movimientos sociales. Además, cuestionan la inactividad de la Ministra de la Mujer, Isabel Plá, ante las denuncias de abuso sexual y violación a mujeres, por agentes del Estado.

Para la académica del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), Dra. Sandra Navarrete Barría, el movimiento ha tenido un papel importante, tratando de visibilizar las luchas propias de las mujeres, pero la exclusión de las propuestas en la agenda social señala "un declive del alcance que tuvo la convocatoria del pasado 8M, que auguraba un muy buen porvenir para el movimiento".

De acuerdo a la investigadora, la no inclusión ocurre por dos razones principales. "Una tiene que ver con el anquilosamiento de un pensamiento político patriarcal que estipula que lo homogéneo adquiere mayor fuerza política que otro heterogéneo, y en esta lógica, un conjunto de demandas por y para la sociedad en general, podrían tener un mayor éxito", explica.

Y la otra razón, que se relaciona con la anterior, agrega la Dra. Navarrete, apunta a "que todavía en Chile y en muchos países del mundo se valora el feminismo como un movimiento de mujeres que busca conseguir derechos exclusivos para las mujeres".
Este es un prejuicio que el país desconoce e ignora, ya que las diez demandas del movimiento feminista están pensadas y formuladas desde una profunda conciencia social, que incluye alianzas con todas las otras luchas que hoy estamos viendo en este estallido, como lo son la violencia política sexual, el fin de las AFP, la búsqueda de justicia y verdad ante la violación a los DDHH, la educación desmercantilizada, entre otras, las que ya han sido motor de reflexión para las feministas.

"Es por esto que hoy se necesita más que nunca volver a revisar, desde este Chile transformado, las demandas feministas e incluirlas en la agenda social", detalla la académica de IDEA.

Avances en la Usach

Este 2019 la Universidad de Santiago de Chile ha levantado acciones relevantes en torno a la prevención y promoción de su Protocolo, así como también instancias para erradicar la violencia de género, discriminación y acoso sexual dentro del contexto universitario. Entre ellas se cuentan capacitaciones a funcionarios y funcionarias; y jornadas de formación para autoridades del Plantel.

"Si bien ha sido un esfuerzo muy importante, aún no son suficientes. Se necesita seguir trabajando para erradicar cualquier forma de violencia o discriminación contra las mujeres o diversidades sexuales", sostiene la Directora de la Dirección de Género, Diversidad y Equidad, Andrea Hurtado Quiñones.

La socióloga Hurtado sostiene que, en el contexto de estallido social, es importante mencionar que todavía existen desafíos grandes. "Nosotros y nosotras estamos trabajando para posicionar, como una demanda impajaritable, una ley de no violencia integral contra las mujeres".

"Existen normas específicas dentro de las manifestaciones de violencia, pero no una que hable respecto a qué significa la violencia de género", agrega la directora de la Dirección de Género, Diversidad y Equidad.

Académica de la Usach integrará comisión técnica para nueva Constitución

Académica de la Usach integrará comisión técnica para nueva Constitución

En la madrugada del viernes pasado, 11 presidentes de partidos políticos llegaron a un acuerdo amplio que abre un camino hacia una nueva Constitución. Por su amplitud e importancia, muchos lo califican como histórico. Después de todo, llegar a un acuerdo para cambiar la Constitución requiere la ratificación de 2/3 de la Cámara de Diputados y el Senado. Hasta ese día –y hace un mes-, esto parecía una quimera.

El punto número 12 del mentado acuerdo define que todos los firmantes deben convocar a una comisión técnica que proponga los mecanismos para poder implementarlo. En este caso, esto implica un plebiscito de entrada para que la gente apruebe o rechace la idea de una nueva Constitución, al tiempo que se elige entre una convención constitucional (con miembros elegidos por votación popular) o una comisión mixta (50% de parlamentarios y 50% constituyentes electos por votación popular). Finalmente, se contempla un plebiscito ratificatorio, que apruebe el texto escrito por la convención.

Para poder implementarlo, se requiere del apoyo de especialistas técnicos en derecho constitucional, sistemas electorales y procesos participativos. Cada uno de los presidentes de partidos políticos convoca a un experto. En el caso del PPD, su presidente, Heraldo Muñoz, escogió a la académica de la Universidad de Santiago, Pamela Figueroa Rubio, doctora en Estudios Americanos y exjefa de la División de  Estudios de la Secretaria General de la Presidencia (Segpres) en el segundo gobierno de Michelle Bachelet.

“Acepté encantada, porque creo que es muy importante, como docente de la Universidad de Santiago y como politóloga, poner a disposición nuestras investigaciones y expertise profesional”, explicó.

“Creo que la Universidad de Santiago tiene un sello muy importante, que es el compromiso público desde una perspectiva interdisciplinaria. Eso valida mucho mi participación, porque muchos de los expertos van a ser abogados constitucionalistas. Yo tengo una experiencia como historiadora y politóloga que me permite tener una visión bastante amplia de los procesos políticos, de la importancia de la democratización y los distintos mecanismos de la democracia participativa y deliberativa, que es lo que las democracias modernas están incorporando en sus sistemas para generar mayor gobernabilidad democrática”, complementó.


-¿Cuál es la importancia de la presencia de nuestra Universidad en este proceso?

