- Su madre quería que fuese bailarina de ballet, pero ella se rebeló y hoy compite con éxito en levantamiento de pesas. De hecho, obtuvo medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015. Su inicio en esta especialidad deportiva estuvo lleno de tropiezos, pero se obsesionó y logró dominar la técnica. Esta forma de enfrentar los desafíos fue lo que motivó a los estudiantes de Ingeniería Civil Eléctrica de nuestro Plantel para invitar a María Fernanda Valdés a ofrecer la charla "Hala y desplaza, levantando la gloria".
La rebeldía y la obsesión podría ser un defecto para muchos, pero para la actual medalla de plata en levantamiento de pesas de los Juegos Panamericanos de Toronto de este año, María Fernanda Valdés Paris, fueron los atributos que lograron llevarla al éxito.
Es así como contó a estudiantes de Ingeniería Civil Eléctrica de nuestra Universidad en la Charla "Hala y desplaza, levantando la gloria", que esas dos características que están al comienzo de estas líneas son las que la llevaron a conseguir sus logros, sumando a eso la constancia.
“Soy demasiada obsesiva, si me equivoco insisto, si puedo hacer algo a las tres de la mañana lo voy hacer, si se me mete algo en la cabeza nadie me lo va a sacar hasta que lo concrete”, con esas palabras, la actual medalla de plata en levantamiento de pesas de los Juegos Panamericanos de Toronto de este año, María Fernanda Valdés Paris, expresó a estudiantes de Ingeniería Civil Eléctrica de nuestra Universidad en la Charla "Hala y desplaza, levantando la gloria", cómo ha logrado conseguir los triunfos que ha obtenido a lo largo de sus 23 años.
Luego, agregó a los que estaban en la actividad que “nunca deben dejar que les digan que no a algo que quieren, porque es ahí cuando deben hacer lo que tienen planeado. En mi caso mi mamá quería que yo bailara ballet y terminé levantando pesas, entonces la rebeldía me llevó al éxito”.
La medallista en halterofilia, categoría 75 kilos, afirmó que la constancia también ayudó a lograr todo lo que ha obtenido, por lo mismo dijo que “lo que se me pone en mi pensamiento lo termino cumpliendo, ya que es lo que quiero”.
Respecto a su carrera deportiva, ella colocó énfasis en que “no me considero una profesional, debido a que lo que hago no me lo tomo como una profesión, debido a que es algo que lo realizo como un juego, ya que me gusta. Si fuera de la otra manera se me volvería demasiado estricto y no quiero que sea así. De esa forma yo no me estreso, ya que no me tomo las cosas tan en serio”.
También considera que los sueños no existen ya que son siempre alcanzables, por eso “si se tiene la fe de lo que uno quiere se puede lograr, por eso no hay que rendirse para llegar a lo que uno quiere, la vida muchas veces cierra una puerta pero abre otra, el éxito está en caer y volver a levantarse”, dijo.
Inicios
El camino al éxito lo comenzó a los 14 años, cuando su padre le expresó en pleno verano que “no quiero que estén echadas en la casa, así que partan si quieren a las ocho de mañana al gimnasio y luego están acostada todo el día si quieren”.
“Así fue que comencé todos los días a ir al GYM que estaba al frente del negocio de mi papá, ahí estaba el entrenador Rodrigo Callejas, que justamente hacia levantamiento de pesas, donde estaba a cargo de un grupo de niñitas a las que me sume. Empecé hacer rutinas de bicicletas y después estuve tres meses con una escoba para aprender la técnica, para luego hacer 45 kilos de barra. De ahí se empezó a ver resultados inmediatos”, explicó.
Luego, Valdés indicó que “a los 16 años comencé a ir a distintos campeonatos y los ganaba, entonces se empezaron a dar cuenta que servía para esto. A la edad de 17 me llaman a la selección para participar, y así se inició todo, donde me tuve que venir de La Serena para venir a vivir a Santiago, específicamente al Centro de Alto Rendimiento (CAR)”.
Dificultades en el camino
El camino al éxito no ha estado exento de problemas, es así que su entrenador cubano, Luís López (el mismo que encumbró a Cristián Escalante a los triunfos), dejó la selección nacional de levantamiento de pesas y se radicó en Brasil.
“Él, aparte de ser mi entrenador, es mi amigo, mi psicólogo, mi nutricionista, es todo, él sabe lo que me pasa siempre, es la única persona que me deja callada. Hizo un cambio positivo en mí, donde logre confianza, personalidad, y pude mejorar mi nivel deportivo, por lo mismo me fui a vivir a Brasil, para seguir entrenando con él”.
Problemas del deporte
Nuestra atleta, también se refirió al gran problema que tiene el deporte en Chile. Relata que este pasa porque los atletas no cuentan con un guía permanente que les permita dar una orientación adecuada. Además, manifestó que la necesidad es lo que provoca que una persona se mueva para conseguir los objetivos que se propone desde un principio.
“Cuando un niño de región llega a vivir al CAR es complicado, ya que nadie lo manda y termina haciendo lo que quiere, donde muchas veces se pierde en su rumbo y lamentablemente es lo que ha pasado con mucho atletas de este país”, enfatizó.
“La necesidad hace a los grandes deportistas, y eso es lo que ha llevado a los cubanos, por ejemplo, a conseguir grandes cosas. Ellos, a diferencia de lo que ocurre aquí, no le dan las cosas regaladas, cualquier implemento deportivo como una zapatilla les cuesta. En cambio acá lo entregan como si nada. Eso incide en que nuestros deportistas no se esfuercen”, puntualizó.
La actividad
El acto se desarrolló como parte de la cátedra Técnicas de Emprendimiento de la carrera de Ingeniería Civil Eléctrica del Plantel a cargo de la profesora Nieves Hernández, y lo organizaron los mismos estudiantes de dicho ramo.