- Morín Contreras, Contadora Pública y Auditora titulada por nuestra Casa de Estudios, es la flamante Intendenta de la Región de O´Higgins, y la primera mujer en la historia regional que desempeña tan alto rol.
- Hoy, junto a otras múltiples tareas que le competen como autoridad regional, está dedicada a sentar las bases institucionales de la primera universidad pública para la zona. “Es uno de los desafíos que más me atrae y al que le he dedicado mucho tiempo”, dice con franqueza. Confidencia, además, que siente una gran responsabilidad con este cargo que le confiara la Presidenta Bachelet; por lo mismo, su gestión está marcada por el contacto directo con la ciudadanía.
Tenía 17 años cuando Morín Contreras Concha ingresa a la Universidad de Santiago. Corría por entonces el año 1989, pero desde mucho antes albergaba el sueño de convertirse en Contadora Pública y Auditora. Sería un salto significativo dentro de su familia, pues nunca antes uno de sus miembros había ingresado a la educación superior. Con aquella impronta no sorprende su versatilidad, ni que se prodigue con tanta generosidad a su trabajo, y menos que cada oportunidad que se le presenta en la vida la tome como si fuese la última.
Y aquella elección que transformaría a la postre a Morín Contreras en una dignísima representante de nuestra Casa de Estudios, tuvo un sólido fundamento. “Optar por la Universidad de Santiago fue pensando en que si bien llegaba a una facultad (Administración y Economía) en donde me iba a encontrar con una situación distinta a la mía en términos socioeconómicos, también estaba la certeza que la FAE brinda una oportunidad a todas las personas por igual, independiente de donde provengan”.
De sus días como estudiante, evoca el sabio sermón que uno de sus maestros le diera: “Recuerdo a un profesor que tuve en el primer año de universidad, que me marcó mucho en mi desempeño profesional, porque nos decía que íbamos a ser la elite de nuestro país. Hablaba que mi carrera, a diferencia de médicos o abogados, nos daba herramientas para saber de todo y para desempeñarnos en cualquier cosa, y yo soy el fiel reflejo de aquello”.En este contexto, confía:“Cuando estaba en el área de vivienda, ejerciendo la jefatura máxima, me decían “- ¿usted es arquitecto?”, no les decía yo. “-¿Constructor civil?”; no, les volvía a contestar. A mí me gustaba jugar a que adivinaran porque era “una gran sorpresa” que yo resultara ser Contador Público Auditor”.
Se tituló como Contadora Pública y Auditora por nuestra universidad en el año 1995. Partió su vida laboral trabajando como auditora externa en la consultora Ernst & Young. Se casó, y junto a su esposo, se mudó a la VI Región del país, lo que no fue fácil porque el desempleo en ese momento era alto y le costó insertarse laboralmente.
Producto de aquellas circunstancias, se consagró a la tarea de enseñar en Centros de Formación Técnica, en un ascendente camino que la llevó a asumir la cátedra de “Costos” en la Universidad Federico Santa María, a alumnos de la carrera de Ingeniería en Ejecución en Informática.
Una servidora pública
Su arribo al servicio público se produjo en el año 1999 como auditora interna en el Servicio de Vivienda y Urbanización. Cumplió esa labor por año y medio hasta que fue promovida a la Jefatura de Programación y Control en la misma repartición pública. En dicho cargo supervisó la ejecución del programa de inversiones regionales que bordeaba los 30 mil millones de pesos. “Eran proyectos de índole social relacionados con calles, avenidas, casas, subsidios y parques”, explica la hoy intendenta regional. En el año 2006, después de siete años de impecable cometido, asumió como directora del SERVIU. No duró mucho en aquel menester, pues en cuestión de meses fue designada como secretaria regional ministerial de Vivienda para la Región de O´Higgins.
En el marco de su postulación al SERVIU, Morín Contreras se da cuenta que el servicio público era lo suyo.“Entre la docencia y el servicio público estaban mis vocaciones”, -declara mientras en tono franco añade- “era donde además de dar sustento a mi familia, podía ser un aporte”. Desde ese momento, tomó la firme decisión de ser una funcionaria pública, a pesar de las desventajas que aquello pudiese ocasionarle.
Con la llegada de Sebastián Piñera a la Presidencia de la República el año 2010, quienes ocupaban cargos de confianza en la administración anterior, fueron reemplazados por nuevas autoridades que sintonizaban plenamente con los lineamientos del gobierno entrante. Sin embargo, pese a la destitución, la vocación que Morín Contreras poseía por el servicio público se mantuvo incólume.Se integra a la Municipalidad de Malloa- Sexta Región- donde asume como máxima autoridad de la Dirección de Desarrollo Comunitario, Dideco.