-La Universidad de Santiago de Chile tiene múltiples experiencias en temas indígenas, participación social, y comprender los procesos con nuestra comunidad y sociedad. También luego va a haber otra dimensión, con el procesamiento de datos y la elaboración de propuestas a partir de la participación ciudadana. En esa instancia, la Facultad de Ciencia o la Facultad de Administración y Economía van a poder aportar. Es muy importante que estemos presentes, porque nos vamos a abrir a aportar a nuestro país en un proceso tan trascendental. Me siento muy apoyada por la comunidad académica de la Usach y sé que vamos a estar a la altura del desafío.

-Personalmente, ¿cuál cree que puede ser su mayor aporte?

-Como Jefa de la División de Estudios de la Secretaría General de la Presidencia entre 2014 y 2018, me tocó el diseño, la ejecución y la tramitación legislativa del proceso constituyente impulsado por la ex Presidenta Bachelet y también de sus reformas políticas. Tengo una experiencia bastante amplia para poner a disposición. Me siento muy honrada y contenta de representar a la Universidad de Santiago en ese espacio, que fundamentalmente va a ser uno de académicos y especialistas, donde vamos a proponer distintas alternativas –al Congreso y al Gobierno- para seguir un camino constituyente que sea democrático y participativo.


-¿Cuál es la línea por la cual va a ir su planteamiento y su aporte puntual?

-Lo que hemos conversado con el presidente del PPD es que este tiene que ser un proceso que restituya la confianza de la ciudanía con sus instituciones y entre los mismos ciudadanos. Nos parece importante la incorporación de independientes, mujeres, pueblos originarios, jóvenes; que existan mecanismos de participación vinculante para que las distintas comunidades, e incluso los chilenos en el exterior, puedan dar su opinión y nutrir así a esta convención constituyente con las propuestas que toda la ciudadanía está elaborando. Queremos aportar una visión plural y democrática, plasmar un sello de abrir el debate a las personas que están comprometidas con este proceso y no sólo a los representantes de los partidos políticos.

-En los últimos días, el senador Andrés Allamand planteó una interpretación distinta del acuerdo con respecto al tema de los 2/3 y la hoja en blanco. ¿Qué le parece esa postura?

-Si uno lee el acuerdo, el espíritu es otro. Se conversó bastante lo que se llamó la hoja en blanco y eso significa elaborar una Constitución con las propuestas que vayan surgiendo ahí y no con un texto previo. Los mismos dirigentes y líderes que lo firmaron han señalado una opinión distinta a lo que plantea el senador Allamand; incluso el propio presidente de su partido, Mario Desbordes. Me da la impresión que es una opinión muy puntual, que no refleja el espíritu de quienes firmaron el acuerdo. Él lo ha puesto sobre la mesa en aras del debate que existe, pero no generó adhesión, sino rectificaciones, por no decir críticas. 

-¿Cuál es la importancia del estudio de las experiencias comparadas en este proceso?

-Es fundamental. Cuando diseñamos el proceso constituyente en 2016, los dos años anteriores trabajamos levantando experiencias comparadas con un equipo de politólogos. Eso lo hizo también el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y luego sacaron una publicación. Teniendo muy claro que cada proceso constituyente debe tener las características del país donde se desarrolla, la experiencia comparada es muy importante. Es una metodología que usamos en ciencias políticas y sociales, y que nos permite evaluar tanto las experiencias positivas como negativas.

-Es un aspecto central en la discusión, entonces.

Es algo que vamos a tener a la vista y en lo que yo me he estado preparando. En la misma Universidad de Santiago se está trabajando con el análisis de experiencias comparadas dentro de los propuestas de los espacios de debate que están realizándose al interior. Varias otras Universidades lo han estado realizando también. Por otro lado, he estado conversando también con académicos extranjeros que han trabajado el tema constitucional hace mucho tiempo. Hay mucha gente aportando para aprovechar la oportunidad histórica de resolver esta crisis por una vía democrática institucional. Eso para nosotros, como sociedad, sería fantástico: tener una mejor institucionalidad política para esta sociedad que cambió y exige otras demandas.

-¿Hay alguna experiencia internacional particular que atraiga más su atención?

-El caso de Colombia, porque se parece al nuestro, en el sentido que tuvo ese plebiscito inicial que ellos llamaron Séptima Papeleta. Lo nuevo en nuestro caso, es que vamos a tener también esta conversación sobre la sede constituyente. En eso vamos a hacer historia. Y como tuvimos también esta participación para el proceso de 2016, probablemente nuestra convención va a ir acompañada de una mayor experiencia constituyente en términos de participación ciudadana.

U. de Santiago profundiza reflexión junto a la comunidad universitaria por crisis social

U. de Santiago profundiza reflexión junto a la comunidad universitaria por crisis social

el marco del trabajo de reflexión que se está desarrollando en distintas instancias al interior de la Universidad de Santiago de Chile, este miércoles se realizó la Tercera Jornada de Construcción de Propuestas para el país, en el marco de la crisis social.

El conversatorio del pasado miércoles en el Aula Magna, liderado por los destacados expertos Ricardo Ffrench-Davis y Jaime Bassa, despertó un alto nivel de interés por parte de la comunidad universitaria, por lo que se postergó para ayer el trabajo de las comisiones.

