El Centro de Estudios en Ciencias y Tecnología de los Alimentos (Cecta) logró acreditarse por otros cinco años en materia de análisis para las áreas de alimentación humana y animal.
Su director, Dr. Claudio Martínez, explicó que esta certificación internacional es a través de la norma 17.025. “Es una política del Cecta trabajar bajo estándares de alta calidad y por lo tanto es muy relevante ya que se logra mantener por tercera ocasión consecutiva, desde el año 2013”, expresó.
La visita inspectiva del Instituto de Normalización Nacional (INN) se prolongó por espacio de tres días donde los profesionales evaluaron rigurosamente aspectos prácticos de los análisis y también desde el punto de vista administrativo todo lo relacionado con la documentación pertinente, que debe estar acorde con los estándares que esta norma exige.
El Dr. Martínez destacó el plan de capacitación anual que se realiza en la Institución con el apoyo de la Universidad y también de forma autónoma, lo que permite contar con un personal perfeccionándose permanentemente con el fin de lograr estas metas.
“Esta acreditación es un logro de los profesionales del Cecta, lo que hace que nuestra Casa de Estudios pueda sentirse orgullosa de este Centro y del impacto que puede tener en el medio externo”, remarcó su director.
Lina Yáñez, coordinadora de asistencia técnica, explicó que esta tercera renovación fue especialmente difícil porque tuvo modificaciones previas. “Tuvimos que superar una auditoria para comprobar que habíamos adoptado todos los cambios de la nueva norma, que si bien mantiene su número, tiene versión 2018. Esto implicó una serie de ajustes a los procedimientos; adaptar registros y condiciones de trabajo previo a la auditoría, lo que permitió superar las dos instancias”.
El Cecta realiza análisis relacionados con el etiquetado nutricional y en la parte microbiológica con el cumplimiento del reglamento sanitario de los alimentos. También trabajan con investigadores de otras universidades que no tienen capacidades instaladas para hacer sus análisis, principalmente perfiles de aminoácidos y de ácidos grasos.
Otra línea de las colaboraciones que realiza el Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de los Alimentos es con empresas que trabajan con quitosanos haciendo el control de calidad de sus productos.
Efecto pandemia
El Centro cuenta con modernos laboratorios debidamente equipados, que permiten el desarrollo de proyectos, y laboratorios dedicados a la asistencia técnica y transferencia tecnológica. De esta forma, la investigación cuenta con los canales adecuados para trasladar estos avances a empresas comerciales e instituciones públicas y privadas.
Sus laboratorios de investigación abarcan una amplia gama de objetos de estudio sobre alimentos. El trabajo en Microbiología, Análisis Físico-Químicos y Cromatografía atiende la demanda de empresas manufactureras, procesadoras de servicios del área de alimentos.
El director del Cecta, recordó que durante los años de pandemia este centro tuvo que cerrar sus puertas. Sin embargo, fue uno de los primeros laboratorios que se abrió en la Universidad.
“La pandemia significó un duro perjuicio al funcionamiento y también a la forma de financiarnos, ya que dependemos de los análisis que hacemos. No obstante, logramos superar ese momento y hoy estamos recuperando satisfactoriamente nuestras actividades a nivel de lo que hacíamos prepandemia. Es destacable el espíritu del grupo humano que logró reponerse ante la adversidad y lograr la acreditación”, concluyó la autoridad.