- La U. de Santiago acaba de asumir la administración delegada de los liceos industriales de Angol y de Nueva Imperial, hecho que “nos da la posibilidad de mostrar que la responsabilidad social no solamente se vive en Santiago o sus alrededores”, aseguró Jorge Torres, administrador de los cuatro liceos que tiene a su cargo el Plantel.
El 2013 empieza con una muy buena noticia para la U. de Santiago y una silenciosa pero activa labor que lleva a cabo hace ya 19 años, cuando asumió el desafío de tomar la administración delegada del Liceo Industrial Pedro Aguirre Cerda, de Rancagua. Y es que al ya emblemático establecimiento de la Región de O’Higgins, administrado por esta Institución estatal y pública desde el año 1994, y el Instituto Femenino Superior de Comercio (Infesuco) Eliodoro Domínguez, desde el 2012, ahora se suman los Liceos Industrial de Angol y de Nueva Imperial.
El secretario ejecutivo del Departamento de Educación Técnico Profesional del Mineduc, Alejandro Weinstein, informó que la adjudicación de ambos liceos es por cinco años y se explica porque, “definitivamente, la U. de Santiago ha hecho un buen trabajo tanto administrativa, como académicamente. Además, que hay un rol muy claro de la participación de dicho plantel en la educación técnica en el país. Creo que aquí hay una historia que se respeta”.
Según el representante ministerial, la experiencia que tiene la U. de Santiago ha quedado de manifiesto en los liceos de Rancagua y Santiago, donde “ha existido un aumento en las matrículas, buenos rendimientos académicos, buena vinculación con la industria y, además, han demostrado interés por participar en este proceso”. En la misma línea, Weinstein advierte: “La U. de Santiago hizo una nueva propuesta para administrar liceos y, como hemos tenido muy buena experiencia, les adjudicamos dos más”.
Para Jorge Torres, administrador de los Liceos Delegados, además de jefe de Gabinete de Rectoría, esta es una noticia “muy importante para la U. de Santiago, ya que nos permite mostrar que la responsabilidad social no solamente se vive en Santiago o sus alrededores”.
“Los liceos están en dos comunas muy emergentes. Uno en Angol y el otro en Nueva Imperial y eso nos da la posibilidad de tener un contacto directo con personas que son de sectores muy vulnerables”, plantea Torres.
Jorge Torres ya tiene planes que se deben concretar a la brevedad. Por ejemplo, el Liceo Industrial de Nueva Imperial deberá enfrentar este año la remodelación total de su edificio, hecho que si bien se plantea como una gran oportunidad, es también una dificultad extra, ya que habrá que reubicar a los 520 estudiantes; de ellos, 100 se encuentran bajo la modalidad internos.
Sin embargo, el administrador de la U. de Santiago se muestra esperanzado en que “con una buena gestión, con dedicación y, sobre todo, con el personal con el que cuenta la Universidad y que trabaja en este proyecto, vamos a hacer una linda labor”.
Gran desafío
Para Manuel Arrieta, coordinador de esta iniciativa en la U. de Santiago, además de vicerrector, que el Ministerio haya otorgado la administración de los dos liceos en La Araucanía, “es un acto de confianza”.
“Tenemos que tomarlo con mucho orgullo, porque están confiando en nosotros y en nuestro trabajo, donde la U. de Santiago ha dado muestras, en los últimos años, de hacer un trabajo muy responsable. Por otro lado, tenemos que insertarnos dentro de la geografía del país. Es un desafío de cómo desarrollamos nuestra Responsabilidad Social Universitaria para mejorar la educación”, aseguró Arrieta.
Por su parte, el coordinador pedagógico de la U. de Santiago para la administración delegada de liceos, Saúl Contreras, coincide en que el Ministerio ha valorado los esfuerzos realizados por la estatal y “da cuenta que la Universidad ha adquirido un prestigio asesorando a los liceos en términos técnicos, con el fin de mejorar sus resultados de aprendizajes”.
“Creo que la U. de Santiago posee un elemento que no tienen todas las universidades y que se relaciona con un tema de Responsabilidad Social, que se ha logrado implementar no sólo en el pre o post grado, sino que también lo ha incorporado con la educación formal de básica y media. Por lo tanto, la Universidad está preparada y éste es un reconocimiento se merece”, finalizó Contreras.