Cabe recordar que estas últimas están compuestas por académicos, estudiantes y funcionarios, y abordan ocho temáticas que se desprenden de la agenda social: sistema tributario y desarrollo económico; trabajo decente; sistema de pensiones y su financiamiento; salud y bienestar; educación de calidad; energías y sustentabilidad; ciudad y comunidades sostenibles; sistema político, instituciones sólidas y nueva Constitución.

Las comisiones identificaron los polos más importantes del diagnóstico y deslizaron algunas propuestas a corto, mediano y largo plazo. “Hoy estamos para profundizar en ello, ya que también ha habido un avance en la agenda social, el debate y la discusión”, señaló la Vicerrectora de Vinculación con el Medio, Dra. Karina Arias Yurisch.

“Hoy estamos para profundizar en la validez técnica y política de las propuestas que emerjan desde nuestra comunidad”, agregó la autoridad universitaria.

La académica del Departamento de Educación de la Facultad de Humanidades, Dra. Elisa Loncon Antileo, manifestó que “la Universidad es un referente académico, investigativo y técnico, pero además como Institución estatal, debe interesarse por lo que ocurre en el país”.

Puntualizó la doctora Loncon que “sería irresponsable de parte de la comunidad universitaria no tener una opinión, sobre todo los académicos, porque estamos formando generaciones que tendrán un compromiso con la sociedad”.

En tanto, el académico del Departamento de Contabilidad y Auditoría de la Facultad de Administración y Economía, Dr. Germán Pinto Perry, destacó que, como Universidad pública con sentido social, la Usach realice este tipo de ejercicio.

“Sería interesante que exista una instancia más adelante, donde siempre nos reunamos los académicos de distintas disciplinas para ver cómo está avanzando el país en estos temas”, apuntó el Dr. Pinto.

Estudiantes entregan valioso testimonio de su labor en protestas sociales de Plaza de la Dignidad

Estudiantes entregan valioso testimonio de su labor en protestas sociales de Plaza de la Dignidad

Pablo Benavidez, Sebastián Lizana, Natalia Castillo, Rocío Albornoz, Juan Pablo Vásquez, y Amanda Hasbún, fueron los estudiantes de la Universidad de Santiago que participaron en los primeros auxilios para salvar la vida del joven Abel Acuña, muerto el pasado viernes 15 de noviembre en el marco de las protestas sociales y en circunstancias que involucran el erróneo actuar de Carabineros.

El equipo comenzó sus labores de asistencia a los manifestantes el domingo 20 de octubre, solo dos días después del estallido social que busca construir un Chile más justo. “Éramos gente de enfermería, medicina y el Eciades de la Facultad de Ciencias Médicas, que nos organizamos para salir el lunes 21 a hacer primeros auxilios a las calles. El escenario estaba peligroso y nosotros teníamos que hacer algo desde nuestras carreras”, comentó  Pablo Benavides.

La Brigada de Emergencia Usach hoy cuenta con una cincuentena de integrantes, divididos en primeros auxilios, rescate y profesores voluntarios.

En la primera línea

La Brigada ha adquirido una gran experiencia durante su trabajo en el marco de este estallido social, encontrándose con varios casos para los que no estaban preparados. Los estudiantes indican que su durante el desarrollo de sus funciones curando a personas heridas, han recibido el constante ataque de las fuerzas policiales.

“Partimos en la estación Metro U. Católica. En esos días nos tocó curar a un flaco que recibió un balazo a quemarropa en el brazo. Era una bala real, de rifle militar y a pesar del caos de esos días logramos sacarlo hasta la ambulancia y se salvó”, recordó el estudiante de Terapia y Actividad Física y Salud, Pablo Benavides.

Luego, tuvieron que dejar ese sector, debido a la violencia del lugar. “Tratamos de volver otro día y vimos que desde arriba nos disparaban perdigones”. Pablo comenta que junto a Sebastián Lizana, estudiante de la carrera de Entrenador Deportivo, decidieron sumarse a otras brigadas y con esos grupos llegaron a la primera línea, donde empezaron a trabajar en el apoyo a gente que recibió la acción represiva de Carabineros durante las protestas.

Sebastián recuerda una jornada al lado del Hotel Crown Plaza. “A nosotros nos dispararon y a un camarógrafo le pegaron con una luma en la canilla y aparentemente le generaron una fractura (…) después, le dispararon a una persona 8 perdigones en el tórax, uno de ellos penetró profundamente. Lo bueno fue que pudimos ayudarlos con primeros auxilios”, comentó.

Pablo relata que vio el ataque de carabineros a una brigadista: “estaba identificada como voluntaria de la salud y cinco carabineros forcejearon con ella; la chica cayó al suelo, azotó su cabeza contra los adoquines amarillos que separan las líneas del Transantiago y quedó inconsciente. Siguieron disparando sin importarles nada”, precisó.

Abel Acuña

Pablo Benavides comenta que él y Sebastián estaban en el punto de Vicuña Mackenna con Alameda y recibió el llamado de Juan Pablo Vásquez, otro integrante de la Brigada Usach, informándoles que había una persona que haría paro cardiaco en cualquier momento.

