Según información entregada por la SONAMI (Sociedad Nacional de Minería), Chile es un importante actor en la producción mundial de la industria minera metálica (cobre y renio) y no metálica (nitratos naturales y yodo), pero ¿ha tenido cambios el proceso extractivo de nuestro país? La respuesta es sí, en los últimos años se ha propiciado una minería sostenible.
El director del Departamento de Ingeniería en Minas de la Usach, Juan Pablo Hurtado, explica que “cuando hablamos de minería sostenible, nos referimos a un tipo de actividad extractiva en la que las comunidades, el medio ambiente y una forma de producir más limpia son factores clave para la producción, aspectos que 20 años atrás no eran protagonistas y que, al día de hoy, hacen que no se conciba la industria como tal sin estar presentes”.
No obstante y aun considerando esta nueva forma de hacer minería, el proceso extractivo efectivamente tiene un impacto en el medio ambiente. Así lo señala la académica del Departamento de Ingeniería en Minas Usach, Patricia Muñoz,
Recalca que “hay que entender que la minería, en principio, es un área productiva compleja en sus procesos, que contamina. Sin embargo, Chile tiene importantes avances en materia de regulación, como son el Estudio de Impacto Ambiental (EIA Ley 19.300), que cada proyecto minero debe presentar para la obtención de una RCA (Resolución de Calificación Ambiental), cuestión clave para la factibilidad de la realización de uno; como también la presentación de un Plan de Cierre (Ley 20.551), el cual asegura la realización de acciones de mitigación y cierre de las instalaciones de un proyecto una vez cumplida su vida útil”.
En este sentido, estos esfuerzos se enmarcan en la Política Nacional Minera 2050, regulación de Estado que orienta el desarrollo del sector en el corto, mediano y largo plazo para potenciar la minería como motor de desarrollo sostenible de Chile.
En este contexto, la profesora asociada de la Facultad de Química y Biología, Claudia Ortiz, pone énfasis en que “esta política nacional minera, que tiene una planificación de aquí al 2050, es una especie de road map que marca la sostenibilidad en el ámbito minero en varios aspectos, por ejemplo, la utilización racional del recurso hídrico, protección a glaciares, la incorporación de procesos que sean más verdes, más amistosos con el medio ambiente, entre otros.
Entonces, añade, “está la institucionalidad y, por otra parte, la obligatoriedad de las empresas a cumplir con esa institucionalidad de manera que también las empresas tienen que invertir en innovación, en desarrollo, en nuevas tecnologías, en cambios de procesos para poder cumplir”.
Considerando el gran desafío que representa tener procesos productivos más sostenibles es que la Universidad de Santiago de Chile cuenta con distintas líneas de investigación. Tal es el caso de la economía circular en la industria minera, que apunta repensar el proceso más allá de fabricar, utilizar y desechar.
Según explica la académica Patricia Muñoz, “durante el 2020 realizamos una encuesta a profesionales que se desempeñan en la industria minera y pudimos identificar la preocupación y alto conocimiento sobre economía circular. Al año siguiente publicamos un artículo sobre modelos de negocio, una propuesta para una minería sostenible en tanto se plantea una lógica de transitar de ‘producto’ a ‘servicio’ PSS (Product Service System), esto es, desde la perspectiva del proveedor de la minería, el paso de una lógica de venta de productos a vender servicios, lo cual conlleva el beneficio de que el fabricante se debe hacer cargo de los equipos durante todo el ciclo de vida desde la operación, mantenimiento, overhaul, hasta los desechos”.
Esto último es un cambio significativo ya que asegura y asigna responsabilidades respecto de los desechos, cuestión que en Chile también muestra avances importantes, como es la LEY REP 20.920 (Responsabilidad Extendida del Productor), destaca la docente.
Otra de las líneas investigativas de la Usach corresponde al impacto medioambiental. En este sentido, la profesora Claudia Ortiz señala que “trabajamos en temas que están asociados a la sustentabilidad ambiental de la minería, es decir cómo podemos apoyar los procesos una vez que ya se han realizado las extracciones o la producción. Hay una ley de cierre de faenas mineras que obliga a las empresas a presentar un plan de cierre en donde deben incorporarse medidas y actividades que permitan llevar el sitio a un estado similar al que se encontraba originalmente, sobre todo desde el punto de vista de la seguridad, que se llama estabilidad química y física, que tiene que ver con aguas ácidas, dispersión de material particulado al ambiente, intervención ambiental. Entonces, nosotros apoyamos eso con tecnologías que son verdes, que son amistosas, que son bastante más baratas que las convencionales”.
Te invitamos a ver el siguiente video donde integrantes del cuerpo académico de la Universidad de Santiago explican cómo se aplica la perspectiva sostenible a la forma en que se desarrollan investigaciones orientadas a la minería.