Momentos significativos marcan la trayectoria profesional de Guillermo Vera (en la fotografía), quien egresara de Ingeniería en Minas de nuestra Casa de Estudios el año 1987. Los tres títulos de Cobreloa mientras era dirigente en esa Institución, sus 20 años en Codelco Norte en diversos cargos directivos y su rol como vicepresidente y director de la ANFP en “la era Bielsa”, son algunos de los hitos de su desempeño social y profesional, que también incluyen su destacado rol como integrante de la Junta Directiva de la U. de Santiago de Chile.
El 6 julio de 2003 fue un día significativo para la trayectoria de Guillermo Vera, egresado de nuestra Casa de Estudios en Ingeniería en Minas. Después de 11 años y con un resultado categórico (4-0) contra Colo Colo, Cobreloa volvía a ser campeón del fútbol chileno.
Con orgullo y nostalgia rememora esa jornada, que dio paso a uno de los momentos más célebres de la historia del club nortino. Vera fue un actor preponderante de dicho logro deportivo: participó como director y vicepresidente entre los años 2001 y 2006.
“Tuve la fortuna de salir tres veces campeón con Cobreloa, después de muchísimo tiempo. Casi hicimos el tetracampeonato. Pero bueno, tuvimos una desafortunada experiencia de una final que perdimos con la “U” en Calama”, recuerda.
Desde un punto de vista personal, señala que “fue una linda experiencia y yo creo que la gente se acuerda con cierto cariño, porque las metas que nos propusimos era que después de 10 años volviéramos a salir campeones con Cobreloa (…). Tuvimos la fortuna de lograrlo y yo estuve ahí, participé en ese logro. Trabajamos para salir campeón y nos funcionó”.
Este vínculo con el balompié llegó de improviso, mientras era gerente de la Mina Chuquicamata en Codelco, empresa a la que ingresó en 1987, apenas egresó. “Me involucré con el futbol sin querer. Un grupo de trabajadores me invitó a participar en una votación y ellos me llevaron a la directiva de Cobreloa”, afirma.
Su exitosa experiencia en el club calameño lo condujo a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, ANFP (2006-2010), donde vivió uno de los periodos más exitosos del fútbol chileno, que llevó a la profesionalización de la gestión, además de la obtención de importantes logros deportivos.
“Es grato saber que uno participó, por lo menos, en el primer piso de estas construcciones que van cambiando las estructuras de los países. Los mineros son así: nos creemos el cuento. Trabajamos con lo más grande del mundo, con los camiones más grandes (…), con la mejor tecnología que existe. Nuestra mentalidad es un poco diferente al resto de la industria en Chile.”
Rigurosidad y lealtad
Éstas no han sido las únicas experiencias de liderazgo y trabajo en equipo en las que Guillermo Vera, actual socio-director de Grupo Latino, haya formado parte. Sus 20 años en Codelco Norte en cargos directivos y de gerencia avalan este sello profesional, forjado dentro de su paso por la Universidad de Santiago, que le han permitido liderar y participar en heterogéneos proyectos, tanto empresariales como sociales.
A su juicio, la rigurosidad, la lealtad y el ser muy directo al momento de enfrentar decisiones complejas, fueron las principales enseñanzas forjadas en el Plantel.
Para Guillermo Vera, su época universitaria estuvo marcada por un tránsito intenso, donde “se formaron amistades para toda la vida. Hasta el día de hoy, después de casi 30 años, seguimos siendo muy amigos. Estudiamos juntos mucho tiempo. Eso nos dejó un vínculo fuerte, que yo creo que es irrompible, para el resto de nuestras vidas”.
Vínculo con egresados
Vera, quien además es socio activo de la Fundación de Egresados y Amigos de la U. de Santiago de Chile (Fudea), considera que mantener un vínculo con la Universidad después de titulado es importante, pero afirma que esta relación debe ser de carácter bidireccional, donde el ex estudiante también tiene que jugar un rol activo.
Desde su perspectiva, “pasa mucho por el cariño que uno sienta por las personas que están ahí, por los profesores en especial (…). Si uno reconoce que fueron exigentes y nos transformaron en buenos profesionales, con el tiempo uno se da cuenta y lo agradece. Siempre se buscará la manera de devolver la mano”.
En esta dirección, ha realizado diversas labores junto a su Alma Máter, como integrar la Junta Directiva (2006-2010), además de colaborar en jornadas de trabajo en el contexto de la Acreditación Institucional.
Y ese cariño se lo ha inculcado a nuevas generaciones y con resultados: dos de sus hijos estudian actualmente en la Corporación.
Finalmente, a modo de reflexión, Guillermo Vera hace un llamado a los actuales estudiantes a sentirse orgullosos de la formación que están recibiendo, destacando el énfasis en integración social que realiza la Universidad.
A su juicio, esta línea de acción, junto con su sello de excelencia, la posicionan como una institución de categoría internacional, ya que “independiente de las características sociales, familiares, del núcleo familiar, no hay distingos: los que tienen y los que no tienen en la Universidad son iguales. Eso es muy importante”, concluye.