Este 8 y 9 de abril se realizará la Segunda Jornada de Salud Mental que organiza el Consejo de Universidades del Estado de Chile, Cuech, donde participará la Escuela de Psicología de la U. de Santiago, que analizará ejes como la “desigualdad, inequidades y procesos de salud mental”, “los aspectos subjetivos de la pandemia y el confinamiento”, “la salud mental, procesos políticos y política pública”, y “la subjetividad, afecciones y cuerpos”.
La Dra. Claudia Calquin, académica de la Escuela de Psicología de nuestro Plantel e integrante del comité organizador de la actividad, explicó que esta jornada es abierta y está dirigida a todos quienes se sientan parte de esta materia, como por ejemplo aquellos y aquellas profesionales de las ciencias sociales en general, trabajo social y educación.
“La jornada de este año está cruzada por los dos acontecimientos que han marcado últimamente la historia de este país: la pandemia de COVID-19 y la revuelta social del 2019”, sostuvo.
Según la doctora en Ciudadanía y Derechos Humanos, la crisis social y económica ha afectado a las comunidades y especialmente a los más pobres del país y los cuerpos más precarizados, en donde la catástrofe biológica “se acopló o cayó sobre un sistema económico social, que hace tiempo ya que está dando cuenta de su propio fracaso y de su imposibilidad de responder a la vida de las personas”.
“Uno de los argumentos que ponemos en la convocatoria, tiene que ver con que esta gestión biopolítica que se ha hecho durante la pandemia, que evidentemente ha demostrado que el interés está puesto en el capital, más que en la vida de las personas”, remarcó la Dra. Calquín.
El director de la Escuela de Psicología de la Usach, Marcos Barraza, también destacó esta instancia especial, de gran convocatoria nacional, que ofrece la jornada y apuntó a problematizar la situación de salud mental en el país, “teniendo presente que los indicadores siempre han sido débiles desde el punto de la intervención, pero que se han deteriorado aún más a razón de la pandemia”.
“Yo creo que la pandemia dejó de manifiesto que, en materia de salud pública y políticas sociales, con esta Constitución y con este modelo socioeconómico, las cosas siempre pueden ser peor. En estricto rigor lo que ha ocurrido es que las condiciones integrales de protección para las personas, las familias y las comunidades se han ido deteriorando, y una manifestación de esto son conflictos en la esfera de la salud mental”, indicó.
Barraza apuntó también a la relevancia de construir una política pública consistente con las necesidades de la población y que debe contemplarse en la próxima Constitución con un sistema de salud público que dé coberturas universales en el plano físico y mental.
La Dra. Claudia Calquín, reflexionó sobre la gestión de la pandemia que ha sido –dijo- en clave neoliberal y que ha asegurado que la gente siga trabajando, impactando y reduciendo a su mínimo todo el andamiaje social. Eso hoy día está en crisis, y en una crisis radical vemos cómo el sistema sanitario no está dando abasto”.
Además, destacó que las investigaciones de académicos estarían denunciando, y no sólo mostrando, el casi nulo sistema social comparable con la crisis de la dictadura.