Morín Contreras explica que su nuevo cargo constituía “la puerta de entrada para las grandes demandas de las personas de la comuna” y agrega que algunas de sus responsabilidades estaban asociadas, entre otras cosas, a “atender a las personas respecto a sus fichas de previsión social, subsidios de agua potable y becas”. “Incluso, estuvieron a mi cargo los jardines infantiles de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, Junji”, remata, casi a modo de colofón, intentando ilustrar que pese a su menuda contextura posee una fuerza interior capaz de asumir cualquier tarea y tomar con firmeza las decisiones que correspondan.
En el albor del año 2014, Morín Contreras -a esas alturas Administradora Municipal de la comuna de Malloa- recibe una llamada telefónica que hasta el día de hoy, la sigue sorprendiendo, pues al otro lado del hilo telefónico se encontraba la recién electa presidenta de la República, Michelle Bachelet Jeria, quien la invitaba a asumir el desafío de ser la máxima autoridad regional.
“A la Presidenta sólo la conocía por mi desempeño anterior como SEREMI, lo que significa que hay hartos escalones jerárquicos entre medio”, precisa Morín Contreras y confiesa que si bien guardaba cierta esperanza respecto a su nombramiento, siempre fue mesurada. “Un parlamentario de mi partido (Socialista) me propuso en una terna, tal como lo hizo cada uno de la Nueva Mayoría, por eso me asombró el llamado de la Presidenta”, concluye.
La igualdad entre los géneros, es tal vez uno de los asuntos más relevantes para la sociedad chilena, entendiéndola como un derecho humano elemental. En este sentido, la Intendenta Contreras es un fiel reflejo en relación a los esfuerzos que desde la Administración Pública se hacen al respecto. La primera mujer en ocupar el cargo en la Región de O´Higgins, comenta que desde que ingresara al servicio público la idea de igualdad de género comienza a crecer. En esta línea rememora que “cuando la Presidenta Bachelet asume en su periodo anterior, había un compromiso de generar paridad al interior de los cargos públicos”.
Pero aún cuando existe sensibilidad en materia de igualdad de género, hay sólo tres intendentas a nivel nacional (en las regiones de Coquimbo, O´Higgins y Aysén) empero Morín Contreras no se amilana, sino que le otorga un valor simbólico – e incluso histórico- a su designación. “Mi Región es una zona minera y agrícola, es decir están presentes las dos actividades económicas más machistas existentes en el país”. Y es más, todo lo asume como un gran reto profesional. “Me lo tomo como un desafío especial, con un trabajo más arduo, porque lo queramos o no, a la mujer se le mira desde cómo se viste hasta cómo habla”. Por ello “es un doble esfuerzo, pero hoy la ciudadanía está en condiciones de entender y valorar que las mujeres estamos abriendo caminos a este concepto de generar oportunidades, y que ahí está la base”, puntualiza convencida.
Universidad Pública para la Región
Es quizás el proyecto más relevante que el gobierno de Michelle Bachelet tiene contemplado para la Región de O´Higgins: la creación de una universidad pública. En la ardua labor de establecer las bases que regirán la futura institución, se encuentra la Intendenta Contreras. “Es uno de los desafíos que me atrae más y al que le he dedicado mucho tiempo”, afirma con franqueza. “Estamos frente a una impronta puesta por la Presidenta que es inédita. Las únicas creadas por fuerza de ley son las universidades de Chile, de Santiago y Tecnológica Metropolitana (UTEM)”, ejemplifica respecto a la envergadura del proyecto en cierne. Pese a las dificultades, la seriedad con que ha asumido el enorme desafío, ha logrado convencer a los más incrédulos. “Todo el mundo académico tenía los ojos puestos sobre el proyecto, primero con escepticismo, porque no creíamos que esto iba a funcionar. Cuando nos organizamos y generamos la metodología para crear un buen trabajo, me sorprendió como aquellos mismos académicos pasaron a ser parte de este proceso”, explica.
Hace un mes se conformó una comisión, cuya función es canalizar lo que la ciudadanía visualiza como una universidad que represente los valores y vínculos con la zona. Para Morín Contreras, este ejercicio es fundamental porque “da muestra de la realidad regional, mirando al país y al mundo pero desde nuestra propia identidad”.
La máxima autoridad regional, sin ocultar su entusiasmo por la iniciativa presidencial, agrega que “son las personas que aquí viven, quienes deberían dar su opinión y nosotros sistematizarlas y transformarlas en un cuerpo que permita generar esta universidad, sentando así sus bases”. Además, adelanta que hasta el momento “lo que hemos conversado con los diversos actores, y que se visualiza como una línea avanzada, es que esta universidad debiera tener como principal eje el desarrollo, la investigación y el emprendimiento”.
