La Onemi declaró la semana pasada Alerta Temprana Preventiva por una ola de calor entre las regiones de Coquimbo y O’Higgins, que se traduciría en temperaturas que llegarían a los 37° C en algunos sectores.
Para enfrentar este caluroso escenario, la gerente técnica del Laboratorio de Investigación y Control de Calidad en Cueros y Textiles (LICTEX) de la Universidad de Santiago, María Neira, sostiene que lo primero es usar poleras o blusas de manga larga, con el objetivo de protegerse de la radiación UV. “Es una medida de salud e igualmente bloquea el calor, ya que es un freno a los rayos de calor”, explica.
En ese sentido, recomienda que las prendas que se utilicen sean poleras, camisas o blusas al menos una talla más ancha de lo habitual, ya que así se generan corrientes de aire que permiten una mejor ventilación de la piel. “Las corrientes de aire son el mejor aislante para el cuerpo”, indica. “La ropa apegada hace que haya más contacto con la humedad”, agrega.
Por otra parte, hace hincapié en que en el momento de elegir, se prefieran telas que en su composición presenten fibras naturales, como algodón o lino. “La ropa con 100% de fibra sintética no es recomendable, ya que absorbe el rayo infrarrojo, que es el que produce calor”, sostiene.
“Si uno está al sol con ropa sintética, lo más probable es que el cuerpo quede rojo, porque el calor que genera es alto”, explica. “La ropa sintética no absorbe mucho la humedad, lo que hace que la transpiración quede en el cuerpo y hace que uno ande transpirado”, complementa.
“Lo ideal es que nuestro cuerpo esté aislado, manteniendo el calor corporal. Manteniendo esa temperatura, no se sentirá calor ni frío”, concluye.