- Lidia Espinoza recibió el galardón a mejor póster en el área de electroquímica ambiental e industrial, en el marco del XXI Congreso de la Sociedad Iberoamericana de Electroquímica (SIBAE); ello, en función de su trabajo sobre los mecanismos para neutralizar los daños producidos por fármacos en efluentes de aguas naturales.
Destacados científicos de toda Iberoamérica se reunieron del 6 al 11 de abril en el "XXI Congreso de la Sociedad Iberoamericana de Electroquímica (SIBAE)", actividad realizada en La Serena y que convocó a más de 350 asistentes, quienes discutieron en torno a los últimos avances e investigaciones realizados en el campo de la electroquímica.
En la actividad se premiaron los mejores trabajos presentados, entre ellos el de la estudiante de la Facultad de Química y Biología del Plantel, Lidia Espinoza. El estudio "Degradación de oxitetraciclina mediante oxidación anódica", presentado en la categoría de electroquímica ambiental e industrial, aborda los mecanismos para contrarrestar los efectos y daños que producen las altas concentraciones de fármacos en los efluentes de aguas naturales.
Experiencia enriquecedora
"Haber participado fue una experiencia muy enriquecedora, tanto en lo personal como en lo profesional; instancias como éstas permiten crear y/o fortalecer futuras colaboraciones. Para una, como estudiante e investigadora joven, el reconocimiento es un estímulo para seguir desarrollando trabajos en el área", comentó Lidia respecto a su investigación realizada en el laboratorio de electroquímica medioambiental de la Facultad, a cargo de los doctores Ricardo Salazar y Cristhian Berríos.
Y agrega la estudiante: "Me sentí muy bien porque estábamos compitiendo con uno de los investigadores que más trabajos ha realizado en este ámbito. A raíz de eso, una advierte que las investigaciones que se realizan en nuestro laboratorio se encuentran en un muy alto nivel y logran trascender más allá de la Universidad. Es un premio al trabajo personal y al grupo del laboratorio por el apoyo y esfuerzo que todos aportamos".
Degradación de fármacos
La investigación se centró en los mecanismos para contrarrestar los efectos y daños que producen las altas concentraciones de fármacos en los efluentes de aguas naturales. "El consumo de los fármacos no se reduce solamente a seres humanos. En este caso, el fármaco que degradé se utiliza mucho en medicina veterinaria, particularmente en la industria salmonera para tratar enfermedades de importancia comercial que afectan a los salmones", indica la futura Licenciada en Química.
"El medicamento se puede administrar directamente o disolviéndolo en el agua que consumen los peces", explica la estudiante y agrega que "el problema es que no toda esa droga es consumida por ellos, lo que significa que posteriormente se liberan residuos a los ductos naturales los que, finalmente, contaminan las aguas".
Frente a este problema, explica finalmente Lidia Espinoza, “la propuesta es degradar el fármaco a través de procesos de oxidación electroquímica avanzados, evitando que se generen bacterias multiresistentes frente a estos antibióticos, al existir una alta concentración de ellos en el agua".