Javiera Contreras, Caterina Martínez y Fernanda Guerrero estudiantes de cuarto año de Kinesiología de la Facultad, obtuvieron el segundo lugar en la exposición pósters en el marco del III Congreso de Kinesiología, que convocó a profesionales de distintas casas de estudios superiores de todo el país y que fue organizado por la Universidad Católica del Maule en noviembre de este año. Su trabajo se titula “Estudio de correlación entre la capacidad física y cognitiva en personas mayores del CESFAM Santa Anselma”, de La Cisterna.
La investigación corresponde al proyecto de tesis de las estudiantes y buscó demostrar la relación entre capacidad física y cognitiva en población geriátrica, a través de la implementación del test de MoCA (Test Cognitivo de Montreal), diseñado para medir las habilidades de memoria, lenguaje y orientación de las personas, además de una interfaz de realidad virtual basada en el laberinto de Morris (conocido por su aplicación original en roedores), que evaluó la navegación espacial de las personas que se sometieron a las pruebas.
Motivadas por la creciente población de personas mayores en el país, el grupo aplicó dichas herramientas a 133 usuarios y usuarias del centro de atención primaria. Según cuenta Fernanda Guerrero, la investigación descubrió que un 43 por ciento de las personas evaluadas presentaban un grado de deterioro cognitivo leve. “Lo anterior llamó nuestra atención, ya que descubrimos un porcentaje mayor al reportado a nivel nacional, el cual bordea el 15 o 20 por ciento. Es decir, nosotros encontramos el doble”, destacó la tesista.
La futura kinesióloga también hizo hincapié en que las herramientas utilizadas en la medición, específicamente el MoCA, no está incluido en los exámenes de medicina preventiva para personas mayores que se llevan a cabo en el sistema público de salud, incluso aun cuando dicha prueba ha mostrado ser más eficiente al momento de dar cuenta de niveles de deterioro cognitivo en su etapa leve.
Para Guerrero, la importancia de la detección temprana radica en que aquella condición puede ser la etapa previa al desarrollo de patologías como el Alzheimer. Lo anterior “nos permite hallar el problema lo antes posible, trabajarlo y evitar que progrese a esta condición, la cual afecta a la persona en su vida personal y a todo el círculo que le rodea, sumado también a los costos de salud en el sistema público que se atribuyen al tratamiento de estas enfermedades”.
De acuerdo con Javier Silva, académico de nuestra Escuela de Kinesiología y profesor guía de las tesistas, la participación de estudiantado en instancias como el III Congreso de Kinesiología de la UCM impacta de manera positiva en la formación académica, permitiendo que se reconozcan como profesionales y construyan redes con sus pares. Además, “buscamos que tengan una sólida base científica y que sean capaces de generar investigación, aplicando sus conocimientos en un área de interés, identificar una problemática, y desarrollarla, esperando que impacte en la población” agregó el docente.
Silva aseveró que las estudiantes presentarán su estudio a la Dirección de Salud de La Cisterna, como también una estrategia para “implementar mayores evaluaciones en las pruebas rutinarias de las personas mayores y así identificar los deterioros cognitivos, permitiendo que sean capaces de intervenir a tiempo a en dicha población”.