“Salimos. El Seba iba abriendo paso y yo atrás corriendo con la camilla. Nos costó movernos, porque la gente estaba mirando el cielo, ese día se tiraron muchos fuegos artificiales; en ese momento la Plaza de la Dignidad era una fiesta”, comenta.

Después llegaron al lugar y Abel Acuña ya había entrado en paro, también estaba el personal del SAMU haciendo la reanimación, pero no con la ambulancia. “Son funcionarios que, en su horario libre, van hacer brigadas igual que nosotros, como voluntarios”.

Sebastián Lizana recuerda que el pánico se tomó el lugar. “Muchos manifestantes grababan con sus celulares la reanimación que el SAMU le estaba haciendo a Abel, por lo que decidimos despejar la zona y organizar un cordón humano y un pasillo para que pasara la ambulancia”, recuerda

El equipo de SAMU llevaba entre 5 y 10 minutos de reanimación cuando llegó la ambulancia, “pero un carro lanza gases (zorrillo) y un grupo de fuerzas especiales no la dejó pasar y tuvo que darse la vuelta por la rotonda de la Plaza de la Dignidad”. Después vendría el guanaco y los perdigones; los jóvenes tratando de proteger con escudos la asistencia a Abel; el ambiente era irrespirable por efecto de las bombas lacrimógenas. “De nada sirvió mostrar los delantales blancos y los cascos con cruces rojas”.

“En medio de todo este caos una chica del SAMU dijo que Abel estaba respirando otra vez, que tenía pulso, pero muy suave; el paciente había vuelto del paro. Me puse delante del guanaco para tratar que dejaran de disparar, pero no pasó nada. La camilla estaba a unos 10 metros de la ambulancia, pero se demoraron 5 minutos, por lo menos en llegar a ella”.

Luego la ambulancia partió a la ex Posta Central. Ahora los brigadistas tenían que cruzar la Plaza de la Dignidad y decidieron avanzar en bloque con sus escudos y los brazos en alto a lo que Carabineros les dijo: “bajen las manos, se ven ridículos, no sean hueones” comenta Benavides.

Sebastián se suma a las palabras de Pablo y añade con rabia y tristeza: “Es una impotencia muy grande cuando pasamos por el cordón de fuerzas especiales. Me picaban las manos por golpear a esos pacos, pero mi casco y su cruz roja representan algo que no me lo permite. Sentí mucha rabia, porque después de todo lo que pasó Carabineros terminó arrebatándonos la vida de Abel”.

Al terminar este relato Pablo Benavides reflexiona que desea un mundo mejor, más equitativo, “que todos tengan las mismas condiciones para poder correr la misma carrera y que todos partan en la misma línea. No se trata de hacer retroceder a los que están más adelante; se trata de hacer avanzar a los que están atrás y ese es el terror que les da a algunos que no han cuestionado sus privilegios”.

Académicos de U. de Santiago analizan la situación del país a un mes de la crisis social

Académicos de U. de Santiago analizan la situación del país a un mes de la crisis social

Este lunes se cumplió un mes desde que el viernes 18 de octubre de este año, se inició en Chile un estallido social sin precedentes en la historia del retorno a la democracia.

Lo que comenzó con el alza de la tarifa del Metro de Santiago, rápidamente generó masivas movilizaciones y disturbios en todo un país cansado de la injusticia estructural e institucional.

En respuesta al alzamiento ciudadano, el Gobierno decretó Estado de Emergencia en varias regiones, provincias y comunas del territorio, con lo que regresaba el traumático recuerdo de la dictadura de Pinochet.

En cifras del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), estos 30 días de manifestaciones dejan 25 personas fallecidas y 2.381 heridos en hospitales. De estos últimos, 217 presentan lesiones oculares a causa de perdigones o lacrimógenas.

En este contexto, las fuerzas políticas del país alcanzaron recientemente un acuerdo para elaborar una nueva Constitución. No obstante, esto no merma el descontento de la ciudadanía, que continúa movilizada.

A un mes del inicio de la crisis, cabe preguntarse: ¿en qué cambió Chile en estos 30 días?

Desde la Psicología

El académico de la Escuela de Psicología de la Usach, Dr. Sergio González, sostiene que haciendo un análisis de la contingencia, el país cambió en cuatro aspectos.

En primer lugar, agrega el Dr. González, hay una capacidad de respuestas ciudadanas a las demandas que por mucho tiempo se postergaron. Por otro lado, la clase política ha sido remecida y llevada a generar soluciones que dilataron históricamente.

Enseguida, en el tercer aspecto, las personas hoy en día se sienten más empoderadas, puntualizó el académico. “Hay un empoderamiento acerca de lo que a mí me sucede. No es un fenómeno exclusivamente individual, que esté solo dentro de mi intimidad, sino que más bien es compartido”, señaló.

“Por lo tanto, hay una red, una comunidad más despierta y en ese sentido hay una intersubjetividad presente”, insistió el académico González.

Por último, agregó que la incertidumbre ha sido otro aspecto importante, en términos de viabilizar a futuro lo que se ha logrado en materia constitucional y agenda social. “Esa incertidumbre tiene que ver con la posibilidad de que las demandas puedan realmente ser contestadas desde el Gobierno y las instituciones, o que genere frustración, lo que traería nuevamente un déjà vu sobre lo que hemos vivido desde el 18 de octubre hasta hoy”, apuntó el psicólogo.