Hasta el momento, en base a lo que la comunidad ha señalado, las autoridades vislumbran la futura institución de educación superior, como una serie de institutos multidisciplinarios con carreras entrelazadas. Asimismo, tomando las características constitutivas de la Región O´Higgins, “estamos pensando que esta universidad regional debiera contemplar tanto el ámbito agrario, como oceánico”, comenta la Intendenta Contreras y añade que hoy “la comunidad trabaja para definir la misión de la institución”.
Descentralizar el país
El 7 de abril pasado, la Presidenta de la República Michelle Bachelet, convocó a una serie de representantes del mundo político, social y económico para conformar una comisión cuya labor es desarrollar un plan estratégico, con miras a la descentralización del país. En este sentido, la Intendenta Morín Contreras piensa que hay un esfuerzo consistente por potenciar el progreso regional y que la creación de una universidad en su zona, es un claro reflejo de aquello.
La intendenta regional se ha impuesto una serie de desafíos. Destaca su intención de convertir a la Región de O´Higgins en potencia agroalimentaria. Al respecto afirma que “queremos serlo, porque tenemos tierras que son fértiles y somos grandes exportadores de vino y de aceite de oliva”. Además, a través de un convenio suscrito con el Estado de Delaware (Estados Unidos), la autoridad pretende dar un impulso a los horticultores de la zona, quienes “en los en los últimos 20 años han tenido el mismo nivel de producción y exportación de sus productos, de allí que – a través del acuerdo con el Estado norteamericano- estamos recibiendo asesoría técnica, trasferencia tecnológica y experiencia en términos humanos para optimizar la producción las hortalizas”, aclara. En esta línea, precisa que “una delegación regional irá a fines de este mes a Delaware y en octubre vienes hasta acá una de expertos norteamericanos, con el objeto de observar nuestra realidad y generar un programa de trabajo para que los pequeños y medianos agricultores de hortalizas empiecen a crecer en calidad”. “La idea -enfatiza Contreras- es enseñarles técnicas que mejoren, por ejemplo, el cumplimiento de normativas, el manejo de plaguicidas”.
La salud también está dentro de las urgencias de la intendenta. Cabe recordar que unos 84 mil millones de pesos invirtió el Estado en la Construcción del que se suponía sería el recinto de salud más moderno de Latinoamérica. El nuevo Hospital Regional de Rancagua, debió ser inaugurado durante julio del año 2012, pero se encuentra aún en etapa de construcción. Una serie de acusaciones de corrupción que incriminan a las autoridades de salud de la zona durante el gobierno de Sebastián Piñera, ensombrecen al coloso de más de 98 mil metros cuadrados. Pese al incierto panorama, Morín Contreras no renuncia a un viejo anhelo: un hospital psiquiátrico. En este sentido explica que existe una clara necesidad de fortalecer la atención psiquiátrica en la Región, ya que “después del terremoto del año 2010, se han presentado altos índices de demanda”. Además, agrega: “Tenemos un índice elevado de discapacidades mentales que hoy día, ante una crisis, no tienen cobertura en la Región”. Por ello concluye que “es un proceso largo, puesto que parte por un diagnóstico epidemiológico”, sin embargo cree que la nueva infraestructura del hospital puede cimentar alguna la posibilidad de concretar su sueño.
Calidad estilo Universidad de Santiago
En la actualidad, un abanico importante de las autoridades que rigen los destinos del país, comparten un especial lazo con nuestra Casa de Estudios. Al tratar de explicar el auspicioso presente por el cual atraviesan nuestros egresados, la Intendenta Contreras responde con convicción. “La Universidad de Santiago es hoy reconocida por la calidad que ha logrado mantener en el tiempo en sus distintas carreras, y no en un ámbito particular”.
“Lo que diferencia claramente a la Universidad de Santiago es el concepto de inclusión”, remarca la máxima autoridad regional de O”Higgins, puntualizando que “es lo más fuerte y elevado en términos de compartir los criterios acerca de que necesitamos una sociedad más justa, y de que todos los aprendizajes que hacemos están en pos de las personas de nuestro país”. Por eso- reflexiona- “personas de distintos estratos sociales optan por la Universidad de Santiago, porque saben que no sólo están los aprendizajes formales y técnicos que demanda una Carrera, sino que se ofrece una formación integral con un sello de responsabilidad social e inclusión”.
Y ahí dejamos a la autoridad con sus jornadas extenuantes de trabajo. Sí, porque desde que comenzó su labor de Intendenta, Morín Contreras lleva tan sólo dos domingos de descanso, pues se da el tiempo para compartir con la ciudadanía y escuchar sus demandas y necesidades. A tal punto llega su compromiso, que suele desplazarse por la ciudad mediante el trasporte público. Este ejercicio ciudadano le permite observar todo lo que sucede y sentir “la responsabilidad del cargo”, reflexiona, finalmente.