Advirtió que "esto no quiere decir que la información sea completamente inocua. La información tiene que estar realmente anonimizada, ya que es sumamente sensible; habla de dónde vives, dónde trabajas, cuáles son tus hábitos, cuál es tu rutina, predecir comportamientos futuros.
Viollier espera que ese proceso se haga bien, "eso significa que las empresas no le pueden pasar al ministerio la base de datos completa y decirle 'tu anonimizala'. Las empresas tienen la capacidad, pero les va a salir caro", precisó.