Desde la Filosofía

Para el académico del Departamento de Filosofía, Dr. Mario Sobarzo, son tres los aspectos fundamentales en los que Chile ha cambiado en este mes.

De acuerdo al doctor en Filosofía Moral y Política, el primero de ellos es la relación de lo institucional con lo que hasta hace poco no se consideraba institucional, como las propuestas y miradas que venían del mundo social y no quedaban integradas al interior de los sistemas legislativos.

“Con una apertura hacia una nueva Constitución, e incluso con la capacidad del movimiento social y las luchas sociales que se desplegaron, el cerco se corrió y la gente logró que se aprobaran leyes que hasta hace un tiempo considerábamos un ‘verdadero fumadero de opio’, como dijo un ex senador para referirse al cambio constitucional”, afirmó el académico Sobarzo.

Otro punto relevante para el filósofo tiene que ver con la reconfiguración subjetiva de los chilenos y chilenas. “Hoy la gente sabe que el poder no es un instrumento inalterable, sino que es algo que puede transformarse si la sociedad es capaz de organizarse”, añadió.

Y un tercer aspecto, según el Dr. Sobarzo, es la reconfiguración de la conciencia de clases, ya que “vimos emerger una cantidad de problemáticas que se consideraban propias de las clases más bajas, pero nos damos cuenta que eran comunes con lo que se interpretaba de clase media hasta hace poco”.

“Tenemos un sistema donde existe una pequeña elite y una gran cantidad de personas que, lejos de ser de clase media, es más bien de clase baja o popular, porque no cuenta con acceso a mantenerse o a sobrevivir si es que pierde su trabajo, se enferma o se endeuda. Cae en un estado de pobreza rápidamente”, concluyó

Desde la Sociología

El Vicedecano Académico de la Facultad de Administración y Economía, Alberto Mayol, subrayó que el cambio está en que, en vez de presentarse como un país OCDE, es el Chile de la nueva Constitución; de reformas modelo; y de una élite que debe dar demostraciones de comprensión.

“Eso es lo que está cambiando y queda saber hasta dónde va a cambiar”, indicó el sociólogo de la Usach. Esto, ya que fue precisamente en medio de esos fundamentos, de país OCDE por arriba, y el hogar bajo asedio económico, más otro conjunto de hechos, lo que gatilló la crisis, explicó.

Sin embargo, el sociólogo advirtió que “realmente no hay nada que haya cambiado en este proceso, porque los fundamentos vienen hace mucho rato, solo que aún había aire para que se pudieran sostener. El aire se acabó, se juntaron numerosas variables, y explotó la olla”, concluyó.

 

Académicos Usach proyectan alcances del acuerdo político por una nueva Constitución para Chile

Académicos Usach proyectan alcances del acuerdo político por una nueva Constitución para Chile

Después de 29 días de crisis social, la clase política de nuestro país consiguió aunar voluntades para definir los diferentes métodos que darán paso a una nueva Constitución.

El Plebiscito se realizará en abril del 2020 y será la primera posibilidad en la historia de Chile para que  su origen pueda ser a través de la discusión democrática.

Si bien este acuerdo para algunos es un buen augurio, no apacigua del todo las manifestaciones que comenzaron el 18 de octubre pasado y que develaron la grave crisis social.

De hecho , la noche del viernes 15 de noviembre se produjo la muerte del joven Abel Acuña, luego que nuevamente efectivos de fuerzas especiales de carabineros cometieran graves errores en el procedimiento policial generando retraso en la atención del joven que finalmente falleció en el Hospital de Urgencias de la Asistencia Pública, ex Posta Central.

El  Dr. Hernán Neira, académico del Departamento de Filosofía, reflexionó que “el reciente acuerdo es positivo. Lo que viene es generar en común los valores, fines y distribución del poder. Sin embargo, el quórum de 2/3 para la toma de decisiones en la convención constituyente y lo extenso de los plazos son un potencial riesgo político del reciente pacto”.

En cuanto a que si este acuerdo logrará legitimidad pese a  la desconfianza de la ciudadanía con la clase política, el académico respondió: “La sociedad añora una buena vida, no en competencia, sino en solidaridad con sus semejantes y con la naturaleza. Una nueva Constitución será sólida si da al Estado un rol activo en la protección del trabajo, de la educación, de la salud, de la diversidad étnica y del medio ambiente. Las universidades estatales podemos recuperar un papel relevante en una nueva carta magna”, señaló el académico.

Perspectiva Constitucional

El profesor Luis Bobadilla de la Escuela de Derecho, indicó que encuentra positivo este pacto, pero que ve con suspicacia sus efectos. “Veo este acuerdo con escepticismo y con distancia porque veremos en la práctica como esto se va a materializar y si realmente este acuerdo va a calmar los ánimos de la sociedad que está bastante trastocada”, opinó.

En cuanto a la discusión que se ha levantado por los 2/3 de quórum el experto señaló que “hay ciertos sectores que dirán que esto es malo y que no corresponde, pero la verdad es que me parece correcto, porque la Constitución es una norma que sostiene todo el ordenamiento jurídico del país y no puede ser fruto de mayorías circunstanciales”. 

El profesor Bobadilla sumó a sus comentarios que “negar y rebatir el argumento de los 2/3 respecto al quórum sería condenar esta iniciativa constituyente a la ilegitimidad (…) Si no hubiera un quórum de 2/3 también esta Constitución nacería con pecado de origen”, precisó.

Consultado sobre la comentada hoja en blanco, el académico indicó que “si uno revisa este acuerdo en ninguna parte se habla de aquello, pero entiendo que el concepto que va detrás de esto hace referencia a que se empieza a discutir una nueva Constitución y no una modificación de la actual, lo que hace es abrir y ampliar la discusión”.

Finalmente indicó que este proceso no estará exento de problemas “personalmente no estoy de acuerdo y encuentro irreal e ingenuo que una Constitución puede ser la casa de todos. Créanme que en todo pacto siempre habrá alguien que se sienta no representado o perjudicado en diferente intensidad”, concluyó.

Legitimidad en Espera

Alberto Mayol, académico de la Facultad de Administración y Economía, manifestó que el acuerdo funcionó mejor de lo esperado, ya que logró una cierta convergencia en la negociación del acuerdo.

En este mismo punto, indicó que debe haber sido muy complejo aunar posturas tan disímiles. “No es menor que la UDI, el partido de Jaime Guzmán y bastión de la Constitución del 80, esté dentro del acuerdo y en eso se tomó una decisión, que puede ser discutida o no, pero que es una decisión política que le da una solidez al acuerdo”.

Sin embargo, criticó el acuerdo en su punto 4 que señala la utilización del mismo sistema electoral que elige a los diputados, y que ahora escogerá a los constituyentes, calificándolo como una “picantería, algo impropio e inadecuado porque se entiende que la idea es que los constituyentes puedan ser personas comunes y corrientes y que se postulen a partir de los electores que pudieran ir conquistando por sus territorios. Pensar un símil de Cámara de Diputados para este proceso, con lo que significa hoy el Congreso, es un error gigante”,  señaló el  académico.

Agitación ciudadana

La Dra. Lucía Dammert, académica de la Facultad de Humanidades, señaló sentir que este acuerdo es un paso significativo, pero que sin embargo se requiere de la otra parte del proceso que es la Agenda Social y sus políticas públicas profundas que “son bastante más inmediatas que el proceso constituyente. En ese sentido, me imagino que habrá una vigilancia ciudadana para ver qué pasa con ella y los cambios de política pública”.

Además agregó, “pensar que esto desactive inmediatamente la movilización social, sería ingenuo, pero evidentemente abre una puerta de conversación y diálogo que permitirá por lo menos mejorar la falta de diálogo, pero esto está por verse en los desafíos y oportunidades que plantean esta situación”, dijo.

Con el foco puesto en el despertar de Chile se inició Cumbre de los Pueblos

Con el foco puesto en el despertar de Chile se inició Cumbre de los Pueblos

Desde ayer  y hasta el 16 de noviembre se realiza en nuestra Universidad La Cumbre de los Pueblos, evento que reúne a más de 100 organizaciones sociales y territoriales. El evento  pretende ser un espacio abierto para la reflexión que busca movilizar y construir una nueva fuerza social global como alternativa al modelo actual de producción y consumo.

En este primer hito, las organizaciones reunidas en la Cumbre han decidido poner todas sus energías “al servicio del despertar de Chile y el proceso iniciado de recuperación de su dignidad”.

La Vicerrectora de Vinculación con el Medio de nuestro Plantel, Dra. Karina Arias, se manifestó muy satisfecha porque la U. de Santiago es la sede de este encuentro, porque “el mandato de una Universidad pública y estatal tiene que ver con instancias, que nos permitan pensar el país de manera colectiva y pertinente a lo que está actualmente ocurriendo en Chile”.

El movimiento social ha generado la revisión de la sociedad y también lo ha sido para los centros de estudios. “Esto ha sido una bofetada para ver qué estamos investigando y cuán conectada está esa investigación con las respuestas que necesita el país”, indicó la Vicerrectora Arias.

Agregó que esta experiencia la hace pensar en que a futuro seguirán las colaboraciones entre la Usach y esta iniciativa.“Siento que la Universidad de Santiago no es solo un espacio para dialogar y reflexionar en estos momentos, sino que pueda ser parte de lo que llamamos la Cumbre de los Pueblos” afirmó.

En la inauguración del evento se hizo mención al primer aniversario del asesinato del comunero mapuche Camilo Catrillanca y se rindió homenaje a luchadores y luchadoras socio-ambientales. Igualmente, se dedicaron palabras de fraternidad  para todas las víctimas de crímenes, mutilación o tortura por parte del Estado chileno en las últimas semanas.

En el acto artístico de apertura participaron la Banda López (Álvaro y Gonzalo López, ex integrantes de Los Bunkers) el reconocido trovador Pancho Villa y Paola Jara.

 La Cumbre

Esta instancia de participación ciudadana se realizaría en paralelo y en oposición al Foro APEC y la Conferencia de las Naciones Unidas para el Cambio Climática (COP25), ambas suspendidas producto de las movilizaciones sociales que llevan cerca de un mes en nuestro país.

Los organizadores resaltaron el hecho que la Cumbre se haya mantenido pese a la cancelación en Chile de estos eventos planetarios, indicando que son “dos hitos que marcan una trayectoria y un proceso de diálogo, discusiones, confrontación de ideas y propuestas que finalmente determinan que la Cumbre de los Pueblos permanece como una señal más de la nueva conciencia que tiene que surgir de esta crisis”.

Asimismo, indicaron que esperan que este primer hito, al igual que el próximo a realizar en el mes de diciembre “sea un espacio de debate, de compartir ideas y experiencias, de imaginar y proyectar paradigmas y modelos alternativos de organización de la sociedad, de nuestra relación e integración con la naturaleza y su reconocimiento como sujeto de derechos para articular nuestras demandas  en la construcción de una nación plurinacional”.

Entre las actividades mencionaron  las efectuadas el día de ayer: taller de geopolítica y cambio climático; conversatorio Asamblea Constituyente: ¿TPP-11 y TLCs blindaje neoliberal? y el encuentro de apoyo a la minga indígena.

Hoy se desarrollará el cabildo por el Agua; el taller Asamblea Constituyente; conversatorio Constitución Política de Chile y sus implicancias económicas en la vida; además de  la ponencia sobre el momento populista en nuestra América.

Finalmente el sábado 16 de noviembre se efectuarán tres cabildos con diferentes temáticas: campesino, socio-ambiental y de niñez.

U. de Santiago suma a dos destacados expertos a la reflexión junto a la comunidad universitaria

U. de Santiago suma a dos destacados expertos a la reflexión junto a la comunidad universitaria

Este miércoles se realizó la Segunda Jornada de Construcción de Propuestas para el País, convocada por la Universidad de Santiago de Chile, en el marco del estallido social que enfrenta la nación.
En el Aula Magna se reunieron integrantes de todos los estamentos del Plantel para profundizar en planteamientos de la primera jornada e integrar a más participantes en la elaboración colectiva.

Es así como en esta ocasión se sumaron dos expertos a la reflexión de la comunidad universitaria. Se trata del economista y Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2005, Ricardo Ffrench-Davis, y el abogado constitucionalista, Jaime Bassa, quienes abordaron el modelo económico y el marco constitucional de Chile, respectivamente.

El Rector de la Universidad de Santiago, Dr. Juan Manuel Zolezzi Cid, señaló que ambos temas son “extremadamente relevantes en el actual momento social, donde la desigualdad e inequidades acumuladas por tantos años, han levantado reivindicaciones por una mayor justicia social”.

Como Universidad estatal y pública, agregó la máxima autoridad de la Usach, “nuestro rol es generar y transmitir conocimiento, formando a los jóvenes comprometidos con su país, de manera tal de incidir tanto en el debate común, como en las políticas públicas para contribuir en una sociedad más democrática, justa  e igualitaria y que pueda responder con excelencia a los desafíos globales del siglo XXI”.

Los expertos

El Premio Nacional de Humanidades, Dr. Ricardo Ffrench-Davis, realizó un recorrido por el crecimiento económico de nuestro país desde la dictadura hasta ahora. De acuerdo al académico, el sistema tributario en Europa establece una carga impostiva de un 40%, mientras que en Chile solo llega al 20%.

Para el Dr. Ffrench-Davis, el país puede desarrollar un crecimiento sostenible con paz social. El economista planteó que se requiere una política de desarrollo productivo, donde se puedan fortalecer las Pymes y dar un incentivo a la inversión e innovación. 

En tanto, el abogado constitucionalista, Dr. Jaime Bassa, abordó el estallido social desde la perspectiva de los Derechos Humanos. “Lo que vemos hoy en las calles, es una manifestación política donde se levantan demandas sociales insatisfechas de los últimos 30 años: educación, nacionalización del agua, no más AFP, salud, etc; demandas que apuntan directamente al desarrollo social”, indicó.

De acuerdo al académico de la Universidad de Valparaíso, la represión ejercida por las Fuerzas Armadas, y de Orden y Seguridad ha sido grave. El  Dr. Bassa aseguró que estas han pasado a llevar los derechos constitucionales de las personas, calificando algunas detenciones y retenciones como ilegales.

Por último, el abogado puntualizó que es urgente convocar a una Asamblea Constituyente para cambiar la Constitución.

Ambos expertos interactuaron con los asistentes, en un conversatorio moderado por la Vicerrectora de Vinculación con el Medio, Dra. Karina Arias Yurisch.

“El escenario más favorable sería que la sociedad organizada obligue a hacer cambios más profundos”

“El escenario más favorable sería que la sociedad organizada obligue a hacer cambios más profundos”

“América Latina siempre ha sido un continente desigual en donde la mayoría de la población vive en la pobreza y Chile no es una excepción”, con esta frase el Dr. Julio Pinto, académico de nuestra Universidad y Premio Nacional de Historia 2016, inició su análisis sobre la crisis social que hoy enfrenta nuestro país.

El académico agregó que el principio del conflicto se basa en una máxima: “No es lo mismo pobreza que desigualdad. Un país puede ser uniformemente pobre sin ser necesariamente desigual, como el caso de Haití, en donde existen índices de pobreza altos, pero no hay tanta desigualdad como en Chile. Acá el ingreso está muy mal distribuido y eso no se ha corregido, todo por el contrario ha tendido a avanzar”, explicó.

Históricamente la desigualdad ha sido el problema

¿Cuáles son las decisiones políticas que generan esta desigualdad en términos de ingresos?

Un sistema económico entregado exclusivamente a las fuerzas del mercado, tiende a profundizar las desigualdades y eso está demostrado científicamente. Para evitar que una economía de mercado produzca ese efecto, tiene que haber una intervención que solo puede ser realizada por el Estado, que como representante de la comunidad tiene que hacer esa redistribución parcial de la riqueza para que no existan brechas tan grandes entre los que más tienen y los que menos.

¿Pueden compararse la Revolución de la Chaucha de 1949 y la Batalla de Santiago en 1957, con lo que en la actualidad ocurre en nuestro país?

Chile, contrariamente de lo que se piensa, ha tenido una historia vinculada a los estallidos sociales y casi todos motivados por malestares relacionados a la pobreza y la desigualdad. En 1888 hubo un motín urbano por alza del transporte público, donde la población se reveló con expresiones de violencia muy parecidas a las hoy. La revuelta de la Chaucha y el motín de Santiago, también tienen esa particularidad. Lo de hoy no es excepcional, pero si algo que nos muestra que no somos un país tan estable, armónico y satisfecho como lo creíamos.

La ciudadanía está pidiendo una nueva carta magna, en este contexto  ¿se puede decir que es la Constitución del 80  la que sienta las bases de todo el conflicto actual?

No lo es en sí misma, pero sí lo es como expresión de un modelo de convivencia económica y social. La Constitución del 80 lo que hace es sacralizar en Chile un modo de organizarnos como sociedad, donde el “mercado” toma las grandes decisiones y el Estado solo tiene un papel secundario. Entonces, si estamos hablando de cambiar el modelo económico y social en forma significativa, tenemos que cambiar la Constitución. Es por esto que los partidarios del modelo y de la dictadura la defienden tanto; es la llave maestra que hace que todo funcione.

Fenómenos sociales y estrategias

En este sentido, ¿Qué fenómeno social ha podido observar en estos días de estallido social?

La sociedad se ha repolitizado, ha asumido el rol que le corresponde en el debate público y cualquier cambio para bien implica que eso se prolongue en el tiempo y no que acabe cuando terminen las marchas.

El Presidente Piñera está apostando a la estrategia que utilizó Macron en Francia con los chalecos amarillos, ¿Se corre el mismo peligro al dejar en manos de cabildos no vinculantes las demandas de la ciudadanía?

Hay que partir de la base que el Gobierno no quiere que se hagan cambios estructurales en el modelo económico y social. A pesar que el Gobierno se manifiesta como una derecha democrática, cuando se sienten amenazados su reflejo automático es sacar a los militares a la calle. En cuanto a los cabildos, nacen espontáneamente desde la sociedad y qué hace el Gobierno, tratar de apoderarse de la iniciativa. Hay que tener claro que ellos siempre harán lo imposible por defender las bases del modelo y solo van a ceder ante la presión social.

¿Usted tiene confianza en lo que pueda conseguir este movimiento social?

Tenemos que tener claro que no se va a conseguir todo. El Estado de Bienestar europeo surge a raíz de protestas sociales que finalmente desembocan en un Pacto Social, en donde los sindicatos, las organizaciones sociales dicen vamos aceptar seguir viviendo en el capitalismo, pero a cambio de concesiones reales en salarios, previsión, educación y más. Insisto en que este sería el escenario más favorable en donde la sociedad organizada obligue al Gobierno a hacer cambios un poco más profundos.

Durante la semana se ha escuchado la posibilidad de realizar paros nacionales, ¿Qué rol podrían jugar en este proceso político que estamos viviendo?

Los paros son una forma de presión social cuando realmente los sindicatos tienen mucha fuerza. El problema en Chile es que estamos hablando de una fuerza laboral atomizada y precarizada. Ahora, si sectores económicos estratégicos (cobre, petróleo, portuarios) se sumaran al paro su efecto sería mayor, pero estamos hablando de trabajadores que provienen de sectores que presentan mayores ingresos, entonces ahí se requeriría un mayor compromiso político de parte de esos actores y que no siempre lo tienen.

Escenarios posibles

¿Se podría diluir el movimiento social al no tener un interlocutor específico?

Dependerá de las decisiones que se tomen y de las movidas que cada actor social realice. El escenario más duro sería que el Gobierno vuelva a decretar un estado de emergencia y desate una ola represiva mayor de la que ya vimos y eso aún es latente. Un segundo escenario, que creo es a lo que está apuntando el Gobierno, es el del desgaste. La idea sería realizar concesiones menores, a medida que el movimiento se debilita, el resto queda aislado y finalmente se disipan solos.

Y ¿cómo concebiría  los otros escenarios?

Otro del que no soy muy optimista, es que la oposición aproveche este contexto para recuperar su condición de legítimo portavoz de los sectores que están descontentos con el sistema y que fuercen al Gobierno a realizar concesiones más de fondo. Finalmente, el escenario que sea la Mesa de Unidad Social, la que asuma el papel de interlocución y conducción de este proceso y que llegue a cambios más de fondo, creo que sería el escenario más favorable.

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