La sustentabilidad y el cuidado del medioambiente son temas que hace años se encuentran en la agenda programática de la Universidad de Santiago de Chile. Así lo establece el actual Plan Estratégico Institucional (PEI 2030), el cual está orientado a que la institución se convierta en líder nacional en la contribución a la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible de la ONU y que entre sus cinco ejes de acción tiene a la Sostenibilidad.
Siguiendo esa directriz, en el sector del Gimnasio Usach fue instalado un contenedor de reciclaje de residuoseléctricos y electrónicos. Esta acción tiene como objetivo fomentar la recolección responsable, además de la gestión adecuada de este tipo desechos generados al interior del Campus.
Angélica Soto, coordinadora del Área de Sostenibilidad de la Dirección de Planificación y Desarrollo Territorial de nuestra Universidad, junto con señalar que estas iniciativas están enmarcadas en un plan integral de manejo de residuos, celebró que se concretará la instalación, donde participaron el Centro de Innovación de la Facultad de Ingeniería y la empresa Pañiwe, ya que uno de los puntos de la Política de Sostenibilidad es apoyar e impulsar la colaboración entre el mundo privado y el público.
“Al ir concretando este mandato, estamos llevando nuestra normativa al quehacer diario de la comunidad universitaria. Sabemos que es un tema transversal y que es necesario que nos involucremos como parte de la Usach en este tipo de iniciativas”, remarcó.
Claudia Seco Farías, gerenta del Centro de Innovación de la Facultad de Ingeniería, indicó que nuestra Casa de Estudios cuenta con una comunidad sumamente consciente. “Este hito responde a las necesidades que tenemos como grupo humano en esta área. Esperamos que el contenedor se utilice y que sea el primero de muchos en nuestro Campus con esta especificidad”, dijo.
Proceso operativo
César Castro Araya , director ejecutivo de Pañiwe - empresa autorizada para el tratamiento de este tipo de materiales y dueña del contenedor-, explicó que puede recibir “computadores portátiles, celulares, hervidores, planchas en desuso, incluso puedes dejar pilas, pero dentro de una botella plástica para que no se contaminen el resto de los aparatos. Sin embargo, para que puedan entrar, no deben superar la medida máxima de 50 centímetros”.
El depósito tiene una capacidad de tres metros cúbicos y cuenta con un sensor de llenado que gestiona la carga contenida la que, a su vez, es monitoreada de manera remota por personal de la empresa. Cuando alcanza el 50% de su capacidad genera una alerta. Al llegar al 60% de llenado, “hacemos el retiro de los artefactos, que son cerca de doscientos kilos de residuos”, puntualizó.
Luego, los desechos son llevados a una planta de tratamiento donde pasarán por dos procesos: uno manual y otro mecánico. “En el primero, se retiran las fracciones peligrosas de los residuos. En el segundo, pasan a un proceso mecánico donde se trituran y se realizan separaciones magnéticas. Lo que haremos básicamente será recuperar todo tipo de metales básicos e incluso preciosos, que luego enviaremos a refinerías nacionales, pero si no podemos hacer ese proceso acá, los exportaremos a refinerías especializadas para concluir con el proceso de reciclaje”, detalló Castro.
“No sé qué hacer con ellos”
Jennifer Bascuñán Moya, estudiante de Ingeniería Civil en Minas, pasaba por el sector del Gimnasio Usach cuando se percató que estaban instalando este contenedor. Tras conocer su función y el objetivo del mismo valoró la iniciativa, ya que existe poca información sobre lugares para deshacerse de estos artefactos.
“En mi casa tengo mucho materiales tecnológicos y a veces no sé qué hacer con ellos, entonces que existan estas instancias para reciclarlos es súper importante”, opinó.
Conoce más de esta iniciativa que nos permite continuar cuidando el medioambiente en el siguiente video: